¿A dónde ha llegado la humanidad? ¿Qué tan conscientes estamos de la condición humana y el destino al que nos hemos traído? Estas preguntas son las que nos quedan después de ver la película que mezcla la sensibilidad artística de un cineasta y la habilidad para retratar de un documentalista.

Wim Wenders y Juliano Ribeiro Salgado dirigieron este documental que no nos llevará por un simple recorrido de la fotografía de Sebastiao Salgado: refugiados en Congo, en Yugoslavia, hambrunas en Etiopía, trabajadores, masacres, madres con sus hijos pidiendo auxilio, fábricas, campamentos y tantas imágenes más. Este trabajo nos muestra al mundo y la humanidad –La sal de la tierra- a través de los ojos de Sebastiao Salgado, un fotógrafo nacido en Minas Gerais, Brasil, en 1944.

Antes de entender el mundo a través de los ojos de Salgado, Wim Wenders y Juliano Ribeiro Salgado, hijo del fotógrafo en cuestión, nos cuentan su vida. Pero este documental no cae en las entrevistas insípidas de un hombre hablando con un entrevistador y la cámara captando tres cuartos del rostro del entrevistado, sino que Salgado está constantemente dirigiéndose a los ojos del espectador. Cada vez que vemos al fotógrafo, en una toma en blanco y negro de su rostro, parece que a quienes les relata las historias de su vida o su fotografía es a quienes lo podemos ver en la pantalla y no al director.

El documental tampoco es puro material filmado por Wenders y Juliano, con su equipo, en las selvas de Indonesia, páramos en Siberia o el Amazonas, acompañando al fotógrafo. Mientras vemos cómo ocurren cronológicamente los proyectos de Salgado –libros editados con su esposa y realizados con material que tardó años en tomar-, vemos las fotografías en la pantalla, de la mano con las narraciones del autor, casi como si estuviéramos con él viendo alguno de los tomos que hizo en su vida.

Es un documental que puede desamparar con su brutalidad a cualquiera, porque Salgado, como fotógrafo social, no retrató situaciones fáciles de soportar. Pero este sensible documental que Wenders y Juliano nos trajeron es un trabajo de cómo hacer que un documental parezca más un trabajo cinematográfico tan profundo como el que encontramos en la literatura.

La sal de la tierra, que por cierto, está nominado como mejor documental para la próxima entrega de los Premios Oscar, se exhibirá por última vez en el Ambulante el día de hoy, domingo 8 de febrero en Cinépolis Perisur a las 16:45. Les dejamos a continuación el avance cinematográfico para que vean que es un trabajo que no pueden perderse.

@elyex