Nos acercamos al final… ¡Qué pena, el Mundial es un espectáculo tan único! Luego a esperar 4 años para el Mundial tan extraño de Qatar (lejano, caluroso, diciembre, poca hinchada y tradición local…).

Están los 8. El lado izquierdo del cuadro es lo esperado en la mayor parte de “pollas”, Francia-Uruguay y Brasil-Bélgica. El lado derecho (donde desaparecieron Alemania, España y Argentina) sí es un golpe, Croacia-Rusia y Suecia-Inglaterra (aunque croatas e ingleses eran muy probables). Los unos suman 8 títulos mundiales y 11 finales, los otros 1 título mundial y 2 finales (hay que incluirles sus 6 semifinales para encontrar algo de tradición). Si el campeón no sale del lado izquierdo, será un batatazo histórico.

Viernes de fuego. Francia-Uruguay: la mejor pareja de centrales más la mejor pareja de atacantes (si juega Cavani) contra un equipo francés bastante joven, con enorme talento variado, pero que no encuentra aún toda su estructura. Brasil-Bélgica: los pentacampeones con un juego que ha ido creciendo, pero aún muchos defectos, contra un equipo belga que llega a su segundo cuarto de final seguido con 4 años más de experiencia; temible de la media hacia adelante pero una defensa floja (Túnez y Japón le hicieron 2 goles y pudieron ser más). Cualquier semifinal es una final anticipada.

Un sábado bastante menos llamativo. Croacia aparecía con fuerza, pero contra Dinamarca fue pobre, y Rusia ganó a España en penales lo cual no es tan grave en sí mismo, pero sí el hecho de solo haber esperado ese momento para quizás ganar. Y lo lograron. Suecia-Inglaterra: los únicos en ese grupo con experiencia de finales; Suecia se ha mostrado sólido sin mucha creatividad (buen primer tiempo frente a Alemania, y buen partido contra México); mientras Inglaterra camina con algunos aciertos y muchas limitaciones. Cualquier semifinal es una oportunidad inesperada para alcanzar la final. (O)