Tips básicos para conductores primerizos. El sueño de tener vehículo propio y conducir por primera vez pueden ser lo máximo. Sin embargo, varios estudios a nivel global muestran que los conductores primerizos tienen mayores probabilidades de sufrir accidentes por la falta de experiencia y por desconocimiento de ciertos aspectos técnicos, mecánicos y maniobras claves. Pensando en esta realidad y con el fin de contribuir a la seguridad vial del país, Hankook Tire comparte los principales tips para conductores novatos. Si tienes alguna inquietud recuerda contactarnos a través de nuestras redes sociales, o regístrate y déjanos un comentario en esta página. También puedes participar en el WhatsApp. Si usas Telegram ingresa al siguiente enlace.

“Los conductores principiantes deben contar con conocimientos básicos que pueden hacer la diferencia entre la vida y la muerte. Por ejemplo, un estudio de Seguros de Automóviles (ESA) de España, muestra que la probabilidad de provocar un accidente entre los conductores jóvenes es un 27% superior a la del conjunto de conductores. Si, además, son novatos, esa probabilidad es un 125% superior. Existen aspectos fundamentales que son claves para prevenir esta situación. Conocer la existencia del punto ciego, respetar la distancia adecuada entre vehículo y vehículo, no conducir en neutro, mantener el inflado correcto en los neumáticos, son entre los más importantes”, explicó Carlos Cruz, Gerente comercial de la línea de automóvil y camioneta de Hankook Tire.

A continuación el detalle de estos y más tips para conductores novatos:

Ojo con el punto ciego:

Generalmente, los novatos no prestan atención al punto ciego, ese espacio que es difícil visualizar a través de los retrovisores y que requiere verificar con mucho cuidado que un vehículo no se encuentre en el carril de junto para poder cambiar de carril.

Evitar el neutro para desplazar el vehículo:

Este suele ser uno de los errores más comunes de los novatos, sin embargo, es muy peligroso, ya que, debido a la ausencia de conexión entre transmisión y ruedas, se podría generar pérdida de adherencia en una curva muy pronunciada y comprometer la estabilidad del vehículo. Cuando el vehículo está apagado y se mueve en neutro también es peligroso, ya que la capacidad de respuesta de los frenos disminuye.

Conducir con la presión incorrecta de los neumáticos:

Casi siempre se suele descuidar la medición del aire de las llantas. Sin embargo, el nivel del aire es importante y si no cuenta con el correcto puede ocasionar accidentes. Lo recomendable es tener las llantas infladas por lo menos con la presión recomendada. Ésta se encuentra generalmente en una placa en el costado de la puerta del conductor, o en la tapa de la gasolina o en el manual del auto. Una llanta por debajo de la presión de aire recomendada consumirá más gasolina, elevará la emisión de CO2 y provocará un desgaste prematuro de la llanta. Además, reduce la eficiencia en el frenado, causa desgaste irregular y puede llevar a un estallido.

Mover el vehículo al menos unos centímetros si va a estar parado más de 15 días:

Las llantas pueden deformarse si el vehículo permanece estacionado por demasiado tiempo. Por ello se recomienda moverlo al menos unos centímetros para que la superficie de contacto varíe y no afecte sus propiedades. Mantenerlo así también puede hacer que las llantas desarrollen puntos planos que ocasionan un desbalance mientras se conduce.

Prestar atención si el vehículo se va hacia un lado cuando va en línea recta:

Si esto sucede indica que el vehículo necesita balanceo y alineación urgente, ya que al perder la alineación se deteriora la suspensión, lo cual desgasta las llantas de manera irregular, se pierde agarre y tracción. Por otro lado, la falta de balanceo y alineación de las ruedas producen el desgaste irregular de las mismas, exigiendo más potencia al vehículo para desplazarse, lo que genera mayor consumo del combustible

Cambiar las llantas cada 3 o 5 años dependiendo del uso que se le dé al vehículo:

Un conductor primerizo suele activar con mayor frecuencia el freno, lo que genera mayor desgaste. Lo más recomendable es realizar un cambio según la recomendación del fabricante y según el uso. Los materiales de la mayoría de las llantas tienen una vida útil de 10 años, por este motivo al realizar el cambio se recomienda revisar la fecha de fabricación del mismo.

Revisar el labrado de las llantas:

Esto garantiza un mejor agarre en la superficie y a distribuir elementos como el agua, tierra y lodo, evitando que se acumulen y ocasionen accidentes. Se puede emplear el método de la moneda, introduciendo una moneda de un centavo en las ranuras, ésta debe hundirse hasta la mitad, lo que indicará que aún no existe mayor desgaste o, a su vez, si no se hunde significa que se debe realizar el cambio de llantas.

Mantener una distancia adecuada con los demás vehículos:

Esto es imprescindible para reaccionar con el tiempo adecuado en caso de que el vehículo delantero frene de manera inesperada.

“Dentro de los conocimientos básicos que debe tener un conductor novato, tener presente los principales relacionados a los neumáticos es de vital importancia, ya que un neumático en mal estado representa un riesgo de seguridad, ya que sus principales funciones son: transmitir la potencia de aceleración y/o frenado del vehículo al piso, facilitar la dirigibilidad del mismo, ser capaz de cargar el peso del vehículo y proveer confort absorbiendo las irregularidades del terreno”, concluye el especialista de Hankook Tire.