Reglas para la quema del año viejo en Guayaquil

Reglas para la quema del año viejo en Guayaquil

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Quienes incumplan las normas serán sancionados.

La confección y quema de los monigotes o años viejos -elaborados en cartón. Papel periódico o aserrín- es una de las tradiciones más arraigadas entre los ecuatorianos para despedir el año que termina.

La tradición indica que antes de la quema del monigote será castigado. O apaleado para que con él se vayan todas las cosas malas que sucedieron en los pasados 365 días. Esta es una situación curiosa. Pues en la antigua Roma cada fin de año las familias se reunían en grandes banquetes y se quemaban muñecos que simbolizaban el odio, la envidia y pobreza.

El rito se extendió a todos los territorios conquistados por el Imperio Romano. Entre ellos España que con la llegada del cristianismo cambió la tradición a algo más religioso. Hasta convertirse en una ceremonia donde se despedía el año pidiendo a Dios un nuevo año de prosperidad.

Además

Para el siglo XVI los españoles llevaron la tradición a América. Entonces se celebraba el rito de la quema del judío, simbolizado por un grotesco muñeco, considerado por los cristianos como culpable de la crucifixión de Jesucristo.

A Guayaquil, en específico, la tradición de la quema del muñeco llegó durante la epidemia de fiebre amarilla que azotó al Puerto Principal en 1842. En ese entonces para evitar la propagación del virus se hacían atados con la ropa del difunto y se los quemaba en la calle. Con el pasar del tiempo empezó la quema de monigotes hechos de paja y aserrín el 31 de diciembre.

En la actualidad, Guayaquil es el epicentro nacional de estos monigotes, donde desde muchos meses antes de diciembre se empiezan a confeccionar los años viejos, que incluso son llevados a otras ciudades. Además, en los barrios se crean los gigantes de papel, que ahora por seguridad, ya no necesariamente son quemados, sino que son destruidos en los primeros días de enero.

Además

Si bien en décadas pasadas la ciudadanía quemaba los monigotes incluso en icónicas avenidas, como el caso de la 9 de Octubre, en el centro de la ciudad, hoy eso ya no es posible, debido a que las autoridades han emitido reglas para preservar los bienes públicos, como los adoquines o asfalto.

Desde 2002 rige una ordenanza que prohíbe la quema de los años viejos en cualquiera de las áreas regeneradas debido al daño que podían causar.

La norma, que sigue vigente, prohíbe quemar los monigotes:

  • En las calles y avenidas asfaltadas (pavimento asfáltico de color negro). No se podrá realizar la quema en la calzada por los daños que el fuego ocasiona en el asfalto.
  • En cualquiera de las áreas que han sido sometidas a la regeneración urbana (adoquinadas o ajardinadas).por el daño irreparable que el fuego ocasionaría sobre la obra.
  • Tampoco se puede quemar en el carril exclusivo de la Metrovía.

Los espacios donde se podrán quemar los monigotes son: calles o avenidas pavimentadas con hormigón (cemento de color gris) o que sean solamente rellenadas (cascajo), veredas y en solares no edificados.

Quienes incumplan las normas serán sancionados de acuerdo al art. 427 del Código Orgánico de Organización Territorial, Autonomía y Descentralización, “referente al uso indebido, destrucción o sustracción de cualquier clase de bienes de propiedad de los gobiernos autónomos descentralizados por parte de terceros, serán sancionados por el funcionario que ejerza esta facultad, de conformidad a lo previsto en la normativa respectiva, sin que esto obste el pago de los daños y perjuicios o la acción penal correspondiente”.

Además

De los daños sobre las vías asfaltadas y sectores urbanamente regeneradas, se responsabilizará al dueño o arrendatario del predio más cercano donde se produzca la quema que ocasione daños.

Para evitar la posible infracción, los propietarios deben llamar a la Corporación de Seguridad Ciudadana de Guayaquil (CSCG), al teléfono (04) 2598001 ext. 1417, para deslindar responsabilidades.