Aplicaciones De Productividad Para Trabajadores Remotos

7 Trucos para Mantener la Productividad

7 Trucos para Mantener la Productividad Trabajando desde Casa. Cuando pensamos en trabajar desde casa, muchas veces nos imaginamos en pijama, con una taza de café en mano, y sin jefes rondando. Pero, la realidad puede ser un poco diferente. Si no te preparas, tu sala puede convertirse en el escenario de distracciones continuas y bajos niveles de productividad. Pero no te preocupes, hemos recopilado siete trucos para mantener la productividad trabajando desde casa. Vamos a verlos. Si tienes alguna inquietud recuerda contactarnos a través de nuestras redes sociales, o regístrate y déjanos un comentario en esta página. También puedes participar en el WhatsApp. Si usas Telegram  ingresa al siguiente enlace.

Índice

  1. Crea tu Espacio de Trabajo Sagrado
  2. Planifica tu Día como si Fueras a la Oficina
  3. Toma Descansos Estratégicos
  4. Evita las Distracciones Digitales
  5. Haz Ejercicio… Sin Salir de Casa
  6. Comunicación Clara con Quienes Compartes el Hogar
  7. Reflexiona y Adapta
  8. Conclusión

Crea tu Espacio de Trabajo Sagrado

No, no me refiero a un altar (a menos que eso sea lo tuyo). Se trata de un rincón dedicado exclusivamente a trabajar. Evita trabajar desde la cama o el sofá; estos lugares están asociados al descanso y pueden dificultar tu concentración. Un espacio definido te ayudará a entrar en «modo trabajo» automáticamente.

Aquí algunos consejos para configurar tu espacio de trabajo ideal y mejorar tu productividad trabajando desde casa:

  • Iluminación apropiada: La luz natural es la mejor. Si es posible, sitúa tu espacio de trabajo cerca de una ventana. Una buena iluminación reduce la fatiga ocular y mejora el estado de ánimo.
  • Mesa y silla cómodas: Invierte en un escritorio espacioso y una silla ergonómica. Tu espalda y postura te lo agradecerán a largo plazo.
  • Organización: Mantén tu espacio ordenado. Un escritorio desordenado puede ser una fuente constante de distracción y estrés.
  • Elementos inspiradores: Aunque es vital mantener el orden, añadir elementos personales como plantas, fotografías o citas motivadoras puede hacer que tu espacio de trabajo sea más agradable y te inspire a dar lo mejor de ti cada día.

Dedicar tiempo y esfuerzo para establecer un área de trabajo adecuada es esencial para tu productividad y bienestar general. ¡Haz de tu espacio un santuario de eficiencia!

Planifica tu Día como si Fueras a la Oficina

Comienza el día con una rutina: dúchate, vístete (no necesitas un traje, pero tampoco quedes en pijama), prepara tu desayuno y planifica tus tareas. La estructura es una aliada inesperada de la creatividad y productividad. Para esto puedes usar Todoist.

Toma Descansos Estratégicos

Trabajar desde casa puede, paradójicamente, hacer que sientas que no debes parar nunca. Pero aquí entra en juego la importancia de los descansos estratégicos. La técnica Pomodoro se ha consolidado como una de las favoritas entre los profesionales del home office y por una buena razón. Aquí te explicamos en detalle sobre la Técnica Pomodoro.

Evita las Distracciones Digitales

Sí, ese meme en Instagram es hilarante, y es tentador ver «sólo un episodio más» en la TV o responder ese mensaje no urgente que acaba de llegar a tu teléfono. Sin embargo, todas estas distracciones suman y pueden desviarte significativamente de tus objetivos diarios. Es crucial crear un ambiente de trabajo que minimice estas tentaciones.

Considera aplicaciones como Forest o Focus@Will que te ayudan a mantener la concentración alejándote de las distracciones. Si trabajas desde una computadora, también podrías pensar en configurar bloqueadores de sitios web para evitar la tentación de visitar redes sociales o sitios de noticias durante horas de trabajo. Recuerda, cada minuto que gastas en distracciones es un minuto menos que tienes para ser productivo y alcanzar tus metas diarias.

Haz Ejercicio… Sin Salir de Casa

El ejercicio no solo fortalece tu salud física, sino que también es un impulso vital para tu bienestar mental. Ya sea una rutina corta de yoga, unos minutos de cardio o sencillamente hacer flexiones en el suelo, la liberación de endorfinas durante la actividad física actúa como un antidepresivo natural. Estas endorfinas combaten el estrés y la ansiedad, a menudo amplificados por el ambiente solitario del trabajo desde casa. Incorporar «pausas activas» en tu día, como caminar un poco durante una llamada o hacer estiramientos suaves, puede marcar una diferencia significativa en cómo te sientes tanto física como mentalmente.

A medida que avanza el día, especialmente durante esos bajones de energía de la tarde, cambiar de actividad puede ser tu salvavidas. Antes de alcanzar esa taza de café, considera hacer unos saltos o incluso bailar un poco con tu música favorita. Si es posible, salir al aire libre y disfrutar de una caminata rápida o simplemente unos momentos bajo el sol puede ser revigorizante. La idea central es mantener el cuerpo en movimiento, ofreciendo un combustible esencial no solo para tu físico, sino también para tu mente y productividad.

Comunicación Clara con Quienes Compartes el Hogar

Si vives con familiares o compañeros de piso, establece límites. Hazles saber tus horarios de trabajo y cuándo no debes ser interrumpido. Una señal en la puerta de tu espacio de trabajo puede ser útil. Al principio puede resultar algo complicado si no están acostumbrados, ya que te tenían siempre que querían a disposición, sin embargo, una vez que establezcas estos horarios, pasado un tiempo, lo respetarán.

Reflexiona y Adapta

Al final de la semana, reflexiona sobre lo que funcionó y lo que no. Tal vez descubras que eres más productivo en la tarde que en la mañana. Adapta tu horario y hábitos en consecuencia. También puedes conocer qué se te da mejor hacer y en qué momento. Por ejemplo, se recomienda que las tareas más difíciles se realicen lo primero en la mañana, cuando la mente está fresca y más receptiva. Las primeras horas del día suelen estar cargadas de energía y, a menudo, están libres de interrupciones y distracciones que se acumulan a medida que avanza el día.

Además, este es un momento donde, por lo general, el mundo aún no ha empezado a exigirte atención, permitiéndote zambullirte en proyectos o tareas que requieren un alto nivel de concentración. De hecho, muchas personas exitosas juran por la rutina de «las primeras cosas primero», abordando las tareas más desafiantes y prioritarias antes de que el reloj marque el mediodía.

Por otro lado, si notas que tu energía tiende a aumentar durante la tarde o noche, ese podría ser el momento ideal para ti. Algunas personas son noctámbulas por naturaleza y encuentran su pico de creatividad y productividad cuando el mundo se sumerge en la tranquilidad nocturna.

También es vital reconocer las tareas que requieren de tu máxima creatividad frente a las que son más rutinarias. Por ejemplo, si eres escritor, quizás encuentres que tus horas más inspiradoras son durante el amanecer o al anochecer. Pero las tareas administrativas, como responder correos o actualizar archivos, se pueden hacer cuando no necesitas ese alto nivel de energía creativa.

Conclusión

Mantenerse tu productividad trabajando desde casa no es una utopía; es completamente alcanzable con un poco de estrategia y autodisciplina. Ahora que estás armado con estos trucos, es hora de conquistar el mundo del trabajo remoto, ¡sin siquiera poner un pie fuera de la puerta!