Según la información proporcionada desde la Gobernación de Tungurahua, aproximadamente 2.000 indígenas se tomaron el cerro Pilishurco, en donde se encuentran las antenas repetidoras de las estaciones televisivas y de algunas emisoras de frecuencia modulada.

«Un convoy militar está llegando al sitio y la orden es proteger y garantizar las antenas de medios de comunicación», se informó; aunque también se advirtió que los uniformados tenían dificultades para llegar porque se habían abierto zanjas y tumbado árboles en el trayecto hasta la zona.

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Mientras tanto, grupos de indígenas de las parroquias Quisapincha y Augusto Nicolás Martínez llegaron al centro de la ciudad gritando consignas en contra del régimen de Lenín Moreno.

Joaquín Toroshina, dirigente del pueblo Quisapincha, manifestó que las medidas económicas afectan a los sectores pobres del país, que por esa razón piden la derogatoria, caso contrario se mantendrán en la medida de hecho.

Los comuneros en su afán de llegar a la gobernación de Tungurahua, botaron las barricadas metálicas que se colocaron a dos cuadras antes del edificio del representante del ejecutivo y luego incluso pasaron por encima de los efectivos policiales que trataron de impedir el paso.

Gabriela Rodríguez, quien asumió el despacho de la gobernación de Tungurahua, ante la renuncia de Juan Gortaire, hizo el llamado al diálogo con el fin de buscar consensos que permitan recuperar la paz de la provincia. (I)