En tres o cuatro días la AMT terminará de colocar los diez fotorradares en distintos puntos de Quito, y durante este tiempo se verificará y se garantizara las óptimas condiciones de uso, y de esta manera, se cumplirá con las normativas de límites de velocidad, y además, intentar reducir los siniestros en las vías.

Según informaron los funcionarios de la AMT, la instalación de estos dispositivos empezó en la Ruta Viva, una importante vía que cruza de oriente a occidente y viceversa, y también, es utilizada por los quiteños para ir al aeropuerto.

Sobre estos dispositivos, el funcionario de la AMT, Mauricio Montúfar, manifestó que ayudan a la reducción de accidentes en las vías, ya que, gracias a estos aparatos los conductores se ven en la obligación de reducir la velocidad.

Por otro lado, una moradora de la zona de la Ruta Viva, María Bolaños, dijo que es necesario que se instalen los fotorradares en la vía, porque obliga a los conductores a reducir la velocidad, y de esta forma ya no se den más accidentes. (I)