Protesta en Carchi se endurece con violencia

Tulcán –

Desmanes registrados en Tulcán, Piquiucho (cantón Bolívar) y El Barrial (a 1,5 km del puente internacional de Rumichaca) convirtieron en más radical el segundo día de protesta en la provincia del Carchi. Las posturas de los dirigentes de la paralización se mantenían férreas, al igual que de representantes del Gobierno, como el vicepresidente de la República, Otto Sonnenholzner.

En Tulcán, decenas de incidentes se registraron simultáneamente por distintos sectores de la ciudad. Los manifestantes, entre los que se contaban empleados y trabajadores de los gobiernos seccionales y transportistas, obligaron a cerrar los negocios.

En más de un establecimiento fue evidente el malestar de los administradores, quienes aseguran que viven de las ventas diarias y que no comparten con este tipo de medidas radicales, debido a la crisis económica que enfrentan.

Hubo forcejeos y un local de telefonía celular sufrió la rotura de la cortina central cuando los quejosos pugnaban por cerrar la puerta enrollable.

Las marchas, en dos ocasiones, se tomaron los exteriores de la Gobernación de Carchi, donde se produjo igual número de incidentes. Unos 30 policías totalmente equipados evitaron que ingresen a la fuerza en el interior del edificio.

A la voz de “que se vaya el gobernador”, intentaban sacar de la edificación al representante del Ejecutivo.

Cristian Benavides, alcalde de Tulcán, dijo que el sacrificio que han hecho hombres y mujeres en esta jornada va a tener resultados positivos. “Hago un llamado al Gobierno para ser escuchados y atendidos, porque los resultados están próximos a alcanzarse”, manifestó el alcalde.

Mientras en el sur de la provincia los pobladores de Piquiucho, límite provincial con Imbabura, se tomaron la carretera y decenas de automotores estaban paralizados sin poder avanzar, los viajeros debieron caminar.

En Bolívar, en cambio, los tres alcaldes de Espejo, Mira y ese cantón continuaron la medida, interrumpiendo el paso por la Panamericana. Germán Bracho, empleado municipal, dijo que los transportistas públicos de las tres jurisdicciones optaron por unirse al paro.

Sin embargo, comentó que más de medio centenar de buses continuaban atrapados pretendiendo llegar a Tulcán y la frontera. “En las unidades hay niños y mujeres que están desesperados, porque no han comido”, indicó Bracho.

Entre tanto, la Y de El Barrial, ubicada a 1,5 km del puente internacional de Rumichaca, fue reforzada después del mediodía tras un anuncio sobre un probable desalojo de los más de 50 taxis que estaban estacionados en la calzada de ingreso y salida al viaducto binacional.

El prefecto Guillermo Herrera pidió públicamente que el vicepresidente Otto Sonnenholzner sea el interlocutor para alcanzar una salida. “Él (vicepresidente) porque es quien está al frente del país ante la ausencia del presidente Lenín Moreno”, agregó.

En la frontera

En el lado colombiano, un centenar de vehículos de carga permanecen estacionados y esperan que la medida termine para ingresar con mercancías. Las clases, el transporte público y mercados de Tulcán están cerrados. Los lecheros no pueden movilizar su producto.

Gobierno no justifica paro y dice que hará respetar la ley

Para el Gobierno no se justifica la medida de hecho en Carchi, afirmó el vicepresidente de la República, Otto Sonnenholzner, quien anticipó que no cederán a presiones ni condiciones como pedidos de renuncia del gobernador.

El funcionario lamentó que pese al diálogo mantenido la semana pasada con el prefecto de la provincia se haya tomado la decisión la paralización.

Dijo que el Gobierno está cumpliendo con todas las provincias, pero que no se puede hacer diferenciaciones adicionales como las que ya se han realizado para Carchi con la canasta transfronteriza y la eliminación del anticipo del impuesto, a inicios del 2019.

El vicepresidente indicó que las autoridades de esa provincia tomaron un camino equivocado y anticipó que se adoptarán medidas para que funcionen los servicios públicos y que harán respetar la ley.

Mientras, la ministra María Paula Romo, en diálogo con una emisora local, al referirse a la demanda que pide la remoción del gobernador, dijo: “Yo nunca le diría al prefecto a quién contratar en su equipo de trabajo, espero el mismo respeto de las autoridades locales”.

Romo recalcó que las cifras que constan en las exigencias que propone la Asamblea Provincial no se ajustan a la realidad y algunas otras demandas más, como la creación de las Zonas Francas, no existe desde el 2010. “En la legislación actual hay las Zonas Especiales de Desarrollo Económico y hemos estado siempre dispuestos a generar esos proyectos con la ciudad y la provincia”.

Sobre la ampliación de la Panamericana entre Bolívar y Rumichaca, indicó que ese contrato se firmó en julio de este año y ya se ejecutará. (I)