ensalada cebada

Ensalada de cebada, frijol y elote: cocina

Ensalada de cebada, frijol y elote: cocina. Si tienes alguna inquietud recuerda contactarnos a través de nuestras redes sociales, o regístrate y déjanos un comentario en esta página. También puedes participar en el WhatsApp. Si usas Telegram  ingresa al siguiente enlace.

Ingredientes para ensalada de cebada

  • 2 tazas de cebada cocida (al final de esta receta se encuentran las instrucciones para cocinar la cebada)
  • 1 lata (15 onzas) de frijoles “kidney”, escurridos del líquido
  • Una taza de elote (enlatado y escurrido, congelado o recién cocinado)
  • 1 chile campana rojo grande, sin semillas y finamente picado
  • ½ taza de apio cortado
  • ¼ de taza de cebollín cortado
  • 1 diente de ajo, finamente picado o 1/4 de cucharadita de ajo en polvo
  • ¼ de taza de jugo fresco de limón verde o amarillo
  • 2 cucharadas de aceite
  • Sal y pimienta al gusto
  • Cilantro o ramas de perejil fresco, para adornar (opcional)

Preparación para ensalada de cebada

  1. En un recipiente grande, mezcle la cebada con los demás ingredientes, excepto el cilantro o el perejil.
  2. Cubra la mezcla y déjela enfriar por varias horas o durante la noche, para que los sabores se mezclen.
  3. Si lo desea, adorne con cilantro o las ramas de perejil, y sirva.
  4. Refrigere lo que sobre dentro de las siguientes 2 horas.

Notas

  • Una mazorca de elote grande rinde aproximadamente 1 taza de elote desgranado.
  • Congele el jugo de limón verde extra para usar más tarde.
  • Cocine sus propios frijoles secos. Una lata de 15 onzas es igual a aproximadamente 1 ½ a 1 ¾ de tazas de frijoles escurridos.

Para cocinar la cebada:

En una cacerola mediana con tapa, ponga a hervir 3 tazas de agua. Añada 1 taza de cebada y póngala a hervir nuevamente. Reduzca el calor a bajo, cubra y cocine por 45 – 60 minutos o hasta que la cebada esté tierna y el líquido se haya absorbido. Rinde de 3 a 3 1/2 tazas. La cebada cocinada que le sobre, guárdela en un recipiente con tapa hermética y refrigérela hasta por una semana o congélela. Añada la cebada cocinada a sopas, estofados, cazuelas y ensaladas para tener comidas más saludables con fibra.