4 trucos para arrancar el coche a la primera si hace frío

4 trucos para arrancar el coche a la primera si hace frío

4 trucos para arrancar el coche a la primera si hace frío. Pronto llegarán los días de frío y hay que adaptarse a ellos. Y en esas, más allá de si tu coche es más nuevo o más antiguo, es posible que le cueste arrancar. Esto no es algo nuevo, pues ocurre con frecuencia, más en los tiempos donde las noches se hacen más frías que de costumbre. Por tanto, es importante que sepas algunos trucos para hacerlo despertar sin que el motor sufra. Si tienes alguna inquietud recuerda contactarnos a través de nuestras redes sociales, o regístrate y déjanos un comentario en esta página. También puedes participar en el WhatsApp. Si usas Telegram ingresa al siguiente enlace.

El coche necesita entrar en calor, pero sin ser brusco

Cuando el coche lleva varias horas durmiendo bajo unas gélidas temperaturas, lo último que quiere es tener que iniciar la marcha de forma brusca. Para evitar que sufra, lo mejor es dejar que entre poco a poco en calor. De lo contrario, podría acelerarse su proceso de desgaste y, lo que es peor, causar averías que podrían llegar a ser incluso graves.

Porque, ya sea que sea uno más nuevo o que arrastre unos años a sus espaldas, los coches necesitan entrar en calor antes de iniciar la marcha. De lo contrario, no solo estarás provocando un desgaste mecánico, sino también es probable que, con el tiempo, pueda sufrir alguna avería importante por ello.

Y es que cuando la temperatura exterior es muy baja, a los coches de combustión (a los híbridos y eléctricos también) les cuesta mucho más arrancar. De hecho, si tratas de hacerlo sin cuidado, estarás sometiendo a los calentadores del motor de tu coche diésel a un esfuerzo extra. Esto es algo que afectará, en primer lugar, a toda la parte eléctrica del vehículo, y más tarde, a todo el engranaje del motor.

Cómo podemos hacerlo

Como tal, y antes de empezar a nombrarte los trucos y consejos que pueden ayudarte en este proceso para que no sufras ni tú ni coche a la hora del arranque, debes tener especial cuidado si este ha pasado la noche a la intemperie, ya que al intentar ponerlo en marcha por la mañana puedes notar que le cuesta más de lo normal.

En estas situaciones el motor del vehículo sufre y puede acabar dañado. Asimismo, si esto te llega a ocurrir, recuerda contar con un seguro de coche con todas las coberturas que necesites y cumpla con las características específicas de tu vehículo para conducir totalmente tranquilo en cualquier época del año.

Calienta la batería con un trapo (con calma)

Si en una mañana de frío tu coche no arranca lo primero que debes hacer es armarte de paciencia, aunque tengas prisa por llegar al trabajo o a cualquier otro lugar, ya que el proceso puede llevar un tiempo y es importante hacerlo bien para evitar averías y futuras reparaciones.

Una de las claves es calentar la batería, incluso antes de meter la llave en el contacto. Puedes utilizar un trapo que hayas calentado antes y posarlo unos minutos sobre la batería. Eso sí, nada de colocar objetos húmedos sobre la misma.

arrancar

Enciende el sistema eléctrico

Una de las maneras de arrancar un coche en frío es encender el sistema eléctrico del vehículo unos segundos y repetir el proceso dos o tres veces. En este sentido, lo más recomendable será girar la llave solo hasta el primer punto (en el que hace contacto pero no llega a arrancar el motor). De esta manera, los calentadores del combustible se activarán con menos esfuerzo.

Si le damos al contacto dos o tres veces antes de arrancar el motor, permitirás que los calentadores trabajen durante más tiempo y no se vean expuestos a un abrupto arranque en frío. Así, lo que conseguimos es que el inicio de la combustión sea mucho más fluido y suave para el vehículo.

Cuidado con la refrigeración

Lo mismo ocurre con la refrigeración: debes utilizar un líquido refrigerante con propiedades anticongelantes. Todos los líquidos refrigerantes llevan un elemento anticongelante para permitir un abanico amplio de temperaturas de uso. En la mayoría de los casos, el elemento anticongelante es el etilenglicol, dependiendo su porcentaje el punto de congelación será mayor o menor.

Por ejemplo, con un 25% de este elemento tu vehículo aguantará por debajo de los 12 grados bajo cero. Suficiente en la mayoría de los casos. También debes tener en cuenta que debes añadir un líquido anticongelante al liquido del limpiaparabrisas, aunque en condiciones de mucho frío es mejor no utilizarlo al aire libre.

Conduce un par de minutos al ralentí

Este consejo es muy útil siempre que se arranque el coche, sea la estación que sea, pero más aún durante los meses de frío. Si el coche lleva varias horas estacionado bajo el frío, el aceite, además de volverse más viscoso, desciende al cárter, es decir, queda muy lejos de la zona que debe lubricar.

Si nada más arrancar revolucionamos el motor, y las piezas no están correctamente lubricadas, lo que estamos haciendo es desgastarlo y, con el tiempo, puede pasar factura. Si, en vez de eso, dejamos que el motor esté al ralentí durante un breve tiempo, estaremos haciendo que se caliente y vaya lubricando las piezas del motor.

Si el frío es muy extremo, también podemos circular durante un par de minutos al ralentí para dejar que se aclimate, y después, hacerlo suavemente subiendo la intensidad gradualmente.