La capilla de San Antonio, situada en el cantón Cañar, fue elevada a la categoría de santuario eucarístico diocesano, informó el párroco Édgar Fajardo para el diario El Tiempo.

Este proceso de transición de capilla a santuario, que se dio el pasado lunes, es el resultado de varios años de gestión del equipo de la diócesis de Azogues, que fue la responsable de reunir los documentos históricos acerca del milagro eucarístico registrado un 24 de junio de 1958. Este hecho ocurrió durante una misa en la que los fieles aseguraron haber sido testigos de la aparición del rostro de Jesús en la santa custodia.

Tras el hecho, la santa sede designó a la Arquidiócesis de Cuenca un proceso canónico encabezado en aquella época por el primer arzobispo de la ciudad, Manuel Serrano (+), quien concluyó con un decreto que reconoció la existencia de esta manifestación religiosa.

Este cambio de categoría también detallará que el párroco y sus sucesores serán nombrados directores del santuario, quienes estarán a cargo de la administración económica junto al consejo de pastoral, debiendo para esto presentar cada año en la curia la contabilidad.

El anuncio del cambio de categoría fue dado el viernes pasado. En el acto participó el alcalde de Cañar, Segundo Yugsi, quien, según la publicación, expresó sentirse orgulloso y aseguró que trabajará en la regeneración de las escalinatas que conducen al santuario.

La construcción del ahora santuario, que está ubicado a cinco minutos del centro, data de 1934. Durante diez años permaneció cerrado, fue el 24 de junio de 2018 cuando sus puertas vuelven a ser abiertas para los feligreses del sector. (I)