Para evitar una rápida propagación del coronavirus se recomienda que las personas permanezcan en sus casas, por lo que se reduce el gasto calórico ante la disminución de la actividad física y podría generar a su vez un aumento de peso. Pero ¿qué estrategias se pueden aplicar para comer menos durante esta cuarentena?

Saúl Sánchez, graduado en Nutrición Humana y Dietética por la Universidad de Santiago de Compostela, en un artículo on line publicado en Mejor con Salud dice que hay «ciertos trucos para lograr este objetivo sin pasar hambre ni ansiedad. Es cuestión de llevar a cabo ciertas estrategias que ponen en marcha una respuesta hormonal que actúa sobre el mecanismo del apetito y de la saciedad».

Evelyn Benavides, neuróloga de Clínica Universidad de los Andes, dice en una nota de El Nacional que es importante durante la cuarentena tratar de no picotear entre comidas y hacer lo que se pueda de actividad física. Entre ellas caminar, saltar la cuerda, subir escaleras, clases de baile por Internet, etc

Desayuno

Benavides dice que «lo ideal es tomar desayuno entre las 8:00 o 9:00 y almorzar entre la 13:00 o las 14:00 horas. Ya que en esos horarios tenemos más insulina y eso hace que nuestro almacenamiento de la energía y el procesamiento del azúcar sea mejor».

Mientras que Sánchez sugiere saltarse el desayuno. Salvo que estés embaraza o que sufras migraña recurrente no controlada, este protocolo puede ser apto para ti, dice.

«Saltarse el desayuno se relaciona con un aumento de la producción de la hormona del crecimiento y, por lo tanto, con una mayor lipólisis. Además, y debido a una serie de interacciones hormonales entre la GH y la grelina, es menos probable que sientas apetito por la mañana que a otra hora del día», comenta Sánchez.

En la nota se agrega que durante el periodo de ayuno se permite la ingesta de café solo, té, agua y bebidas acalóricas. Puede aprovechar los efectos anorexigénicos del café (supresor del apetito) para reducir la necesidad por comer a lo largo de la mañana. Recuerda no endulzarlo para no romper los mecanismos hormonales del ayuno.

Alimentos frescos y ricos en fibra

Según el especialista Sánchez, es recomendable elegir alimentos ricos en fibra. De esta manera puede estimular los mecanismos de la saciedad para reducir los niveles de ansiedad por la comida.

Intenta no comprar productos ricos en azúcares para evitar caer en la tentación. En su lugar, llena la despensa de frutas, verduras y granos integrales, añade.

Avena

Este cereal presenta una alta cantidad de beta glucanos que consiguen suprimir el apetito, tal y como evidencia la revista Nutrition Reviews. Además, la avena presenta la capacidad de estimular de manera selectiva el crecimiento bacteriano del intestino.

Consumo de verduras y frutas

El especialista en Nutrición Humana y Dietética señala que la mejor manera de reducir el número de calorías diarias es suprimir el consumo de alimentos procesados. En su lugar es conveniente priorizar los frescos, como es el caso de las verduras y las frutas.

La verdura contiene una gran cantidad de agua y de fibra. De este modo, aumenta la hidratación al tiempo que estimula los mecanismos de la saciedad, añade.

Otra de sus ventajas es su escasa densidad calórica. Por este motivo, te puedes permitir el consumo abundante de estos alimentos sin que esto repercuta de manera negativa en el cómputo energético total.

No debes de olvidar que estos alimentos contienen vitaminas, minerales y antioxidantes. Todos estos micronutrientes ayudarán a la correcta realización de las funciones orgánicas. (I)