Cómo comprender a los chicos adolescentes

Cómo comprender a los chicos adolescentes

Cómo comprender a los chicos adolescentes. Chicos adolescentes. Para las mujeres (y algunos padres también), ellos nunca tienen sentido.

Durante la mitad del tiempo, sus ojos brillan perdidos en la imaginación y en la otra mitad, sus cambios de humor son tan malos que jurarías que están embarazados. ¿A través de qué están pasando? Comienza a leer el paso 1 o mira las secciones para recibir ayuda más específica.

Parte 1. Comprende a los adolescentes desde el punto de vista de un padre

1.Considera que las hormonas pueden afectar su capacidad de comunicación. ¿Recuerdas ese día cuando alguien te rozó el hombro y no pudiste dejar de pensar en ello durante horas e incluso días? Ese es su nivel de distracción, 24/7. Su vida va de mirar programas para niños a ver programas para adolescentes y él está en el medio, lo cual no deja mucho tiempo para conversar.

  • Lo que una vez fue una vida llena de videojuegos, amigos y la práctica ocasional de básquetbol ahora es una vida de chicas, cursos, chicas, deportes, videojuegos, chicas, encontrar una imagen, amigos, experimentar cosas nuevas, y chicas; básicamente, ya tiene mucho en su vida. Si está brusco y poco comunicativo (pero todo lo demás está bien), probablemente está lidiando con las cosas, lo que significa que no está molesto contigo o iniciando una etapa de rebelión, sino más bien está acostumbrándose a este nuevo tren de pensamientos que viaja a muchísimas millas por hora.

2. Déjalo ser “cool”. Siempre surge un tiempo desafortunado en la vida de todos en el que nos damos cuenta de que existe el mundo exterior y que hay juegos de debemos practicar para mantenernos al día. En ese tiempo, buscará desesperadamente la aprobación de sus pares diciéndoles que reúnen sus requisitos arbitrarios. Mientras que tú ves que eso no tiene sentido, él no, y no será capaz de verlo aunque se lo digas. En lugar de darle una lección sobre los peligros de la sociedad, oriéntalo por un camino productivo y seguro (sin que él lo sepa).

  • Sé una de esas personas que le muestra el mundo, ayudándolo a desarrollar su personalidad y lo que es ser “cool”, es decir estar a la moda. Introducirlo en tu mundo es un buen lugar para comenzar. Asegúrate de que conozca a algunos de tus amigos y vea los ejemplos del mundo adulto. Muéstrale diferentes deportes, formas de arte y expresión, actividades exteriores, diferentes comidas y pasatiempos, personas y lugares nuevos. Cuando comience a tener una percepción de sí mismo, quizá pueda ser debido a ti y no a personajes de la televisión.

3. No desestimes sus sentimientos. Si en realidad tu hijo se toma el tiempo de abrirse contigo para contarte cómo lo despreció la chica más linda de la escuela, no lo mires como el chico ingenuo e inexperimentado que es. Seguro sabes que no es un gran problema, pero él no; no va a ser nada del otro mundo para él en otra década. Lo que sea que esté sintiendo, hazle saber que al menos una parte de ti lo entiende. Después de todo, a ti te sucedió lo mismo años antes.

  • Tienes que dejar que cometa errores para poder crecer, ya que intentar evitarlo sólo prolongará lo inevitable. Anímalo a que explore sus sentimientos, dale consejos sobre chicas (o chicos), ten una charla sobre sexo (o pornografía), y sé la roca en la que él puede descansar. Es posible que ya no se acerque a ti para los temas divertidos, pero puedes estar allí para levantarlo cuando decaiga.

4. Puedes esperar que busque su libertad sexual. Existen probabilidades de que tu hijo explore el mundo pornográfico. Investigaciones recientes establecen que más del 70% de los chicos adolescentes visitan con frecuencia los sitios web y el 90% entró al menos una vez, por lo general mientras realizaban la tarea. De hecho, esto no es alarmante, en realidad es normal.

  • Aunque es normal, no significa que tienes que dejarlo que tome su propio curso. Inicia una conversación sobre el tema haciéndole saber que lo que ve no es así y contándole sobre el mundo real en el que está entrando. Conéctalo con la realidad, evita que el Internet y sus amigos formen un mundo que es imposible de seguir.

5. Ayúdalo a explorar su madurez. Si en la casa lo tratas como a un adulto, no sentirá la necesidad de probarse a sí mismo alrededor de ti, y con suerte, de sus amigos. Aumenta tus expectativas sobre él y sus problemas.

  • ¡Recompénsalo adecuadamente! ¿Quiere una taza de café o un vaso de vino luego de la cena? Genial. ¿Quiere contribuir con la próxima vacación? y ¿a dónde quiere ir y por qué?

6. Ayúdalo a ganar su “hombría”. Existe la probabilidad de que en un cierto momento tu hijo empiece a verse como un hombre adulto y comience a usar un lenguaje más grosero, se refiera a ti diferente y demande más independencia. Bien, dos pueden jugar este juego, así que si está desesperado por ser un hombre adulto, dale una responsabilidad. Sólo podrás tolerar esa conducta si él puede liberar su carga.

  • Si realizar las tareas de la casa no es suficiente, insiste en que consiga un trabajo de medio tiempo. De lo contrario, puedes aumentar sus responsabilidades domésticas, además de que mantenga buenas notas en la escuela. Si puede manejar todo con éxito, entonces felicitaciones. Quizá él ya tenga un control sobre ello, pero si no puede, no tienes que tolerar su actitud de maduro.

7. Conoce a sus amigos. Será un desafío implementar una política literal de puertas abiertas. Demandar que eres parte de sus asuntos cuando está en casa lo enloquecerá. En lugar de meter las narices donde él no quiere, ingresa a su mundo conociendo a sus amigos. Puedes decirle que invite a sus amigos a la casa (como parte de tu plan) y analízalos un poco. Si tiene amigos que te agradan y otros que no, utiliza tu genialidad para dirigirlo de una manera u otra.

  • Involúcrate en la escuela. Esta es la forma más sencilla de conocer el ambiente en el que está cuando no se encuentra en casa. Verás con quién sale y podrás conversar con sus padres. ¡Es probable que estén pasando por lo mismo!

8. Ten en cuenta que él quizá se siente inmortal. Puede que el mantra de tu hijo sea lo que dijo Simba: “me río del peligro”, en la película “El rey león”; y esa es una analogía decente. Lo que sea que esté prohibido (ya sean un cementerio de elefantes o fiestas en la casa los fin de semana), él querrá hacerlo y no verá las consecuencias. Para canalizar esto, anímalo a que sea aventurero, pero no peligroso.

  • Anímalo a que realice algunas de las actividades físicas más peligrosas dentro de las “normales”. Por ejemplo, puede comenzar clases de ciclismo en la montaña, lucha cuerpo a cuerpo, conducir en todoterreno, realizar campamentos (en el verdadero sentido) y hacer parkour.

9. Mantente abierto y establece un buen ejemplo. Si eres un enigma para él, no tiene motivos para no ser un enigma para ti. Conversar por el teléfono durante la cena es como decirle que converse por teléfono en la cena. Aunque su mundo se vuelva mil veces más grande, aún eres su ejemplo número uno.

  • Si él es una parte de tu vida, por definición, tendrás que ser parte de la suya. Deja la puerta abierta durante la noche. Establece un tiempo para comer juntos, mirar televisión o realizar alguna actividad. Es posible que sientas que no está prestándote atención, pero en realidad sí lo hace. Está notando tu comportamiento como un ejemplo de lo que es ser adulto, alguien que él quiere ser desesperadamente.
  • Inicia una conversación significativa. Ahora está pasando por muchas cosas que en realidad no entiende. Pregúntale que está sucediendo con su cuerpo, si siente emociones que no puede explicar y si se da cuenta que sus patrones de pensamiento están cambiando. Aunque no pueda darte una buena respuesta, lo dejarás pensando en ello, abrirás líneas de comunicación y le permitirás saber que todo es normal.

10. Conoce lo que es motivo para alarmase y lo que no. Si tu hijo adolescente quiere teñirse el cabello de azul es algo desafortunado, pero no es el fin del mundo. De otro modo, puede estar completamente sano mentalmente. Después de todo, ¿recuerdas ese mono (overall o mameluco) que le rogaste a tu mamá que te compre? Bueno, es lo mismo pero décadas después. Sin embargo, si tu hijo muestra signos negativos que no son típicos de él, tienes que adoptar medidas. Busca los siguientes síntomas:

  • Pérdida o ganancia de peso extrema.
  • Problemas de insomnio.
  • Cambios drásticos en la personalidad.
  • Cambio inesperado de amigos.
  • Ausencia escolar continua.
  • Repetición de grado.
  • Hablar o bromear con el suicidio.
    • Si notas alguna de estas situaciones, contacta al consejero o psicólogo local, ya que son advertencias de un problema mayor. Pero de nuevo, si tu hijo es un estudiante con notas A y saca una B, no hay problema; pero, si un estudiante A saca muchas C y D y lo encuentran en un McDonald’s todos los jueves a la mañana, eso sí es un problema.

Parte 2. Comprende a los adolescentes siendo novia

1.Comprende que muchos chicos no demuestran tanta emoción como las chicas. En nuestra sociedad, muchos chicos piensan que mostrar emociones es sólo cosas de chicas. Por ello, aunque sientan, no lo demostrarán; pero que no demuestren que están enojados, no implica que no lo estén. No te enojes más cuando él no está enojado, ya que sólo procesa las cosas de forma diferente.

  • Ciertas investigaciones indican que los chicos procesan las emociones más lento también. Si una chica quiere hablar sobre un problema al día siguiente, quizá el chico no esté listo y quiera hablarlo unos días o una semana después. Es así como funciona su cerebro.

2. Ten en mente que quizá él sienta que está atorado en una etapa complicada. Por lo general, las chicas están unos años más adelantadas que los chicos cuando se trata de madurez. Es por ello que puedes ver que muchas chicas son más altas y lucen más maduras, mientras que los chicos aún parecen, bueno, como chicos. Es probable que esté muy consciente de todos los cambios que está atravesando y esté volviéndose consciente de sí mismo.

  • En este momento, su voz está cambiando (¡y engrosándose!), su cuerpo también, y quizá empiece a tener acné y, por sobre todo, tiene que lidiar con sus amigos y la escuela. Por ello, puede que no se sienta lo suficientemente seguro para interactuar contigo de la manera que él quiere.

3. No temas decirle qué sientes. Los indicios del cambio de voz no son la manera de lograr que un chico haga algo, ¡puede ser muy obvio! Más aún, apreciará que seas directa. A menudo, las chicas hablan en código intentado decir algo sin decirlo en realidad. Sin embargo, para su mente, necesitas ser directa porque ¡no lee los pensamientos!

  • Las chicas tienen la destacada habilidad de ver una situación diferente a la real y se molestan por nada. Si le dices que te sientes de una forma y él piensa que eres ridícula, intenta verlo desde su punto de vista. Las relaciones se basan en el compromiso con el otro.

4. Acéptalo. Si desvaría sobre deportes, escúchalo y si tiene un mal día, reconfórtalo. Él se encuentra en el proceso de convertirse en un hombre y está descubriendo qué es lo que lo impulsa, así que ¡sé parte de ello! Si se abre a ti, ¡genial! ¿Cómo puedes entrar en acción?

  • Es muy probable que cambie sus intereses rápido. En un minuto quiere ser doctor y al otro quiere convertirse en un músico famoso; ¿a ti no te sucede lo mismo? Sólo asegúrate de que la persona en la que se está convirtiendo sea con la que aún quieres salir.

5. Ten en mente que no todos los chicos adolescentes son iguales. Sólo porque tu novio anterior era de una manera, no significa que todos los chicos son iguales. Uno te bajará la luna del cielo, mientras que el otro se olvidará de llamarte; así que si encuentras un huevo en mal estado, no los tires todos.

  • Algunos son mucho más maduros que otros. Cuanto más inmaduro son, más pensarán en ellos mismos. Las investigaciones aseguran que las relaciones íntimas no pueden suceder realmente hasta los 17.  Si eres más joven, sepárense por un tiempo, ya que sólo es un proceso de crecimiento.

6. Recuerda que los chicos son diferentes cuando están con sus amigos. Si están los dos solos, probablemente sea muy dulce y afectivo, pero si llega algún amigo, ¡bam! es el hombre de hielo. Esto puede deberse a que está preocupado por cuán “cool” piensan los amigos que es, lo cual no tiene nada que ver contigo, sino con él. ¡Es muy importante que lo recuerdes!

  • Él necesita tiempo para ser uno de los chicos, ¡y tú necesitas tiempo para ser una de las chicas! Su ejercicio de la masculinidad es parte de la transición de chico a hombre. Todos atraviesan esa etapa, así que mientras que él hace sus cosas, tú puedes hacer las tuyas.

7. Recuerda que los adolescentes piensan en temas sexuales. Cuando un chico alcanza una cierta edad, empieza a pensar en el sexo, su cuerpo hace cosas que no puede controlar y su mente está en todo lugar. Si parece distraído, ¡quizá ese sea el motivo!

  • No te presiones con tener sexo hasta que estés totalmente segura. Este problema se puede evitar si estableces tus límites con firmeza. Él se puede ocupar de sí mismo, este no es tu trabajo. No te sientas culpable por hacerte respetar. Si no quiere esperar, él no lo vale.

8. Mantén las líneas de la comunicación abiertas. Pregúntale por sus pasatiempos y otros intereses. Es posible que quiera, o no, que te involucres en ciertas actividades y ¡está bien!, ya que tú también tienes tu propia vida. Sin embargo, si realmente tienes interés y/o habilidades en sus actividades, asegúrate de hacer escuchar tus pensamientos sobre y ofrecerte a participar. ¡No temas ganarle!

  • Si pelearon, es posible que no siempre se acerque a ti y tengas que iniciar tú una comunicación si insiste en ser obstinado. Aunque ésta no tiene que ser siempre tu tarea, si quieres que la relación tenga éxito, necesitas trabajar. Mantenerse abierto y honesto el uno con el otro es la forma más rápida para que la relación perdure.

Parte 3. Comprende a los adolescentes siendo maestro

1. Comprende que el cerebro aún se está formando. Los accidentes son la causa número uno de muerte en adolescentes. Las investigaciones indican que se debe a que el cerebro aún no formó los centros que se manejan con lógica y seguridad. Por lo tanto, cuando un grupo de adolescentes actúa como neandertales, recuerda que ese es el motivo; ellos no registran el comportamiento peligroso como algo peligroso.

  • Lo único que puedes hacer cuando surge una situación difícil es intentar que la lección aprendida sea recordable. Dado que sus cerebros todavía se están formando, puedes meterte literalmente en sus personalidades ocasionales. Establece consecuencias y haz que todo sea tan claro como sea posible porque es probable que olviden todo lo demás.

2. Convierte los descubrimientos en oportunidades de aprendizaje. Lo último que tienen en mente los adolescentes es la clase de la tarde. En lugar de ello, están con los iPads, hablando de deportes, mirando chicas e intentando descubrir cómo estar a la moda. Si notas algo que no está relacionado con la escuela, trata de no quitarlo, sino piensa cómo puedes incorporarlo a la clase. ¿Cómo puedes enseñarles más sobre ello y beneficiar su descubrimiento?

  • Esto también aplica a las cosas negativas. Por cada erección que tengan, por cada grano que aparezca, por cada cosa adolescente que te cruces, haz lo que puedas para que sea una oportunidad de aprendizaje (evitando que sea vergonzoso). Estos temas son normales, así que hazles saber que es así, ya que quizá no reciban esta información en sus casas.

3. Hazle preguntas significativas a los padres. Si tienes un adolescente en particular que es un enigma, es momento de llamar a sus padres. Es posible que en el segundo en el que los conozcas, se te encienda una gran bombilla en la cabeza y que de repente todo tenga sentido. Hasta ahora, los padres fueron los que moldearon a esos chicos. Por lo tanto, conoce a los padres para saber la formación del niño.

  • Si no es muy obvia la razón de por qué un chico en particular se comporta de una forma, haz que los padres se responsabilicen. Esto te indicará cuál será tu siguiente paso, es decir si es necesaria la intervención de un consejero, o no.

4. Comprende que pasarán la mayoría del tiempo intentando demostrar algo. Si están en una clase de inglés, la mayoría querrá probar que son demasiado buenos para la escuela e intentarán ejercitar su dominio haciendo garabatos en sus escritorios. Si están en gimnasia, se morirán por ser elegidos primeros y por ser el motivo de gloria. Los estudiantes atípicos probablemente intenten demostrar que su particularidad no los molesta, sino que eso los define.

  • Está en tu mejor interés trabajar con ello, en lugar de hacerlo en contra. Si te percatas de que algunos chicos son estimulados por la imaginación, intenta convertir las actividades académicas en una oportunidad para afirmarse. Es probable que sean más cooperativos si ven una ventaja en ellos mismos en lo que sea que les pidas que hagan.

5. Reconoce las presiones que siente. Es fácil concentrarse en las chicas y ver las miles de presiones que la sociedad ejerce sobre ellos. Apesta totalmente ser una chica adolescente. Desafortunadamente, para los chicos no es mucho más fácil y a veces esto no se tiene en cuenta. Ellos son forzados a convertirse en “hombres”, pero ¿qué definición de “hombre” es aún viable? ¿Sostén de familia? No, precisamente. ¿Fuerte y callado? No. ¿Agresivo? Espero que no. ¿Qué tiene que ser un chico?

  • Todos estos chicos están en proceso de convertirse en eso, algo de lo que sólo tienen una pequeña compresión; por ello, todo esto les resulta muy intimidante. Si puedes, cuando tengas tiempo, trata de darles una idea sobre ser viable en la sociedad, es decir ¿cómo puede ayudar?, ¿cómo puede involucrarse físicamente?, ¿dónde puede ver los resultados concretos?, ¿puede establecer metas y objetivos?

6. Toma nota de la jerarquía social. Si creíste que sólo se trataba de chicas, estás equivocado. Los chicos forman sus propios círculos también, sólo que quizá se manifiestan diferentes. Cuando notes la jerarquía, podrás aprovechar sus roles, y también ayudar a aquellos que están debajo de la escalera social.

  • Esta jerarquía significa mucho para ellos, ya que constituye toda su vida en ese momento. Cuando comiences a ver esto, será más fácil predecir cómo ocurren ciertas cosas y qué esperar de ciertas personas. Más aún, ¡puedes divertirte un poco tú mismo! No hay nada de malo en regañar al jefe y fortalecer a los débiles, hasta quizá la clase disfrute de la camaradería también.

7. Busca cambios. Vas a tener chicos que son atléticos y extrovertidos y otros que no podrían recibir un millón de dólares por ser un alelí de bajo desempeño. Esto es normal, es cuando comienzas a ver cambios drásticos y repentinos que son motivo para estar atento. Si ves algo así, ten en cuenta que probablemente estén pasando por algo más que perder un juego del World of Warcraft o estar varado; quizá necesites tomar acción.

  • Ser adolescente es difícil. Lo recuerdas, ¿verdad? No juzgues rápido a alguien por su vestimenta o peinado, pero considera todo el conjunto. De nuevo, lo que tienes que observar son los cambios “repentinos”. Si el adolescente era un buen estudiante y ahora desaprueba constantemente, es tiempo de que hagas algo. Todos los adolescentes necesitan un buen mentor, y ese puedes ser tú.

Consejos

  • Cada adolescente es diferente. Cada persona madura a distinta edad. Escucha al chico cuando se trate de problemas.
Ft: wikihow