Nikola Kalinic, el hombre que fue expulsado del Mundial de Rusia-2018 por negarse a ingresar en los últimos minutos del debut de Croacia contra Nigeria afirmando sentir dolores en la espalda, rechazó su medalla de plata.

Su selección llegó hasta la final contra Francia, cayendo por 4-2 en Moscú y recibió la medalla de plata como subcampeón del torneo.

A Kalinic le correspondía una presea plateada por ser parte de los 23 jugadores convocados por el técnico Zlatko Dalić que habían iniciado la Copa del Mundo.

Según el portal Sportske Novosti, el jugador de 30 años habría decidido rechazarla por no sentirse responsable al no haber jugado ningún partido.

«Gracias por la medalla, pero no jugué en Rusia», declaró al medio.

El delantero del AC Milan estuvo cinco días en el torneo antes de ser enviado a casa. El DT Dalic dijo que Kalinic había usado la misma excusa en un amistoso anterior y que se había saltado entrenamientos. (D)

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