Los estudiantes de la unidad del milenio intercultural bilingüe Chibuleo realizaron el pasado jueves una casa abierta en el parque Cevallos, en la parroquia Juan Benigno Vela del cantón Ambato, para destacar las costumbres y tradiciones ancestrales.

Alberto Guapizaca, rector del plantel, dijo que hablar de interculturalidad es hablar de identidad, lo que implica la cosmovisión, la lengua y la vestimenta.

En el plantel, donde estudian 750 alumnos, se trabaja con el kichwa desde el inicial hasta el bachillerato; además, tratan de no tener un uniforme formal para que asistan con la vestimenta propia de las comunidades de donde provienen los estudiantes, porque existen alumnos de Quisapincha, Pasa, Santa Rosa e incluso de Otavalo, provincia de Imbabura, dijo.

Comentó que existe una fuerte influencia del mundo globalizado, y por esa razón en el plantel se realiza todo el esfuerzo para conservar el idioma kichwa, así como la vestimenta, que –según dijo– no ha permanecido intacta, pues ha habido evolución en las fajas, anacos y en sí, en la forma de vestir.

Belén Lligalo y Wilmer Telenchana, alumnos del plantel, confesaron que se sienten orgullosos de continuar con las costumbres y tradiciones que les dejaron sus ancestros.

Lligalo confesó que si bien ha habido evolución en la vestimenta de las mujeres aún conservan la esencia, pues hay prendas como la lista (especie de pañuelo grande que va por debajo de bayeta) que es hecha en telares, y el chumbi, que es elaborado de diferentes colores, que les hace ver felices, contentas y elegantes. (F)