ONU exige a países procesar a quienes intenten unirse a grupos terroristas
El Consejo de Seguridad de la ONU aprobó hoy por unanimidad una resolución vinculante que exige a los países de todo el mundo adoptar leyes para procesar a los ciudadanos que viajen al extranjero para participar en «actos terroristas», como los miles de personas que se han unido al Estado Islámico (EI).
En una sesión presidida por el mandatario estadounidense, Barack Obama, el Consejo de Seguridad se mostró unido respecto a la necesidad de contener el flujo de individuos que se unen a grupos yihadistas, algo que preocupa especialmente a Occidente por el riesgo de que regresen a su país y lancen ataques en su territorio.
«Esta resolución fortalecerá la cooperación entre las naciones, incluido el compartir más información sobre los viajes y las actividades de los combatientes terroristas extranjeros», dijo Obama, cuyo Gobierno impulsó la resolución.
El texto, respaldado por 104 países, sostiene que todos los países deben asegurar que sus leyes criminalizan y castigan a todos sus ciudadanos que «viajen o traten de viajar a un Estado» con el «objetivo de perpetrar, planear, preparar o participar en actos terroristas, o para proveer o recibir entrenamiento terrorista».
Según datos de EE.UU., más de 15.000 ciudadanos de más de 80 países han viajado en los últimos años a Siria para unirse a grupos yihadistas como el EI o el Frente Al Nusra, entre ellos alrededor de 2.000 europeos y 100 estadounidenses.
La resolución, con el número 2178, exige a los Estados miembros negar la entrada a cualquier persona sobre la que tengan «razones razonables» para creer que puedan apoyar o participar en actividades relacionadas con el terrorismo, y perseguir a quienes faciliten financiación de los programas de reclutamiento de esos grupos.
El secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, urgió a potenciar la inclusión social para evitar la radicalización de los jóvenes que acaban uniéndose a grupos extremistas.
«Puede que los misiles maten a los terroristas, pero la buena gobernanza mata el terrorismo», afirmó Ban.
Obama, por su parte, urgió a los países a traducir la resolución en «acciones», una implementación que, según numerosos expertos, será complicada debido en parte a las variaciones en cada país a la hora de definir qué es un «combatiente extranjero».
«Las resoluciones por sí solas no serán suficientes. Las promesas sobre el papel no nos mantendrán seguros», señaló el mandatario.
«Estas palabras deben traducirse en acciones no solo en los próximos días, sino años. Si ha habido un reto que no pueda enfrentar un país por sí solo es este», añadió.
El primer ministro británico, David Cameron, llamó por su parte a «derrotar la venenosa ideología del extremismo» y a «proporcionar una alternativa para los jóvenes» para que no se radicalicen.
El presidente de Francia, François Hollande, defendió que «contra la barbarie, la fuerza no es sólo necesaria, sino que es legítima», y aseguró que hay 1.000 ciudadanos o residentes de Francia combatiendo en las filas de grupos extremistas en Siria e Irak.
España, por su parte, ha «identificado ya a más de 50 personas que han salido» del país para «integrarse en los grupos terroristas presentes en Siria e Irak», y teme que su nación pueda convertirse en un «punto de tránsito» para terroristas que viajen a la región, según dijo en la sesión Manuel Gómez Acebo, director general de política Exterior para el Mediterráneo, África y Oriente Próximo.
La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, ratificó en la sesión el compromiso de su Gobierno en la lucha contra el terrorismo, mientras que la de Argentina, Cristina Fernández, afirmó que esa tarea «cada vez se complica más» y dijo que posiblemente la forma en la que se ha venido combatiendo esa amenaza «no es la adecuada».
El texto de hoy mereció incluso el apoyo de Rusia y China, que han vetado en los últimos tres años la mayor parte de las resoluciones relacionadas con Siria en el Consejo de Seguridad.
No obstante, el ministro de Exteriores de Rusia, Sergéi Lavrov, pidió «prudencia ante la tentación de reducir las dimensiones del problema, porque el EI no es la única amenaza a la región».
Lavrov consideró que «el fracaso a la hora de resolver el problema de Palestina» y su reclamo de un Estado independiente es «uno de los problemas principales que han permitido a los grupos yihadistas reclutar más miembros».
Por su parte, el titular de Exteriores de China, Wang Yi, urgió a «detener el uso de las redes sociales para difundir materiales relacionados con el terrorismo» y «formular lo antes posible un código de consulta para el ciberespacio».
En la sesión de más de cuatro horas también intervino el primer ministro de Irak, Haidar Al Abadi, que advirtió que «derrotar al terrorismo en Irak es clave para derrotarlo en todo el mundo».