Cómo ahorrar comprando dispositivos electrónicos reacondicionados

Cómo ahorrar comprando dispositivos electrónicos reacondicionados

Dispositivos electrónicos reacondicionados. Cómo ahorrar comprando dispositivos electrónicos reacondicionados. La opción de comprar de segunda mano se plantea con cada vez más frecuencia en el ámbito de la electrónica, sobre todo cuando los aparatos nuevos escasean. Además, los dispositivos usados o reacondicionados son mucho más sostenibles y también económicos. Si tienes alguna inquietud recuerda contactarnos a través de nuestras redes sociales, o regístrate y déjanos un comentario en esta página. También puedes participar en el WhatsApp. Si usas Telegram  ingresa al siguiente enlace.

Los cazadores de gangas encontrarán ofertas en las tiendas online de subastas y anuncios clasificados, así como también en los portales y distribuidores que se han especializado en el llamado «recommerce» y ofrecen dispositivos reacondicionados o renovados. También hay fabricantes que venden en sus tiendas online sus propios dispositivos reacondicionados a precios más bajos.

Los expertos recomiendan comprar a un distribuidor, fabricante o empresas dedicadas a la remanufactura. «Estos productos pueden ser un poco más caros, pero se suministran con garantía y derecho de rescisión», informa Wolfgang Pauler, de la revista especializada alemana «Chip», y añade que estos dispositivos siempre están testados y revisados.

En general, a la hora de comprar artículos electrónicos de segunda mano, hay que prestar atención a todo aquello que pueda desgastarse y, por tanto, deteriorarse. Esto es especialmente importante en el caso de las baterías, por ejemplo, en los teléfonos inteligentes. «La duración de la batería puede ser considerablemente menor que la de los dispositivos nuevos», advierte Christian Wölbert, de la revista especializada alemana «c’t».

 

Opiniones sobre los dispositivos electrónicos reacondicionados

Según Pauler, las baterías recargables pueden soportar fácilmente entre 500 y 1.000 ciclos de carga, siendo un ciclo completo una carga del 0 a 100 por ciento. Suponiendo que la batería se haya descargado en un 70 por ciento y haya sido vuelta a cargar por completo a diario, esta habría perdido tanta capacidad al cabo de dos años que los usuarios tendrían que limitarse bastante.

Sin embargo, según Wölbert, muchas empresas de refabricación prometen baterías con al menos un 80 por ciento de su rendimiento original, y esto se debe a que, en caso de necesidad, la batería se suele sustituir como parte del proceso de reacondicionamiento. En cambio, prosigue, en las tabletas la batería es más duradera porque no se utiliza tanto.

Según Pauler, comprar una cámara compacta de segunda mano no tiene mucho sentido. En cambio, puntualiza, una cámara réflex de un solo objetivo (DSLR) o una cámara de sistema (DSLM) podría valer más la pena, pero en este caso es fundamental realizar un examen minucioso de la mercancía.

El objetivo y el sensor de imagen pueden presentar daños como arañazos, suciedad y polvo apenas visibles a simple vista. Si se quiere estimar la frecuencia de uso y, por tanto, el estrés de una cámara DSLR o DSLM, se puede leer el número de disparos, es decir, el número de fotos tomadas, a través del software. Por supuesto, este valor no dice mucho sobre el estado del objetivo o del sensor.

 

Relojes inteligentes

En el caso de los relojes inteligentes, el momento de la compra podría ser decisivo. Según los expertos, exceptuando el Apple Watch, los ciclos de estos productos son extremadamente cortos. Pauler señala que, por regla general, poco después de la introducción de una nueva gama de productos, los precios de los aparatos nuevos de la generación anterior disminuyen drásticamente.

Además, es posible que los relojes reacondicionados ya no sean resistentes al agua. En los portales de ventas de segunda mano, las ofertas de relojes inteligentes van acompañadas de una nota del proveedor que excluye cualquier daño por agua de la garantía que acompaña el producto.

Según Pauler, esto podría deberse a que se ha sustituido la pantalla o la batería, y, como las juntas suelen dejar de sellar de forma fiable tras su apertura, este suele ser el fin de la resistencia al agua y al polvo.

 

Videoconsolas de segunda mano

En el caso de las videoconsolas de segunda mano, habrá que preguntar si la consola ha presentado defectos antes. Según Pauler, algunos fallos pueden reaparecer incluso después de una reparación. Lo ideal es que los juegos existentes también sean compatibles con la consola deseada.

Pauler recomienda, inmediatamente después de la compra, asegurarse de que el ventilador y el disco duro suenen con normalidad, ya que, si se ha acumulado demasiado polvo en el interior, la refrigeración ya no puede ser eficaz, lo que a su vez puede acortar la vida útil de los componentes electrónicos.

También es importante, advierte Pauler, que las conexiones no estén demasiado desgastadas, ya que de lo contrario los contactos se aflojarían rápidamente. El experto añade que el mando y el joystick también deben estar en buen estado, ya que, como los controladores también contienen baterías sometidas a un uso intensivo, el tiempo de funcionamiento también puede ser menor que el de los dispositivos nuevos.

 

Televisores

Comprar un televisor de segunda mano puede salir a cuenta. En este caso, es poco probable que haya grandes signos de desgaste; al fin y al cabo, el televisor suele estar seco y a salvo en el salón.

Solo en el caso de los dispositivos OLED es aconsejable un poco de precaución. Según Wolfgang Pauler, esto es especialmente importante para las piezas de exposición. «Suelen funcionar con una luminosidad extrema y siempre con las mismas imágenes», señala. Por lo tanto, puede ocurrir que algunos colores se «quemen» dejando una imagen fantasma en la pantalla.

Si el dispositivo tiene más de tres o cuatro años, es probable que no sea compatible con todos los nuevos estándares, por ejemplo, con la visualización de alto contraste (HDR). Y si el sistema operativo del televisor no ha sido actualizado durante mucho tiempo, es posible que las aplicaciones de los servicios de streaming o las bibliotecas multimedia solo funcionen lentamente o no lo hagan.

«Pero esto se puede actualizar muy fácilmente comprando un reproductor Fire TV Stick o un producto similar sin tener que gastar mucho dinero», puntualiza Pauler. Además de Amazon, Roku y Google con Chromecast, hay varios proveedores que ofrecen estos dispositivos.

 

Teléfonos inteligentes y tabletas

¿Y qué pasa en el caso de los teléfonos inteligentes o las tabletas? «En los últimos años, la tecnología de estos dispositivos no se ha desarrollado tan rápidamente como hace diez años», afirma Wölbert, y añade que en este caso merece la pena considerar una compra de segunda mano.

Sin embargo, es posible que algunos móviles o tabletas más antiguos ya no reciban actualizaciones de seguridad. Por lo tanto, se recomienda averiguar de antemano cuánto tiempo tienen previsto los fabricantes seguir ofreciendo actualizaciones de seguridad para el dispositivo en cuestión.