Disminución de los indicadores epidemiológicos no es la esperada: secretaria de Salud

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La libre circulación entre semana no permitió que se reduzcan los contagios con mayor velocidad, sostiene.

Punto Noticias. Las medidas de restricción, tanto en la movilidad de las personas como de los vehículos, durante el estado de excepción y confinamiento, provocaron una disminución de los indicadores negativos de la situación epidemiológica, según la secretaria de Salud del Distrito Metropolitano de Quito, Ximena Abarca.

La funcionaria señaló que, particularmente en los fines de semana, hubo la reducción de fiestas clandestinas, encuentros deportivos y número de libadores.

Advierte, que, pese a estas cifras, preocupa que la velocidad de disminución de los casos positivos de COVID-19 no haya sido la esperada, debido a la libre circulación entre semana.

Insistió en que hubo un decrecimiento del número de personas en lista de espera, en las unidades de cuidados intensivos (UCI), pero no fue la anhelada. Cuando iniciaron las medidas de restricción, había 160 personas en lista de espera para camas UCI; actualmente hay 125. Antes, para una cama general, había en lista de espera 57 personas; hoy hay 23, indicó.

A criterio de Abarca, otra de las razones para que la situación no haya mejorado de manera ostensible es la circulación de las nuevas variantes del coronavirus, que afectan más a jóvenes, tienen una mayor velocidad de contagio y parecieran afectar de manera más grave. Por este motivo hay un gran número de personas que necesitan camas UCI.

Sin el estado de excepción y confinamiento, la secretaria de Salud comentó que hay medidas que deben tomar los ciudadanos y las autoridades, en este caso de Quito. A nivel del Municipio, se volvió a la restricción vehicular; está prohibido el funcionamiento de bares, discotecas, gimnasios.

Recomendó a la ciudadanía evitar, a toda costa, las reuniones familiares, para evitar que vuelvan los picos importantes de contagio; mantener la disciplina que permita que una sola persona salga a realizar gestiones, compras, etc. y el resto de personas permanezca en casa. De esta manera se podrá identificar, en caso de contagio, quién es la persona que podría transmitir el virus.

Abarca sugiere que dos-tres familias deleguen a una sola persona para que realice estas actividades fuera de la casa, lo que permitiría bajar mucho más rápido el número de contagios.

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