Qué es la dermatitis

Qué es la dermatitis Guía práctica para prevenirla y cuidar la piel

La dermatitis es una afección cutánea común que se caracteriza por la inflamación de la piel, provocando síntomas como enrojecimiento, picazón, hinchazón, y en algunos casos, ampollas o descamación. Existen diferentes tipos de dermatitis, siendo las más frecuentes la dermatitis atópica, dermatitis de contacto, y dermatitis seborreica. Si tienes alguna inquietud recuerda contactarnos a través de nuestras redes sociales, o regístrate y déjanos un comentario en esta página para poder ayudarte. También puedes participar en el WhatsApp Ecuador.

Aunque no es contagiosa, puede causar molestias significativas y afectar la calidad de vida de quienes la padecen. La dermatitis atópica, también conocida como eccema, suele presentarse en personas con antecedentes de alergias o asma. Es frecuente en niños, aunque también puede persistir en la edad adulta.

Mientras que la dermatitis de contacto ocurre cuando la piel entra en contacto con sustancias irritantes o alérgenos, como productos químicos, cosméticos o ciertos metales.

Y la dermatitis seborreica se manifiesta en áreas del cuerpo con mayor producción de grasa, como el cuero cabelludo, la cara y el pecho. Está relacionada con factores genéticos y la actividad de las glándulas sebáceas.

Las causas de la dermatitis varían según el tipo, pero en general pueden incluir factores genéticos, contacto con irritantes, alergias, sequedad de la piel, cambios climáticos, e incluso el estrés. La dermatitis atópica, por ejemplo, tiene un componente hereditario, mientras que la de contacto se produce cuando la piel reacciona a sustancias externas, sostiene la doctora Carla Cevallos, médico ocupacional de Bagó.

Un estudio de la Fundación Ecuatoriana de Dermatología en indica que el 20% de los niños y el 10% de los adultos en el país experimentan dermatitis en algún momento. A nivel global, la OMS reporta que la dermatitis atópica afecta al 15-20% de los niños y al 1-3% de los adultos.

En Ecuador, esta condición, que incluye dermatitis atópica, de contacto y seborreica, afecta al 10% de la población infantil, con un aumento en los casos recientes. Los factores incluyen predisposición genética, exposición a alérgenos, irritantes ambientales y condiciones climáticas extremas.

 

Consejos para prevenir la Dermatitis

Hidratación Regular:

Mantener la piel bien hidratada es esencial para prevenir la resequedad. Se recomienda el uso de emolientes adecuados, especialmente en climas cálidos y húmedos para ayudar a mantener la barrera cutánea.

Evitar Irritantes:

Es crucial identificar y evitar sustancias que puedan desencadenar una reacción en la piel. Esto incluye ciertos detergentes, productos de cuidado personal con fragancias fuertes y materiales sintéticos.

Cuidado con el Clima:

Se recomienda utilizar ropa ligera y transpirable y evitar la exposición prolongada al sol. Las prendas hechas de fibras naturales, como el algodón, permiten que la piel respire y reducen la irritación. Evita las telas sintéticas y ajustadas, que pueden aumentar la sudoración y el roce.

Consulta con un Especialista:

Se aconseja a las personas con síntomas persistentes que busquen la orientación de un dermatólogo para recibir un diagnóstico adecuado y un plan de tratamiento personalizado.

Aunque la dermatitis presenta algunos desafíos, puede ser manejada eficazmente con el tratamiento adecuado y al adoptar un enfoque proactivo, es posible minimizar su impacto y mejorar el bienestar general.