Amantes de los guayacanes pernoctaron en Zapotillo para verlos florecer
La parroquia Mangahurco en el cantón Zapotillo, donde se concentra la mayor parte de árboles que florecen, tuvo gran afluencia de turistas locales y extranjeros el último fin de semana.
A propósito del florecimiento de los guayacanes, que ha de culminar entre el jueves y viernes de esta semana, miles de turistas han llegado a este evento que se ha constituido en el más esperado del 2020.
Ya sea a caballo o en bicicleta se pudo recorrer los valles donde poco a poco se incrementó el florecimiento, siendo este domingo el día de su máxima expresión.
Muchos visitantes amantes del florecimiento pernoctaron incluso en carpas por varios días. «Venimos de Ambato a ver esto que para nosotros es un milagro, es la segunda vez que venimos, pues la primera no avanzamos a ver en su totalidad. Es hermoso, no hay palabras para describir esta belleza», dijeron Fabián Mera y Paulina Valladares, una pareja de ambateños que llegaron a contemplar el espectáculo natural.
«El florecimiento del guayacán tiene un proceso, se espera que el día miércoles iniciará la caída de la flor, no la cortemos por favor, solo admiremos su belleza», recomienda Gladis Farfán, presidenta del GAD parroquial de Mangahurco.
En la parroquia Cazaderos la cantidad de turistas no fue menor. «Hemos sido beneficiados por la naturaleza, es un florecimiento al 100% en esta parroquia. Queremos que conozcan este sector y todos sus atractivos turísticos. Además, tenemos para ofrecer una gastronomía increíble como chivo al hueco, seco de gallina criolla, caldo de gallina, ceviche al estilo peruano muy solicitado por aquí», dijo Gladis Astudillo, presidenta del GAD de Cazaderos.
Sectores como Las Pampas fueron muy visitados, pues el florecimiento fue grande. «Es primera vez que estamos visitando acá este hermoso sitio, es encantador, al bajar nos sorprendió bastante, pues es un valle completamente florecido con un amarillo intenso que llama muchísimo la atención», indicó Iván Carmona, turista cuencano.
También en el sector Progreso, en plena línea de frontera, tuvo la afluencia del florecimiento en un hermoso valle en donde todos sus árboles se vistieron de amarillo. «Asombrarnos de las maravillas de nuestro creador, este florecimiento del guayacán yo nunca he visto y es primera vez que estoy por acá», comentó Ingrid Arias, turista quiteña.
Otro de los lugares preferidos para la observación fue un mirador que se ubica a la entrada de Cazaderos a cuya cumbre, se hace al menos 10 minutos caminando y de donde se observa la gran extensión del bosque florecido, que abarca tierras de Ecuador y del vecino Perú.
Otros aprovecharon para bajar a los valles y realizar sesiones de fotos personales y en grupo familiar.
Los habitantes de estos sectores esperan a los visitantes hasta el fin de semana. (I)
