Cómo ir a comprar sostenes con tu padre
Cómo ir a comprar sostenes con tu padre
Cómo ir a comprar sostenes con tu padre. ¿Acabas de revisar tu armario y te diste cuenta de que tu sostén ya no te queda, o que necesitas comprar tu primer sostén? Ni tu mamá ni tu mejor amiga pueden acompañarte.
1. Recuerda que un sostén no es algo tan terrible. La mayoría de las mujeres los usan y la mayoría de los padres lo saben (aunque a algunos les sorprende ver que su pequeña niña está creciendo).
2. Aprovecha de comprar algo más. ¿Necesitas calcetines nuevos? Genial, así tendrás una excusa perfecta y menos vergonzosa para entrar a una tienda.
3. Haz algo más durante el viaje. No te quedes sentada en el auto avergonzada y en silencio. Enciende la radio y sintoniza una estación con música que les guste a ti y a tu padre.
4. Pregúntale a tu padre si puede darte el dinero para ir tú misma a comprar lo que necesitas. Es la forma más fácil de enfrentar esta situación.
5. Acepta que será un momento incómodo y solo hazlo lo más pronto posible.
6. Escoge algo sencillo. En vez de comprar un sostén con encaje rosado y detalles sensuales, escoge un sostén deportivo blanco.
7. Lleva tus compras en una bolsa en el asiento trasero del auto o en el maletero. La parte incómoda ya terminó, relájate.
Consejos
- Mantén una actitud madura y recatada. Es solo un poco de tela cosida para dar soporte al pecho ¡gran cosa!
- No es necesario que vayas a Victoria’s Secret a comprar ropa interior.
- Puedes comprar tu sostén mientras tu padre visita la sección de artículos electrónicos.
- Conoce tu talla de sostén antes de ir de compras para ahorrar tiempo.
- Pídele ayuda a una vendedora, especialmente si no conoces tu talla de sostén.
- Considera que quizás no necesites un sostén.
Advertencias
- No te preocupes tanto. Si necesitas un sostén, lo necesitas. No hay nada malo en ello.
- Los sostenes de entrenamiento no son funcionales. Pueden tener un impacto negativo en la imagen corporal de las niñas, además de fomentar la precocidad sexual.
- Los sostenes provocan que las niñas piensen en sus senos como objetos sexuales. Las culturas occidentales modernas dan un carácter sexual a los senos de las mujeres. En realidad, ninguna mujer necesita usar sostén.
