Víctimas denuncian que asaltantes arranchan y corren por la avenida Quito

Moradores dicen que sí hay rondas policiales en la zona

Caminan entre los carros haciéndose pasar por vendedores informales, mientras chequean a los pasajeros y conductores que esperan el cambio de luz en el semáforo.

Los movimientos son rápidos. Arranchan celulares o carteras justo cuando la luz se pone en verde y corren por la avenida Quito. Una táctica que usan para que el conductor no se detenga a seguirlos.

Así, las víctimas de arranchadores describen el accionar de quienes asaltan en esa arteria céntrica. Unos dicen que los ladrones se cambian la camiseta y avanzan rápidamente hacia la zona de los llamados “cachineros” (en la calle Pedro Pablo Gómez), donde se deshacen rápidamente de lo robado.

Eso pasa al menos dos veces al día en la avenida Quito, a la altura de la calle 10 de Agosto, según Milena, una joven que empezó a trabajar en un local de ropa hace cerca de un mes.

A Mery le robaron la semana pasada en el sector. Ella cruzaba hacia la parada de la Metrovía de la calle Sucre cuando un motorizado ingresó en contravía por el carril exclusivo, le arranchó el celular y huyó.

Cuenta que a pesar de que los policías sí pasan por ahí y hacen controles, los arranchadores aprovechan el momento en el que no se ve a ningún uniformado cerca.

Aunque sí considera importante la presencia de la policía, la mujer admite que tampoco se puede exigir tener a un policía en cada esquina.

“Es imposible, ya es un tema cultural, a veces roban celulares nuevos, los venden en $ 20 y van a comprar drogas, esto no va a cambiar con más policías, se necesita rehabilitación y una verdadera justicia”, dice.

Mario, quien es reciclador en la zona, y se denomina ‘un cristiano recuperado’ de las drogas, concuerda con ella. Él ha visto decenas de robos, pues cada día recorre la av. Quito recogiendo envases plásticos.

El hombre, de 60 años, señala que los delincuentes son capturados y un tiempo después los vuelve a ver en las esquinas ‘sondeando’.

Aunque el teniente coronel Juan Carlos Soria, quien tiene un mes a cargo de esa zona, no se atreve a decir si los delincuentes que ellos atrapan son liberados al poco tiempo, admite que ya tienen chequeados a los sospechosos, pero indica que no es posible detenerlos si no han delinquido.

Explica que han notado que no actúan solos, a veces son cinco; uno ejecuta el robo, le pasa el artículo a otro, y este a otro más que lo compra. Así se camuflan porque cada uno se va por un lado.

Soria manifiesta que en el centro la mayoría de los delitos son robos de oportunidad, pues la persona está distraída.

En un día laboral, el centro de Guayaquil recibe al menos 1’200.000 personas que realizan actividades comerciales, lo que complica la situación en las zonas más concurridas.

El policía expresa que a pesar de que se han incrementado los robos (17 episodios más que el año pasado), el número de detenidos también subió. Asegura que el tiempo de respuesta es de máximo 5 minutos.(I)

En el semáforo

Otros sectores

Denunciados en las redes

Otros puntos donde también se registran arranchadores en los semáforos son la calle Pío Jaramillo (a la bajada del primer puente de la vía Perimetral), el semáforo ubicado en el Cementerio General, algunas intersecciones a lo largo de la av. Francisco de Orellana (Mucho Lote y Riocentro Norte).

También se han denunciado robos a conductores en la entrada y salida de los túneles y en el semáforo y en la calle Jiguas y Las Aguas.

.