Motorola Edge 50 Pro a

Motorola Edge 50 Pro

Motorola arranca una nueva etapa. Una en la que inicia un ambicioso plan para conquistar el top 3 de ventas de móviles en Europa. La familia Moto G es la que mejor sigue funcionando en países como España, pero hablar de lo mejor de Motorola es hablar de la familia Edge. Si tienes alguna inquietud recuerda contactarnos a través de nuestras redes sociales, o regístrate y déjanos un comentario en esta página para poder ayudarte. También puedes participar en el WhatsApp Ecuador.

El Motorola Edge 50 Pro es un terminal que acaricia con los dedos la gama alta, pero que renuncia a algunos aspectos como la máxima potencia o los mejores sensores de cámara para ofrecer una experiencia premium a un precio algo más ajustado.

He podido probar a fondo este teléfono en unas circunstancias bastante especiales, y esta ha sido mi experiencia tras ponerlo al límite en todas y cada una de ellas. Si quieres un móvil diferente, este teléfono es para ti.

 

Ficha técnica del Motorola Edge 50 Pro

motorola edge 50 pro
DIMENSIONES Y PESO161.2 x 72.4 x 8.2 mm

186 g

PANTALLAP-OLED

6,7 pulgadas

Tasa de refresco de 144 Hz

2.000 nits brillo pico

HDR10+

PROCESADORQualcomm Snapdragon 7 Gen 3 (4nm)
MEMORIA RAM8 o 12 GB
ALMACENAMIENTO256 o 512 GB UFS 2.2
BATERÍA4.500mAh

Carga rápida de 125W

Carga rápida inalámbrica de 50W

Carga rápida inalámbrica reversible de 10W

CÁMARAS TRASERAS50 MP, f/1.4, 1/1.3″, OIS

10 MP, f/2.0, telefoto de tres aumentos ópticos, OIS

13 MP, f/2.2, ultra gran angular

CÁMARA FRONTAL50 MP, f/1.9
SISTEMA OPERATIVOAndroid 14
SONIDODoble altavoz estéreo

Dolby Atmos

CONECTIVIDADWiFi 802.11 a/b/g/n/ac/6e

5G SA/NSA

Bluetooth 5.4

OTROSCaja perfumada

Lector de huellas bajo la pantalla

Ready For

DisplayPort 1.4

IP68

PRECIODesde 699 euros

Diseño, pantalla y sonido: más allá de la gama media

La experiencia con este teléfono arranca desde que lo sacamos de la caja. Una que, para sorpresa del usuario… huele. Cada una de las unidades del Moto Edge 50 Pro tiene un ligero perfume en su packaging, un pequeño factor diferencial para que la experiencia sea distinta. En la caja vienen tanto el cargador de 125W como una funda que protege la parte trasera del teléfono (pero no sus laterales), algo que agrademos en tiempos en los que los fabricantes son cada vez menos generosos con las cajas.

Respecto al diseño del terminal, también es distinto a lo que acostumbramos a ver en sus rivales. Hay tres acabados para este teléfono: madera (realmente es un acetato), o un polímero siliconado que hace la función de «cuero vegano». Nuestro acabado es el siliconado, con una textura rugosa y fácil de describir: se parece a la textura de una goma de borrar. Hay que hacerse a ella, ya que es algo extraña en un principio. Tras unos días de uso, lo cierto es que es una textura agradable.

Los laterales están fabricados en aluminio y, aunque no he tenido la mala suerte de que se caiga, el teléfono luce bastante resistente. Pese a no ser un flagship, este teléfono viene con protocolo IP68, por lo que es resistente a inmersiones de 1.5m (no lo recomiendo, ya que no lo cubre la garantía) y cuenta con cierta resistencia al polvo.

Por delante es un terminal muy bien aprovechado, aunque el 92% de aprovechamiento frontal que asegura Motorola arroja alguna duda, ya que no son los biseles más aprovechados que hayamos visto. Las pantallas curvas ayudan a adulterar este dato, por lo que lo cogemos con pinzas.

Esta es la primera pantalla certificada por Pantone, como acuerdo entre Motorola y la empresa referencia en color

Hablando de pantallas y de curvas, estamos ante una P-OLED de 6,7 pulgadas, con tasa de refresco de 144 Hz, 2.000 nits de brillo pico y compatibilidad con HDR10+.  Es la primera pantalla validada por Pantone pero, ¿qué significa esto? Que la principal empresa que marca el lenguaje universal del color certifica que la calibración de este panel es la correcta según sus estándares.

 

Opciones de configuración del panel.

Bajo mi experiencia, a Pantone no le falta razón. La pantalla del Motorola Edge 50 Pro está muy bien calibrada, sin una saturación excesiva y con tres modos de color para ajustarla a nuestro gusto: Natural, Brillante e Intenso. Me he encontrado cómodo con el ajuste intenso que viene por defecto, aunque si queremos un toque menos saturado la solución perfecta es apostar por «natural».

 

La única pega del panel: las curvas.

La pantalla es sobresaliente: muy buen nivel de brillo con 2.000 nits de pico (no tenemos el dato HBM, pero se ve muy bien al sol), ángulos de visión espectaculares (las P-OLED suelen azulear al inclinarlas, pero esta no), resolución por encima de Full HD (1.5K). Por el precio de este teléfono no se puede pedir un mejor panel. La única pega son las curvas, demasiado pronunciadas y con los clásicos sombreados. No he tenido problemas con toques fantasma, pero un panel plano hubiese sido la guinda del pastel.

Comentar por último que este panel no cuenta con ningún tipo de protección mediante lámina plástica o cristal templado. En estas semanas de uso ya tiene unos cuantos microarañazos inevitables al guardarlo en el bolsillo. Si decides hacerte con este teléfono, te recomiendo comprarlo junto a alguna protección adicional.

Este teléfono cuenta con doble altavoz estéreo, con bastante pegada aunque una notable falta de graves. Es un sonido correcto, pero se aleja de lo que encontramos en exponentes de las gamas más altas.

Sí que me han gustado las opciones de personalización de Dolby Atmos: podemos crear perfiles personalizados para nuestros dispositivos de audio, contamos con audio inteligente que identifica el contenido que estamos escuchando para reproducir el sonido de la forma más óptima, y los altavoces se ajustan para adaptar el estéreo tanto si estamos usando el móvil en vertical como en horizontal.

Rendimiento, software y autonomía: dos buenas noticias y otra no tan buena

El Motorola Edge 50 Pro es uno de los primeros teléfonos en aterrizar al mercado con el Qualcomm Snapdragon 7 Gen 3, la nueva propuesta de gama media del fabricante americano. En concreto, nuestra unidad llegaba con 12 GB de memoria RAM. Pese a la configuración a priori ganadora, el rendimiento es uno de los puntos débiles en este teléfono.

El Snapdragon 7 Gen 3 no es un mal procesador, pero pese a la limpieza del software, el rendimiento no brilla

El Moto Edge 50 Pro no se siente todo lo ágil que debería ser un terminal de este calado. La app de cámara funciona algo lenta, hemos tenido algún redibujado de la interfaz, algún que otro cierre de aplicaciones. El teléfono necesita una actualización para pulir estos puntos, aunque el procesador seguirá quedándose algo corto.

motorola edge 50 proNOTHING PHONE 2APOCO F5 proREALME 12 PRO+POCO X6 PRO
PROCESADORSnapdragon 7 Gen 3MediaTek Dimensity 7200 ProSnapdragon 7+ Gen 2Snapdragon 7S Gen 2MediaTek Dimensity 8300 Ultra
RAM12 GB12 GB12 GB12 GB12 GB
GEEKBENCH 5/6 (SINGLE/MULTI)1.138 / 3.106 (6)1.141 / 2.593 (6)1.643 / 4.350 (6)953 / 2.624 (6)1.421 / 4.419
3D MARK Wild Life Unlimited5.5204.2617.5943.04911.694
PCMARK WORK14.60513.28214.09011.60414.446

Tampoco termino de entender la decisión con las memorias: son de tipo UFS 2.2. Es una tecnología suficiente para la gama media estándar, pero un móvil tan ambicioso como este el UFS 3.1 (presente en algunos móviles incluso más económicos), era prácticamente obligatorio

Donde sí estoy especialmente contento es con el software: personalizado por Motorola, con Android 14 y cuatro años de actualizaciones de sistema. Motorola siempre ha apostado por una versión «pura» de Android, aunque en esta generación han querido pulir aún más el concepto. A nivel visual no es puro AOSP, pero sí bastante similar. Panel de notificaciones, panel de ajustes rápidos, launcher… Todo tiene una ligera personalización, pero la interfaz es muy agradable.

El software de Motorola es una maravilla.

A nivel de funcionalidades, contamos con opciones como Ready For, el modo para utilizar nuestro móvil como un PC conectándolo a un PC Windows. No solo permite esto: podemos usar el teléfono como webcam, compartir portapapeles, transferir archivos, etc. Estas opciones se pueden utilizar siempre y cuando contemos con un PC Windows o una tablet Android. Si tenemos un Mac, no funcionarán.

En el caso de que no usemos Windows, siempre podemos apostar por Moto Connect, que permite conectar el móvil a una Smart TV mediante Miracast y Chromecast.

También hay opciones de personalización curiosas, como la de poder crear un fondo de pantalla por IA a través de patrones generados a partir de fotografías que hemos tomado con nuestro teléfono.

Respecto a la autonomía… wow. He sido capaz de tener duraciones cercanas a las cinco horas de pantalla (con un uso desmesurado de cámara) en más de dos días de uso, y sin problemas se pueden superar las ocho horas en una jornada intensiva con mucho WiFi. La batería de 4.500mAh rinde de forma excelente, y si le sumamos carga rápida de 125W, los resultados son ejemplares.

Este teléfono se carga del 0 al 50% en menos de 10 minutos, y completa el ciclo de carga en un poco más de media hora. Me ha gustado que el teléfono avise de que estamos cargando de forma ultra-rápida con una advertencia de que podría calentarse, y que venga con opciones para limitar la carga al 80% o hacer que la carga rápida sea algo más progresiva.

Cámaras: así es la nueva era Pantone de Motorola

Este Motorola Edge 50 Pro es el primer teléfono que llega al mercado en colaboración con Pantone. La traducción es que, según la empresa tras los estándares de color Pantone, esta cámara cumple a la perfección con los estándares que marca. Pero, antes de hablar de los resultados, repasemos brevemente el hardware y la app de cámara de este sistema fotográfico.

  • Cámara principal de 50 megapíxeles, apertura f/1.4, OIS.
  • Cámara teleobjetivo de 10 megapíxeles, apertura f/2.0, OIS, zoom óptico de tres aumentos.
  • Cámara ultra gran angular de 13 megapíxeles, f/2.2.

La app de cámara es bastante completa, con integración con Google Lens, modo de captura dual, retrato, modo Pro con disparo RAW, etc. La única pega es que, como comenté, no funciona del todo rápida ni fluida. También hay mucha diferencia entre la fotografía final y la que vemos en la vista previa, incluso a nivel de color.