Investigan la presencia de un niño italiano en el Estado Islámico

Las fuerzas del orden italianas investigan si un niño de 3 años, que fue secuestrado por su padre hace un año, está con los yihadistas del Estado Islámico (EI), después de haber sido reconocido por la madre en unas fotografías.

Según los medios de comunicación, son los Carabineros antiterrorismo de Padova quienes investigan fotografías mostradas el jueves por un programa televisivo y en las que se ve a un niño junto a miembros del EI. La madre, Linda Solano Herrera, cubana y residente desde hace 10 años en la provincia de Belluno (norte de Italia), denunció en noviembre de 2013 que su exmarido Ismar Mesinovic, de origen bosnio, había secuestrado a su hijo Ismail y había viajado a Siria para unirse a los yihadistas.

Posteriormente, explica la mujer, familiares en Bosnia de su marido lE informaron con algunos mensajes de texto que éste había muerto en combate, pero que el niño estaba bien.

Sobre el caso se interesó el programa AnnoUno, del canal de televisión italiano La7, que mostró dos fotografías encontradas en páginas de Internet vinculadas al Estado Islámico y en las que se veía a un niño que podría ser Ismail. “A mi me parece que es él. El corazón de una madre nunca se equivoca”, explicó la madre del pequeño en entrevistas que publican este lunes los diarios La Repubblica y Corriere della Sera.

Una de las fotos muestra a un niño vestido de miliciano con una metralleta de juguete y de la mano del que parece un soldado del EI, mientras que en la otra se ve al pequeño con un suéter negro y una venda con el símbolo de los combatientes yihadistas subido a una moto con, según los investigadores, Said Colic, un veterano bosnio que lucha en el conflicto en Siria.

La madre de Ismail explicó en las entrevistas que como hacía habitualmente había dejado a su hijo con su exmarido para que fuera a ver a sus familiares. Solano Herrera agregó que siempre que había dejado a su hijo había vuelto sin inconvenientes y que nada le hacía temer que el marido pudiera secuestrarlo o unirse al Estado Islámico, pues aunque era religioso e iba al centro islámico dos veces a la semana “no era un fanático”.

Los medios de comunicación afirman que los investigadores destacaron que existen muchos puntos de parecidos entre las fotografías que proporcionó la mujer de su hijo y las que hay en Internet.