Tomó como la representación de la corrupción a Daniel Salcedo, involucrado en la red de compras ilegales en hospitales públicos.

Punto Noticias. A criterio de Napoleón Saltos, catedrático universitario y analista político, la presencia de la pandemia del Covid-19 generó un fenómeno de transparentación de los actos de corrupción.

Cree que lo nuevo, en este ámbito de la corrupción que ha venido arrastrándose durante mucho tiempo, es que ahora los hechos de corrupción se destapan inmediatamente se ejecutan, gracias a la intervención, sobre todo, de las redes sociales.

A su entender, los últimos acontecimientos han permitido ver la conexión que tienen con episodios anteriores, como la red de corrupción en los hospitales públicos y la adquisición fraudulenta de insumos y medicamentos.

Saltos plantea reconstruir la cadena de corrupción en su conjunto, ir al origen y a las causas, para evitar que se quede en solo el espectáculo, que dura 15 días, los corruptos esperan que pase la bulla y siguen gozando de sus beneficios.

El analista tomó como referente a Daniel Salcedo, que se accidentó en la avioneta de Alfredo Adum Ziadé y asociado con la corrupción detectado en el hospital Teodoro Maldonado Carbo de Guayaquil, por compra de insumos médicos con sobreprecio, durante la emergencia sanitaria.

Sostiene que Salcedo es la representación de lo que es la corrupción en el país, que aparece ahora, pero que, desde que tenía 19 años, entró en la cadena y metodología de la corrupción, en la estructura de la corrupción, que lleva formada muchos años atrás.

Este tipo de corrupción, dice Saltos, no funciona sin una relación con el poder político y económico. Y el poder político lo encarna Abdalá Bucaram, de quien se dice que normalizó la corrupción cuando se publicitó el primer millón conseguido por su hijo Jacobito y ahora sigue operando, con el método instaurado que es la negociación de prebendas y de botines políticos, a cambio de lealtades y apoyos.

El catedrático también cuestionó la actuación de la justicia, representada por la fiscal Diana Salazar, porque opera en consenso para luchar contra la corrupción, del otro, mediante cálculo político, sostuvo.