
Banco Pichincha pretende absorber al Banco de Loja en medio del malestar de clientes
En un giro inesperado en el sector financiero ecuatoriano, el Banco de Loja S.A. ha convocado a sus accionistas a una junta general extraordinaria programada para el 5 de septiembre de 2025. El principal tema a tratar será un proyecto de fusión por absorción con Banco Pichincha C.A., donde el primero actuaría como entidad absorbida y el segundo como entidad absorbente. Si tienes alguna inquietud recuerda contactarnos a través de nuestras redes sociales, o regístrate y déjanos un comentario en esta página para poder ayudarte. También puedes participar en el WhatsApp Ecuador.
Esta decisión ha generado una ola de reacciones en la ciudad de Loja, donde el Banco de Loja ha sido una institución emblemática desde su fundación en 1967. La presidenta de la Cámara de Industrias de Loja, María Gabriela Duclós, expresó su preocupación por las implicaciones sociales y emocionales de esta posible fusión, calificándola como una «noticia muy triste para toda la ciudadanía lojana».
A pesar de la incertidumbre, Duclós destacó que los indicadores financieros del Banco de Loja permanecen sólidos, con balances estables y una buena posición de liquidez. Sin embargo, la falta de pronunciamientos oficiales por parte de ambas instituciones financieras ha dejado a clientes y accionistas en un estado de expectativa y ansiedad.
El Banco Pichincha, por su parte, no ha emitido comentarios públicos sobre el proceso de absorción. La fusión propuesta implicaría la integración de todas las operaciones, activos y pasivos del Banco de Loja, incluyendo su red de sucursales y clientes, bajo la marca y estructura organizativa de Banco Pichincha.
La comunidad lojana, conocida por su fuerte identidad local, observa con cautela este proceso, temerosa de perder una institución que ha sido parte integral de su historia y desarrollo económico. Mientras tanto, el sector empresarial local se mantiene alerta, evaluando las posibles repercusiones en el mercado financiero regional.
El 5 de septiembre será una fecha determinante para determinar el futuro del Banco de Loja. La decisión de los accionistas podría marcar el fin de una era para la banca en Loja, o el inicio de una nueva etapa bajo el paraguas de una de las entidades financieras más grandes del país, pero que en los últimos años ha tenido críticas por parte de sus propios clientes.