Señaló que en Quito los hospitales han afirmado que están a su máxima capacidad y que no cuentan con camas de cuidados intensivos.

Andrés Peralta, especialista en salud pública y epidemiólogo del proyecto CEAD – Universidad Miguel Hernández del Elche, rechazó la información de ciertos medios de comunicación que a través de entrevistas y reportajes hacen ver que la gente ya está en las calles y por tanto se hace necesario levantar las medidas de aislamiento sin tomar en cuenta los planteamientos de la Organización Mundial de la Salud.

“La ciudadanía ha cumplido en gran parte las medias en base a sus posibilidades. Si vemos los informes de movilidad en google, el cumplimiento en Ecuador es mejor que otros países”.

Recordó que la OMS ha advertido de un rebrote si se hacen cambios tempranos a la cuarentena pues provocaría un colapso del sistema sanitario: “Lo que conlleva tener a familiares infectados sin capacidad de ser atendidos, es el peor escenario y hemos estado intentando evitar”.

El experto manifestó que varios sectores de salud pública e Instituciones de Educación Superior han cuestionado la calidad y confiabilidad de las cifras emitidas por el Gobierno Nacional sobre el número de contagiados y fallecidos; y ahora por el apagón de datos que se tiene desde hace días: “Esto genera dudas en la capacidad de diagnosticar casos nuevos que permita tener una idea de cómo está el estado de la epidemia”.

Incluso mencionó que Ecuador, según el Registro Civil, tiene una mortalidad alta, y no se debe a que el virus es más letal en este país que en otros lugares del mundo sino porque existen problemas serios a la hora de diagnosticar los casos.

A criterio de Peralta los cantones no conocen la capacidad real para atender la epidemia porque solo en Quito el hospital Pablo Arturo Suarez ha manifestado que está a su máxima capacidad y el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) informa que ya no tiene camas para cuidados intensivos: “Y el segundo criterio que pide la OMS es que el sistema hospitalario este en capacidad de reaccionar ante un aumento de casos”.

Con esa base reiteró que con los pocos datos que se tiene, la conclusión es que Ecuador no ha controlado la epidemia.