Hasta este mes los propietarios de casas y edificios afectados por el terremoto del 2016 tienen plazo para notificar al Municipio de Sucre cómo se rehabilitarán dichos espacios cuarteados.

El cabildo trata con eso de que se mejore el ornato de la ciudad y evitar que las edificaciones con daños puedan representar un riesgo para los ciudadanos.

Íngrid Zambrano, alcaldesa del cantón Sucre, recordó que los propietarios tenían un plazo que se vencerá antes de que culmine este mes. “Ese plazo está por vencer, en caso de que ellos (dueños de edificaciones) no presenten al gobierno municipal una propuesta o justificación de reconstrucción, nosotros vamos a intervenir”, dijo.

La funcionaria señaló que existe una ordenanza que les faculta una intervención y el derrocamiento de las edificaciones si no hay un plan por parte de los dueños de los inmuebles afectados.

Incluso el presidente de la República, Lenín Moreno, en su última visitada efectuada a Bahía de Caráquez, compartió y solicitó a la alcaldesa Zambrano la necesidad de que se derroquen estas edificaciones, que generan inseguridad a la ciudadanía y al turista.

“Por favor, exigir a la gente que tiene que derruir los edificios que los derrumben definitivamente y ojalá pronto, gracias a los créditos que dan nuestras diversas instituciones, se vuelva a reconstruir e impulsar (la construcción de) inmuebles”, destacó Moreno.

La alcaldesa indicó que ya algunos ciudadanos se han acercado al Municipio a mostrar interés por el anuncio, y señaló que es urgente efectuar este proceso de derrocamiento en un plazo que no supere los dos meses.

El Municipio acogerá el gasto de la destrucción de un predio que esté a punto de colapsar o que genere un peligro y los usuarios irán devengando a través de sus impuestos o en su defecto con juicios de coactiva, como una forma de recuperar la inversión del proceso de demolición de bienes.

“El tener estas edificaciones en mal estado ahuyenta a nuestros turistas y lesiona mucho el ornato, representan un riesgo para los ciudadanos”, recalcó Zambrano.

Según la alcaldesa manabita, el cantón Sucre y su cabecera cantonal Bahía de Caráquez ya planifican un proyecto de desarrollo integral, como por ejemplo el cerro de la Cruz. Se buscará que no pierda su carácter de mirador turístico, así como la estabilización de la loma para que sea atractivo.

En diciembre será el relanzamiento de la imagen de la urbe tras el proceso doloroso que pasaron sus habitantes por los dos sismos en 22 años. (I)

Proyectos

En Bahía de Caráquez hay hoteles y edificios departamentales que se han reconstruido tras el sismo del 2016. No obstante, aún quedan propiedades que tienen daños y que necesitan arreglos para evitar que colapsen.

Reactivación

Las autoridades consideran que los inmuebles afectados no ayudan a reactivar la economía del cantón, porque eso puede ahuyentar a los turistas.

Cuestionan destino de recursos de reconstrucción

“¿Qué pasó con el dinero de la reconstrucción recolectado por el Gobierno anterior?… Supuestamente para rehacer las ciudades afectadas por el terremoto y Bahía lo fue”, cuestionó el presidente Lenín Moreno, durante su reciente visita a esa ciudad manabita.

El mandatario llegó a esa ciudad en medio de la percepción ciudadana de que no se ha hecho mucho para avanzar en la reconstrucción.

Son cerca de 2.300 millones de dólares que se han asignado para la reconstrucción.

Moreno dijo que los recursos seguirán entregándose para ayudar a levantar a Bahía. Agregó que pese a las dificultades económicas en dos años de su gestión se han entregado 75 millones de dólares en inversiones directas, asignaciones de ley, y con recursos del Banco de Desarrollo.

El vicepresidente Otto Sonnenholzner, quien también estuvo en Bahía de Caráquez, indicó que el dinero de la reconstrucción pudo ser aprovechado de mejor manera y con buena planificación.

Agregó que el tema de la utilización de los recursos es un asunto de investigación de los organismos de control.

“Eso deberán determinar las autoridades competentes cuando reciban información de la Contraloría, después de más de 2.300 millones de dólares invertidos o en ejecución, las cosas en la provincia (de Manabí) debían haber sido diferentes, me parece que la planificación no fue la mejor, me parece que el dinero, mi opinión personal, pudo ser mejor aprovechado”, declaró Sonnenholzner. (I)