Cambiar la memoria RAM
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Cambiar la memoria RAM: guía con todos los consejos y lo que debes saber para hacerlo
Te traemos una guía con todo lo que debes saber si quieres ampliar la memoria RAM de tu ordenador. De esta manera, si nunca has ampliado esta capacidad vas a tener toda la información, desde una descripción de qué es y qué hace este tipo de memoria hasta otras cosas que debes tener en cuenta para elegir bien lo que vas a comprar.
Como esto es Xataka Basics, vamos a intentar darte explicaciones básicas y simplificadas, sin entrar en tecnicismos. La idea no es la de informarte menos, sino que cualquier usuario sin conocimientos pueda tener las ideas generales que le ayuden en este procedimiento.
Qué es la memoria RAM
La memoria RAM es un tipo de memoria de almacenamiento que tienen los dispositivos. Sus siglas significan Random Access Memory, lo que traducido al español sería Memoria de Acceso Aleatorio, y es un tipo de memoria que te puedes encontrar en cualquier dispositivo, desde ordenadores de sobremesa hasta teléfonos móviles.
En tu dispositivo te vas a encontrar con dos tipos de memoria, la memoria ROM y la RAM. La memoria ROM es esa en la que los datos se quedan permanentemente guardados cuando reinicias el ordenador o el móvil, es la memoria que utilizan los discos duros que tienes en él.
Mientras, en la memoria RAM los datos sólo se almacenan de forma temporal. Esto quiere decir que cada vez que reinicies o apagues tu ordenador, lo normal es que los datos que haya almacenados en la RAM se pierdan. Además, sy velocidad es mucho mayor que la de los discos duros.
Además
La memoria RAM se utiliza para gestionar los datos que utilizan tus aplicaciones y programas. Cuando utilizas una aplicación, esta suele tener datos efímeros que se guardan en la memoria RAM hasta reiniciar, mientras que en los discos duros solo guarda una pequeña parte de información, la tuya de usuario o la de cosas que guardes para volver a utilizarlas después.
Es por esto que la cantidad que tengas afecta directamente al rendimiento de tu dispositivo. Cuanta más RAM tengas más aplicaciones podrás gestionar a la vez, y si en algún momento tuvieras más aplicaciones funcionando de las que puede soportar tu cantidad de memoria RAM, entonces el ordenador puede ir lento y tendrás que cerrar aplicaciones o ampliar la RAM.
A lo que te sueles referir como memoria RAM cuando estás hablando de ella como un componente físico es a unas tarjetas que van conectadas directamente a la placa base de tu ordenador. Estas tarjetas tienen diferentes módulos de memoria integrada que están conectados entre sí
Además
En un ordenador, sueles encontrarte con un número determinado de ranuras de memoria RAM para que puedas montar las que quieras con distintos tamaños. Por ejemplo, si quieres que tu PC tenga 32 GB de RAM puedes tener dos tarjetas de 16, o cuatro tarjetas de 8 GB de RAM. Todo depende de las ranuras que tengas y de cómo las quieras configurar.
En los teléfonos móviles, tabletas o dispositivos conectados al televisor normalmente no sueles ver las ranuras de la RAM ni poder cambiarla, pero es un tipo de memoria que también está ahí. De hecho, es prácticamente el tipo de memoria más importarte.
Para qué sirve exactamente
Un dispositivo como un móvil o un ordenador no ejecutan las aplicaciones directamente desde el disco duro, ya que si hicieran esto tardarían demasiado y todo iría muy lento. Por eso, se utiliza un tipo de memoria más rápida para realizar tareas inmediatas.
Esta es la memoria RAM, y en ella se almacenan cosas como las instrucciones de la CPU o los datos que las aplicaciones necesitan constantemente. Estas instrucciones quedan allí hasta que se apague el ordenador o hasta que se sustituyan por otros nuevos.
Además
Imagínate que estás trabajando en tu escritorio. En él, tus cajones son el disco duro, que es donde guardas todo lo que puedes utilizar. Sin embargo, luego tienes el propio escritorio, que es donde tienes las herramientas y archivos que estás usando ahora. Pues bien, la memoria RAM sería como ese escritorio, donde tienes a mano lo que necesitas sin tener que estar abriendo y cerrando cajones.
La memoria RAM puede ser utilizada por los programas y las aplicaciones de varias maneras. Por ejemplo, si utilizas un navegador, todos los datos de las webs que visitas suelen estar en la RAM para que cuando accedas a ellos los tengas preparados ahí y no tengan que cargar de nuevo. Por eso los navegadores suelen ocupar mucha memoria RAM.
Además, las aplicaciones abiertas se quedan almacenadas en la RAM, de forma que si necesitas volver a usarlas no tengan que cargar desde cero de nuevo, y que carguen rápidamente si tener que estar escribiendo siempre en el disco duro. Por eso, cuantas más memoria RAM tienes más aplicaciones puedes utilizar a la vez, lo que afecta a la multifunción de tu dispositivo.
Qué tipos de memoria RAM existen
Existen varios tipos de memoria RAM. Las memorias de tipo DDR (Double Data Rate) se caracterizan por ser capaces de llevar a cabo dos operaciones en cada ciclo de reloj, a diferencia de las de tipo SDR (Single Data Rate), que solo ejecutan una operación de lectura o escritura. Para hacerlo posible los chips DDR se activan dos veces en cada ciclo de la señal de reloj, bien por nivel (alto o bajo), bien por flanco (de subida o bajada).
Además
Esta forma de funcionar es la misma, como por ejemplo en los estándares DDR3, DDR4, DDR5 o el DDR6 que se encuentra ya en desarrollo. Sin embargo, cuanto más moderno es el estándar que estás utilizando mayor será la velocidad a la que puede operar. Esto quiere decir que no es lo mismo tener una DDR4 con una tasa de datos de 3,2 GB/s y una tasa de transferencia máxima de 25,6 GB/s que una DDR5 con 6,4 GB/s y 51,2 GB/s respectivamente.
Esto quiere decir que las nuevas generaciones de RAM tienen un mayor rendimiento que sus predecesores, así como una mayor escalabilidad y eficiencia energética. De ahí que si quieres un mayor rendimiento pueda ser interesante actualizar. Sin embargo, como te diremos enseguida, si tienes que actualizar la RAM no es suficiente con ponerle a tu ordenador el tipo más moderno que haya.
Por último, también debes saber que los módulos de RAM pueden tener un disipador, que es una especie de capucha de plástico. Normalmente, los módulos que lo llevan suelen ser más modernos y tener un mejor rendimiento, y aunque este disipador no siempre mejora la RAM, uno que lo lleva suele tener mejores chips internos que los que no, por lo menos en las memorias para ordenadores domésticos.
Qué debes saber para cambiarla o ampliarla
Ampliar la memoria RAM no es algo demasiado complicado, aunque hay algunas cosas que debes tener en cuenta antes de lanzarte. Porque no es tan fácil como comprar la más moderna que haya y listo, hay algunas cosas en las que debes fijarte primero.
Comprueba tu tipo de memoria RAM
El tipo de memoria RAM que puedes usar depende de la placa base de tu ordenador. Las placas base son donde instalas todos los componentes que forman un PC, y es donde vas a encontrar las ranuras de memoria RAM.
El problema es que los distintos módulos de RAM son físicamente diferentes, y no solo tienen diferente cantidad de contactos y dientes en su conector, sino que también tienen su muesca en una posición diferente. Esto quiere decir que las ranuras también son diferentes, y que en una que ha sido diseñada para DDR4 no vas a poder instalar una RAM DDR5.
Por eso, antes de ponerte a comprar nuevos módulos de memoria RAM conviene saber cuál es la que usa tu PC. En primer lugar, tienes que identificar cuál es su formato de tamaño, ya que puede ser DIMM y SODIMM. La memoria DIMM es la común, la alargada, mientras que la SODIMM es un tipo mucho más pequeño que podemos encontrar en algunos portátiles, así como impresoras, networks y otros dispositivos más pequeños.
Y una vez hayas identificado su formato de tamaño, tienes que identificar el estándar de tu memoria RAM. Para saber tu memoria RAM, lo recomendable es recurrir a una aplicación llamada CPU-Z, y que se caracteriza por detallar todos los componentes internos que tiene tu ordenador. Es gratuita, y cuando la instales y lances tendrás una pestaña Memory donde te dirá el tipo que tienes.
Aquí, te voy a dar otra mala noticia. Si tienes un ordenador antiguo con un tipo de memoria RAM más antiguo, comprar nuevos módulos posiblemente te saldrá más caro que con el estándar más reciente. Esto es así porque si ya te has quedado una o dos generaciones atrás, los recambios no son tan comunes y pueden ser más caros.
Cuánta necesitas y cómo repartirla
La cantidad máxima de memoria RAM que puedes instalar en tu ordenador viene determinada por la placa base. Aquí, lo que tendrás que hacer es averiguar el modelo exacto que tienes en la factura o con el CPU-Z, y luego mirar en su documentación para ver el máximo.
Sin embargo, lo normal es que no necesites más de 32 GB de memoria RAM en un ordenador. Con 16 GB deberías tener suficiente, y con 32 GB tendrás de sobra prácticamente para todos los usos que le des. En algunos casos extremos, si haces tareas muy pesadas y exigentes como edición de vídeo podrías necesitar más, pero para un uso cotidiano a día de hoy serían entre 16 y 32 GB de memoria.
Otro de los límites a la hora de ampliar la memoria RAM de tu PC o portátil es el número de ranuras que tenga tu dispositivo, algo que también depende de la placa base. Por lo tanto, si abres tu PC y ves que tienes cuatro ranuras, pues ya sabes la cantidad máxima de módulos que puedes instalar.
Además
Viene otra decisión a tener en cuenta, en cuántos módulos repartir la memoria RAM que quieres. Imagínate que tu PC tiene ranuras DDR4, que tiene módulos de hasta 16 GB de RAM, tienes cuatro ranuras disponibles y quieres conseguir 32 GB de RAM. Podrías utilizar dos módulos de 16 GB u 4 módulos de 8 GB.
Aquí, debes saber que en rasgos generales no vas a encontrar una gran diferencia. Muchas placas base van a funcionar con configuraciones de doble canal, que mejoran el rendimiento conjunto de dos módulos, utilices 2 o 4 módulos de memoria RAM. Por lo tanto, no debería haber grandes diferencias.
Por lo general, suele recomendarse utilizar dos módulos de memoria RAM en los ordenadores domésticos, ya que en muchos tests suelen funcionar igual, y aunque en casos de gaming cuatro módulos puedan llegar a dar mejor rendimiento, la diferencia va a ser muy pequeña.
En algunos usos profesionales en los que el ancho de banda sea muy importante y se use una placa base de cuádruple canal, entonces cuatro módulos pueden tener un rendimiento mayor. Aunque no en velocidad, sino en el ancho de banda. Pero en la mayoría de casos con ordenadores domésticos esto no será así.
Además
Para no liarte, lo recomendado suele ser instalar dos módulos, aunque si por estética quieres instalar cuatro tampoco tendrás un rendimiento negativo. Eso sí, si compras packs de cuatro módulos debes fijarte que para abaratar el conjunto no te estén vendiendo módulos con peores especificaciones.
Por eso, antes de ponerte a comprar nuevos módulos de memoria RAM conviene saber cuál es la que usa tu PC. En primer lugar, tienes que identificar cuál es su formato de tamaño, ya que puede ser DIMM y SODIMM. La memoria DIMM es la común, la alargada, mientras que la SODIMM es un tipo mucho más pequeño que podemos encontrar en algunos portátiles, así como impresoras, networks y otros dispositivos más pequeños.
Y una vez hayas identificado su formato de tamaño, tienes que identificar el estándar de tu memoria RAM. Para saber tu memoria RAM, lo recomendable es recurrir a una aplicación llamada CPU-Z, y que se caracteriza por detallar todos los componentes internos que tiene tu ordenador. Es gratuita, y cuando la instales y lances tendrás una pestaña Memory donde te dirá el tipo que tienes.
Aquí, te voy a dar otra mala noticia. Si tienes un ordenador antiguo con un tipo de memoria RAM más antiguo, comprar nuevos módulos posiblemente te saldrá más caro que con el estándar más reciente. Esto es así porque si ya te has quedado una o dos generaciones atrás, los recambios no son tan comunes y pueden ser más caros.
Cuánta necesitas y cómo repartirla
La cantidad máxima de memoria RAM que puedes instalar en tu ordenador viene determinada por la placa base. Aquí, lo que tendrás que hacer es averiguar el modelo exacto que tienes en la factura o con el CPU-Z, y luego mirar en su documentación para ver el máximo.
Sin embargo, lo normal es que no necesites más de 32 GB de memoria RAM en un ordenador. Con 16 GB deberías tener suficiente, y con 32 GB tendrás de sobra prácticamente para todos los usos que le des. En algunos casos extremos, si haces tareas muy pesadas y exigentes como edición de vídeo podrías necesitar más, pero para un uso cotidiano a día de hoy serían entre 16 y 32 GB de memoria.
Además
Otro de los límites a la hora de ampliar la memoria RAM de tu PC o portátil es el número de ranuras que tenga tu dispositivo, algo que también depende de la placa base. Por lo tanto, si abres tu PC y ves que tienes cuatro ranuras, pues ya sabes la cantidad máxima de módulos que puedes instalar.
Y luego viene otra decisión a tener en cuenta, en cuántos módulos repartir la memoria RAM que quieres. Imagínate que tu PC tiene ranuras DDR4, que tiene módulos de hasta 16 GB de RAM, tienes cuatro ranuras disponibles y quieres conseguir 32 GB de RAM. Podrías utilizar dos módulos de 16 GB u 4 módulos de 8 GB.
Aquí, debes saber que en rasgos generales no vas a encontrar una gran diferencia. Muchas placas base van a funcionar con configuraciones de doble canal, que mejoran el rendimiento conjunto de dos módulos, utilices 2 o 4 módulos de memoria RAM. Por lo tanto, no debería haber grandes diferencias.
Además
Por lo general, suele recomendarse utilizar dos módulos de memoria RAM en los ordenadores domésticos, ya que en muchos tests suelen funcionar igual, y aunque en casos de gaming cuatro módulos puedan llegar a dar mejor rendimiento, la diferencia va a ser muy pequeña.
En algunos usos profesionales en los que el ancho de banda sea muy importante y se use una placa base de cuádruple canal, entonces cuatro módulos pueden tener un rendimiento mayor. Aunque no en velocidad, sino en el ancho de banda. Pero en la mayoría de casos con ordenadores domésticos esto no será así.
Para no liarte, lo recomendado suele ser instalar dos módulos, aunque si por estética quieres instalar cuatro tampoco tendrás un rendimiento negativo. Eso sí, si compras packs de cuatro módulos debes fijarte que para abaratar el conjunto no te estén vendiendo módulos con peores especificaciones.
Otras cosas a tener en cuenta
Hay algunas otras cosas a tener en cuenta cuando quieras cambiar la memoria RAM. Por ejemplo, vas a poder mezclar módulos de memoria RAM de distintos fabricantes, de distintos tamaños o incluso distintas velocidades. Sin embargo, esto no siempre va a ser mejor para el rendimiento de tu ordenador.
Para mejorar el rendimiento de tu RAM, lo mejor es apostar por una única marca, del mismo tamaño y de la misma frecuencia. La frecuencia o velocidad de la RAM son importantes, y todo tu conjunto irá a la frecuencia del módulo que tenga la inferior. O sea que si hay algún módulo «peor», entonces podría «ralentizar» lgeramente todo el conjunto.
En este aspecto, lo mejor es que compres varios módulos de un mismo modelo que tengan los mismos componentes, ya que así se llevarán mejor entre ellos y tendrás un mejor rendimiento. Aunque si por alguna emergencia necesitas mezclar, puedes hacerlo aunque no es lo recomendado.
Además
Porque tienes que saber que más allá de la cantidad de gigas de RAM, estos módulos también tienen sus velocidades y frecuencias. Si tu RAM tiene una frecuencia de 2000MHz y tu placa base solo soporta memorias RAM de 1333MHz, entonces los 700MHz restantes no se utilizarán. Y si mezclas módulos de RAM y tienes uno que va a 2400MHz y otro que va a 3600MHz, ambos módulos funcionarán a 2400MHz.
Se suele recomendar tener cantidades pares de RAM. Esto es así porque si pones dos módulos, estos funcionarán con un modo de doble canal haciendo que sean más eficientes y haya un mayor rendimiento. Podrías poner un tercer módulo para tener más cantidad de RAM, como por ejemplo 24 GB en vez de 16 con tres módulos de 8 GB, pero dependiendo de tu placa base esto podría desactivar el modo de doble canal, haciendo que el rendimiento caiga.
Además
Debes saber que tener más RAM generalmente hará que tu ordenador sea más rápido a la hora de trabajar más programas. Incluso si crees que con 16 GB de RAM tienes suficiente, puedes notar muchas mejoras si amplías a 32 GB.
Hay un par de excepciones. Por ejemplo, si tu CPU y tu GPU tienen potencias notablemente diferentes, puede crearse un cuello de botella que ralentice todo el ordenador, y esto es algo que no vas a solucionar ampliando la RAM. Vamos, que comprar una super tarjeta gráfica para un ordenador con un procesador algo malo, podría ralentizarlo todo.
Lo mismo pasa cuando estés utilizando un disco duro antiguo o defectuoso en tu ordenador, uno de esos que no es SSD. Entonces, por mucha memoria RAM que le pongas no vas a notar grandes mejoras de velocidad, ya que lo que tu ordenador necesita es un SSD.
Cambiar la memoria RAM
Cambiar la memoria RAM es sencillo. Tienes que abrir tu ordenador, y dentro verás las ranuras especificas donde se colocan los módulos de memoria. Una vez te has asegurado de comprar los que te corresponden según el modelo con el que es compatible la placa base, es tan fácil como conectarlos y ponerles unas pestañitas que los dejan fijados.
En un portátil puede ser más difícil, y en algunos casos ni siquiera tendrás acceso a las ranuras o no podrás ampliarla, necesitando ir a un especialista. Pero en el caso de los ordenadores de sobremesa es algo bastante sencillo, y casi cualquier persona va a poder hacerlo.
Eso sí, acuérdate de que tu ordenador tiene que estar apagado cuando vayas a hacer cualquier cambio interno. Y no lo enciendas hasta que los nuevos módulos estén correctamente instalados.