Amazfit Falcon: un ambicioso reloj ultrarresistente
Los relojes inteligentes se han puesto serios este año. El lanzamiento de los Samsung Galaxy Watch5, los Apple Watch Ultra y los Google Pixel Watch abre una nueva división de dispositivos de gama alta, y Amazfit, que hasta ahora se había centrado en modelos más asequibles, presenta ahora el Amazfit Falcon para competir directamente con esos dispositivos. Si tienes alguna inquietud recuerda contactarnos a través de nuestras redes sociales, o regístrate y déjanos un comentario en esta página. También puedes participar en el WhatsApp. Si usas Telegram ingresa al siguiente enlace.
Lo hace con un modelo que desde luego apunta alto y que impresiona desde el primer momento por su caja de titanio, su resistencia al agua de 20 ATM o, claro está, su precio. Bienvenidos al Amazfit de 500 euros.
Un reloj para deportistas con ambición
El Amazfit Falcon es un reloj grande: su caja mide unos 49 mm y compite directamente con la del reciente Watch Ultra de Apple en dimensiones aunque su pantalla es mucho más pequeña, de 1,28″ frente las 1,99″ del modelo de los de Cupertino.
La pantalla AMOLED cuenta con un brillo máximo de hasta 1.000 nits, y es posible configurar además un modo siempre encendido «Always on» para que la pantalla siempre muestre información. En este modo se muestra menos información hasta que el reloj detecta que lo estamos mirando y se «despierta» para mostrar la esfera al completo.
El formato circular no ayuda en ese sentido, pero estamos ante un reloj contundente con sus 64 gramos de peso (61,3 en el Watch Ultra) que presume de caja de titanio y de cristal de zafiro para proteger la pantalla.
Ese cristal de zafiro permite proteger de forma notable la pantalla, y según la escala de dureza de Mohs ese material tiene una puntuación de 9 sobre 10: solo el diamante es más duro, y eso permite que estemos razonablemente tranquilos ante golpes y ralladuras.
De hecho la resistencia es uno de los claros focos de ese diseño: en Amazfit aseguran haber pasado 15 pruebas de nivel militar. Entre ellas, el funcionamiento a temperaturas extremas (70 ºC de calor, -40 ºC de frío), 240 horas de resistencia a la humedad, resistencia a golpes o a 96 horas salpicándole sal.
Esas garantías se completan con la resistencia al agua, que llega a unas espectaculares 20 ATM y equivalen a una profundidad de 200 metros. Las pruebas, indican sus responsables, permiten garantizar que se puede usar para submarinismo, aunque no hay aquí monitorización exclusiva para ese modo.
El reloj cuenta con cuatro botones de control fabricados con titanio y aleación de titanio. Con ellos es posible controlar distintas opciones del reloj durante los entrenamientos.
GPS de última generación para entrenamientos ‘premium’
Entre las promesas de este Amazfit Falcon están las de su sistema de posicionamiento. Estamos ante un reloj inteligente que cuenta con un sensor GPS de doble banda: la L1 que según el fabricante «es suficiente para algunos», y la L5, que permite afinar la precisión por ejemplo en áreas con árboles altos o edificios.
La aplicación Zepp Coach integrada es el particular Pepito Grillo de los deportistas que quieran ir a más con este reloj inteligente y cuantificador. El objetivo aquí es «ayudarte a entrenar y recuperarte de forma más científica» ajustando los entrenamientos al ritmo y rendimiento de cada usuario.
La aplicación promete no necesitar pruebas previas: el plan de entrenamientos —está disponible para 11 deportes diferentes, como ciclismo, carrera, remo, entrenamientos de fuerza o nadar en piscina—se basa en tus características físicas y tu experiencia a la hora de entrenarte. A partir de ahí se configura ese plan de entrenamientos que va guiándote día a día con recomendaciones, consejos y retos.
El reloj monitoriza el nivel de fatiga para encontrar el equilibrio adecuado, y ajusta el entrenamiento recomendando incluso que te tomes un día de descanso para evitar acabar exhausto o exponerte a lesiones.
El reloj es también compatible con dispositivos de entrenamiento externos y soporta más de 150 modos de deporte. Entre ellos están incluidos surf, golf, tenis (pero no pádel, al menos no de forma concreta), ski, escalada, natación, y por supuesto triatlón.
Entre los modos curiosos sorprenden los de juegos de mesa (ajedrez, Go) u otros como el tiro con arco o incluso la «conducción». Hay además reconocimiento automático de actividad en ocho deportes (correr, andar, bici o natación) y métricas especiales para algunos de ellos. Por ejemplo, el modo ‘Track Run’ permite analizar el tiempo, distancia y cadencia, pero incluso si corres en pista te ayuda a seleccionar la calle adecuada para mejorar tus marcas.
La aplicación también permite importar rutas y hacer seguimiento en tiempo real de las mismas vía GPS, y el trabajo con aplicaciones de terceros es otra de las características importantes. Podremos sincronizar datos con plataformas como Strava, Apple Health, Google Fit, Relive e incluso la aplicación de correr de Adidas.
La monitorización es otro de los apartados destacados. El Amazfit Falcon registra el ritmo cardíaco, la saturación de oxígeno en sangre y el nivel de estrés las 24 horas del día, y con un solo toque en pantalla puede informarnos de esos niveles y también de nuestro ritmo de respiración. Hay además monitorización específica del sueño y sus etapas.
La batería de 500 mAh es otra de sus características de alta gama, y según Amazfit con ella es posible disfrutar de dos semanas de uso normal, 7 días de uso intensivo y 30 días en modo de ahorro de energía.
Versiones y disponibilidad del Amazfit Falcon
El nuevo Amazfit Falcon está disponible desde hoy en varios países, incluido España. Su precio es de 499,99 euros.