Teletrabajo: ¿Cómo potenciar el rendimiento de tu computadora?
Teletrabajo. Hay tres componentes en los que se debe lograr un balance para que tu equipo se ajuste a la demanda que supone esta modalidad. Te explicamos cuáles:
La implementación generalizada del teletrabajo, modalidad a la que un total de 439.537 personas se han acogido en Ecuador hasta el pasado 1 de octubre de 2020, transformó el modo en que se viven las jornadas laborales: dentro de los hogares se improvisaron oficinas, las reuniones fueron reemplazadas por videoconferencias y, en algunos casos, todas esas actividades se realizan desde las computadoras personales, que además pueden ser compartidas entre varios miembros de la familia, lo que supone mayor presión para estos equipos.
Y es que en el contexto de la pandemia del nuevo coronavirus, se ha identificado que “un enorme porcentaje de computadoras, que están en funcionamiento en las casas y empresas, no están listas para enfrentar esa demanda” que supone la nueva realidad, dice José Luis Fernández, gerente de tecnología de Kingston Sudamérica.
Él se refiere a cómo el uso constante de aplicaciones, entre las que resalta varias como Zoom y Google Meet, además de las nuevas herramientas y programas que suelen incorporarse para ejecutar labores del día a día, se traducen en una fuerte exigencia para estos dispositivos que no necesariamente se adquirieron con ese fin.
En este escenario son dos las opciones: comprar uno nuevo o actualizar el que tienes. La salida más económica es la segunda y, en ocasiones, es más que suficiente para mejorar su funcionamiento. El requerimiento general, tenga el procesador que tenga el ordenador, salvo que se trate de uno muy antiguo, suele tener más relación con una baja memoria RAM o con un disco muy lento.
“Son los problemas más usuales porque tú trabajas con Zoom, Outlook, Chrome, con varias pestañas abiertas y, en general, hay muchísimos equipos todavía que siguen teniendo cuatro gigas de RAM. Eso para la demanda actual es totalmente insuficiente”, asegura Fernández, quien agrega que la cantidad mínima “para trabajar decentemente” es de ocho gigas, mientras que 16 es lo recomendable para algo más multitarea o intenso.
Otro aspecto fundamental es el almacenamiento. Tradicionalmente, las computadoras tenían disco duro; pero este cumplió su función durante décadas —apunta Fernández— y, actualmente, deja paso a una nueva generación: la unidad de estado sólido o SSD. Entre las ventajas que ofrece está una mayor rapidez en cuanto a tiempos de reacción; la tasa de transferencia, es decir, la velocidad con que se transmiten los datos, también aumenta: es de cinco hasta 30 veces más rápida que la de un disco mecánico.
“Cuando tú reemplazas el disco duro de tu laptop o PC por un SSD automáticamente el sistema operativo parte muchísimo más rápido, las aplicaciones se cargan casi instantáneamente y la PC se siente otra vez viva, otra vez ágil. La performance en un computador va variando de acuerdo al perfil del usuario y de lo que demande de ese computador, pero básicamente son tres los componentes principales en donde hay que lograr un determinado balance: el procesador, la memoria y almacenamiento”, señala.
¿En qué casos es posible potenciar el rendimiento de un equipo?
Teletrabajo. Según Fernández, las posibilidades de expansión están muy por encima de lo que la percepción del usuario normalmente le indica: “por más que te parezca que tu equipo ya está viejo, si todavía funciona, es probable que todavía pueda recibir una actualización tanto de memoria como de unidad de estado sólido”. Esto, con excepción de los que tengan más de una década de uso.
En este sentido, resulta importante analizar si se trata de un dispositivo expandible desde el momento de la compra —pues hay algunos como los llamados ultrabooks que no lo son—, además de si se requiere uno portable realmente. Por ello, recomienda que si busca adquirir un nuevo computador se hagan las siguientes preguntas: ¿lo puedo llevar en el futuro a más?, ¿a cuánto?, ¿le puedo poner otro disco? Sobre el tema de precios, indica que suele ser más económico decidirse por un desktop que comprar un laptop.
¿De qué manera afecta el tipo de conexión a Internet?
Además de alcanzar una correcta configuración entre el procesador, la memoria y el almacenamiento, Fernández sostiene que otro aspecto a considerar para un buen desempeño es el tipo de acceso a Internet, que como advierte en algunos países está al límite, debido a que hay gente conectada todo el tiempo. “A veces, lamentablemente, se puede hacer un upgrade de la conexión o comprar una mejor; no tienes la opción de elegir un proveedor o cambiarlo, ahí es un poco más complejo”, añade. Teletrabajo
Sin embargo, aconseja no tener instalados demasiados programas que no sean necesarios, pues quedan ahí instalados y activos, chequeando Internet continuamente para actualizaciones. Esos son puntos a tomar en cuenta cuando uno está bajo esa problemática: tratar de desactivar para no exigirle más esa conexión.
Teletrabajo ¿Qué cuidados se debe tener para preservar su vida útil?
En términos del cuidado físico, la clave es mantener el equipo limpio. Tanto laptops como desktops, tienen en su interior ventiladores, por lo que las rejillas se deben mantener libres de polvo para permitir la libre circulación de aire y así evitar sobrecalentamiento.
Otro aspecto fundamental tiene que ver con la ciberseguridad, , de los virus, de los ransomware: “Hay ataques enfocados específicamente en la pandemia: te llega un correo que te indica que hagas un click para saber cuántos infectados hay en tu localidad. La gente hace click y entra un tremendo virus”, expone. Es así que recomienda tener antivirus actualizados. “Así como que hay cuidarse del coronavirus, hay que cuidarse de los virus informáticos”, concluye.