Cáncer de mama cómo prevenirlo. El Día Internacional de la Lucha contra el Cáncer de Seno, que se conmemora cada 19 de octubre, es también una oportunidad para reforzar la prevención contra esta patología. Si tienes alguna inquietud recuerda contactarnos a través de nuestras redes sociales, o regístrate y déjanos un comentario en esta página. También puedes participar en el WhatsApp. Si usas Telegram ingresa al siguiente enlace.

Tocarse no es suficiente. El cáncer de mama —la principal patología cancerígena por la más personas mueren en Ecuador— debe ser prevenido de forma integral. En el país, 18 mil ecuatorianos y ecuatorianas fallecen al año debido al cáncer: el 12% del total por el de mama, de acuerdo con datos de la Sociedad Ecuatoriana de Ginecología y Obstetricia de Pichincha.

Para la médica Verónica Andino, cirujana mastóloga y miembro de la Sociedad Ecuatoriana Multidisciplinaria de Mastología (SEMMA), el Día Internacional de la Lucha contra el Cáncer de Seno, que se conmemora cada 19 de octubre, es siempre una oportunidad de derribar tabúes, impulsar la educación y la prevención ciudadana para combatir esta enfermedad que se diagnostica a 8 mil mujeres al año en el país.

El contexto ecuatoriano está alineado, además, a la realidad mundial: la Organización Panamericana de la Salud mantiene que el cáncer de mama es el tipo de cáncer más frecuente y más común de muerte por cáncer en mujeres en todo el mundo. En promedio, esta enfermedad afecta, sobre todo, a mujeres menores de setenta años. Para la doctora Andino —que atiende a pacientes que padecen la patología— en Ecuador, el grupo etario más vulnerado por el cáncer se centra en las mujeres de entre 40 y 50 años.

La educación, el primer paso

Decenas de campañas se han replicado con un solo mensaje: “tócate”, que han impulsado, a través de los años, la autoexploración mamaria. Y si bien es una herramienta de aprendizaje social —dice la médica Andino— también ha creado una confusión. “Esas campañas suelen ser, sobre todo, políticas. Hemos visto que lo que han hecho es confundir al paciente, porque notamos que dicen: ‘yo me he tocado y no hay nada’. Entonces, dejan de ir al doctor y no se hacen la mamografía, que es el examen obligatorio para detectarlo”, cuenta la doctora. Para ella, conocer nuestro cuerpo es lo adecuado, pero, “no debemos dejar de acudir al médico. Ese tipo de campañas son para concienciar a la población, pero no para una detección oportuna del cáncer”, dice. La educación es lo vital.

Si bien el cáncer de mama es multifactorial, hay factores de riesgos que deben ser entendidos, dice Andino. Entre ellos, están:

• Mutación genética: las personas que han heredado mutaciones de ciertos genes —como el BCRA1 y el BRCA2— tienen mayor riesgo de padecer cáncer de mama, pero también de ovario.
• Antecedentes de familiares con la enfermedad: Es también un riesgo para una persona si sus parientes en primer grado —como hermanas, madres o hijas— pero también de segundo grado —primas, abuelas— padecieron la patología.
• No haber dado de lactar.
• Obesidad.
• Con el paso de los años, el riesgo de padecer cáncer de seno aumenta. Por eso, es obligatorio que una persona se realice una mamografía anual a partir de los cuarenta años.

Existen también signos en el cuerpo que encienden las alertas, comenta la médica Andino. Si notas uno de estos síntomas, acude a tu médica o doctor de confianza:

• Si notas un bulto irregular o nuevo en uno de tus senos o debajo del brazo, es decir, en la zona de la axila, ve a tu médica de confianza.
• La presencia de piel naranja —que es la formación de unos hoyuelos pequeños en la piel— en tus senos, puede ser también un signo que debe alertarte para consultar con un profesional.
• Si ves que el grosor de tu seno ha aumentado o presenta hinchazón, ve al médico.
• Si tu seno presenta irritaciones o hundimientos en la piel, acude a tu doctor de confianza.
• Si de tu pezón notas que emite una secreción —que no sea leche— debes ir al doctor.
• Si sientes dolor o ves un cambio notorio en un seno, debes ir al médico.

Derriba los mitos y combate el riesgo

¿La mamografía me puede dar radiación? ¿Puede causar problemas de las tiroides?”, son solo algunos de los mitos en torno a la mamografía, que, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, es la herramienta de análisis más efectiva para la detección del cáncer de mama. Sin embargo, hay varios mitos que la rodean.

La doctora Andino descarta que la mamografía cause radiación. “Les han instaurado eso no solo en su cabeza, sino también a nivel social. Y es preponderante que se realicen la mamografía. No van a tener radiación”, aclara. Ella también dice haber visto “que algunas pacientes se tapan el cuello, porque tienen temor que tener problemas en sus tiroides. Eso no es así, hay que desmontar ese mito”, cuestiona.

Pero, quizá, uno de los mayores mitos que aún no logran derribarse es aquel de que el cáncer es “sinónimo de muerte”. No es verdad, dice la especialista. “Con una detección temprana, se puede tener una vida saludable. Lo importante es que se realicen los exámenes, aunque hay un problema de acceso, sobre todo, en las instituciones públicas”, dice la médica.

Ecuador, actualmente, afronta una crisis en los servicios de salud y uno de los grupos de pacientes más afectados son los oncológicos. “Hace falta una política pública que les garantice el acceso a los examenes para la detección temprana de la enfermedad, pero también de garantías para los pacientes que enfrentan el cáncer. No todos pueden pagar un servicio privado”, dice.

En el sistema de salud público, critica Andino, la demanda de pacientes suele ser tan alta, que hay personas que recién pueden acceder a un examen después de seis meses de haberse requerido. “Cuando eso pasa, el tumor ya crece. Lo importante es detectarlo antes, incluso en centros de primer nivel. Pero el sistema está tan saturado, que hay derivaciones a hospitales de segundo y tercer nivel y todo termina colapsado”, asegura.

Frente a ese panorama, la doctora Andino reitera que el padecimiento de la enfermedad es multifactorial, pero, hay también factores de riesgo que pueden reducirse si los pacientes:

• Tienen una buena dieta alimenticia, con alto consumo de nutrientes y vegetales.
• Es importante evitar tener una vida sedentaria. En cambio, la actividad física es primordial para evitar la obesidad.
• Evite el consumo de alcohol.
• Evite también el consumo de tabaco.
• Enfrente el miedo: consulte a su médico de confianza sobre los riesgos y tratamientos para combatir la enfermedad.

¿A dónde ir para el examen de la mamografía?

Te presentamos una breve lista de centros de salud de la red del Ministerio de Salud Pública por zona distrital para que puedas acudir:

Zona 1 (Carchi, Esmeraldas, Imbabura y Sucumbíos)

• Hospital Marco Vinicio Iza
• Hospital General Delfina Torres de Concha, Esmeraldas
• Hospital Luis Gabriel Dávila

Zona 2 (Napo)

• Hospital General Francisco de Orellana

Zona 3 (Chimborazo, Cotopaxi, Pastaza y Tungurahua)

• Hospital General Puyo, en Puyo
• Hospital Provincial General de Latacunga
• Hospital Provincial General Docente de Riobamba

Zona 4 (Manabí y Santo Domingo)

• Hospital General Verdi Cevallos Balda, en Portoviejo
• Hospital Doctor Gustavo Domínguez, en Santo Domingo

Zona 5 (Bolívar, Los Ríos)

• Hospital General Alfredo Noboa, en Guaranda
• Hospital General Martín Icaza, en Babahoyo

Zona 6 (Azuay, Cañar y Morona Santiago)

• Hospital Homero Castanier Crespo, en Azogues
• Hospital Vicente Corral Moscoso, en Cuenca
• Hospital General de Macas, en Morona Santiago

Zona 7 (El Oro, Loja y Zamora Chinchipe)

• Hospital Obstétrico Ángela Loayza de Ollague, en El Oro
• Hospital Básico Yantzaza, en Zamora Chinchipe
• Hospital General Julius Doepfner, en Zamora Chinchipe
• Hospital General Isidro Ayora, en Loja

Zona 8 (Guayas)

• Hospital Abel Gilbert Pontón, en Guayaquil
• Hospital General Guasmo Sur, en Guayaquil
• Hospital del Día Mariana de Jesús, en Guayaquil
• Hospital Universidad de Guayaquil

Zona 9 (Pichincha)

• Hospital Enrique Garcés, en el sur de Quito
• Hospital Gineco Obstétrico Nueva Aurora, en el sur de Quito
• Hospital General Pablo Arturo Suárez, en el norte de Quito