La ley determina que deben estar presentes en la sesión de instalación, pero el toque de queda complica la movilización de los asambleístas electos.

Punto Noticias. Los legisladores que dirigirán la nueva Asamblea Nacional tendrán que repensar la forma en que se instalará el nuevo periodo legislativo, debido al confinamiento parcial decretado por el Presidente de la Republica, desde este viernes 23 de abril al 20 de mayo próximo.

El COE Nacional deberá definir si hay las condiciones adecuadas para que el próximo Parlamento Nacional se reúna de manera presencial, el 14 de mayo. Los asambleístas esperan un informe del organismo sobre las medidas que pueden adoptar.

De acuerdo con el artículo 10 de la Ley Orgánica de la Función Legislativa, la instalación de la sesión del nuevo periodo legislativo se realizará el viernes 14 de mayo próximo, a las 10:00, para designar a las principales autoridades del Legislativo: presidente, dos vicepresidentes, cuatro miembros del Consejo de la Administración Legislativa (CAL), un secretario y un prosecretario.

El artículo 11 de la misma ley señala que, en esa sesión, una comisión especial integrada por cinco legisladores “verificará las credenciales y constatará la identidad de los asambleístas electos presentes”. Esa disposición obliga a que la primera sesión del nuevo periodo sea presencial, advierten las autoridades de la nueva Asamblea.

Actualmente, el salón del Pleno está adecuado, con la colocación de láminas acrílicas en cada cubículo, como medidas de bioseguridad frente a la pandemia del coronavirus, COVID-19.

El Decreto Ejecutivo 1291 determinan un confinamiento en 16 provincias del país, con el objetivo de frenar la propagación del coronavirus, donde se aplicará una restricción de movilidad absoluta en la cual el toque de queda será ininterrumpido e iniciaría los viernes, desde las 20:00, y finalizará a las 05:00 del lunes siguiente.

El artículo 12 del decreto determina que se garantizará el desarrollo de todos los procesos de transición y de posesión de nuevas autoridades, determinados en la legislación vigente, y se dispone al COE Nacional la determinación e implementación de las medidas necesarias para esos fines. A pesar de esto, lo que está en discusión son las dificultades de movilización que tendrían los nuevos asambleístas y su personal de apoyo, el viernes, y dependerá del tiempo que dure la sesión del Pleno para su retorno.

Pierina Correa, que de acuerdo con la normativa será la directora de la sesión de instalación, anticipó que serán respetuosos de las medidas que diseñe el COE Nacional. Si bien la Ley señala que la primera sesión de la Asamblea debe ser presencial, “el COVID-19 nos ha enseñado que una cosa es lo que queremos hacer y otra lo que se puede hacer. La salud del pueblo ecuatoriano está por encima de todo y en función de eso se irán tomando las decisiones que correspondan”, señaló.

Para Wilma Andrade, quien actuará como secretaria ad hoc, por las medidas de bioseguridad que deben tomar en cuenta todos los ecuatorianos, la sesión del 14 de mayo debería ser combinada, porque la ley señala que debe ser presencial; por lo tanto, pueden estar presentes las autoridades de esa sesión y una parte de los asambleístas. El problema es determinar el número y los nombres de los legisladores que estarían autorizados a ingresar al Pleno, tomando en cuenta que la mayoría aspira participar en la primera sesión.

La movilización de los asambleístas desde las provincias podría solventarse con una autorización o salvoconductos del COE; pero, sin duda, la instalación de la sesión debe producirse el día que determina la Constitución, advirtió.

A criterio del legislador reelecto César Rohón, del PSC, la norma señala que una nueva Asamblea debe instalarse en Quito, presencialmente, el 14 de mayo, para elegir dignidades; por lo tanto, todos los asambleístas deben estar físicamente como lo manda la Constitución y la ley que rige a la Función Legislativa.

Fuente: El Universo.