Movimiento Alianza PAIS enfrenta una segunda ola de desafiliaciones de asambleístas

Quito –

Hasta ayer, seis asambleístas de Alianza PAIS presentaron sus solicitudes de desafiliación del movimiento político que llevó a Lenín Moreno a la Presidencia de la República.

Las motivaciones apuntan a problemas de descoordinación entre el bloque, la dirigencia del movimiento y el Gobierno; y que el Ejecutivo no toma en cuenta los criterios del bloque antes de tomar decisiones, como ocurrió con integración de la terna para elegir al vicepresidente de la República.

En la lista constan Elizabeth Cabezas, Johanna Cedeño, Lenin Plaza, Fausto Terán, Karina Arteaga y Rafael Quijije. Meses atrás hizo lo mismo María José Carrión. Algunos han señalado que se van del movimiento político, pero permanecerán como aliados en el bloque apoyando a César Litardo, presidente el Legislativo.

Con estas bajas, AP pasa de 38 a 30 legisladores, pues Pinuccia Colamarco, que remplazó a Daniel Mendoza, procesado por presunta corrupción, no vota con el oficialismo.

Según Plaza hay un divorcio entre el movimiento y el Gobierno, y en medio del desorden no se puede continuar perteneciendo a una organización política. Lo que sí haremos, anotó, es seguir apoyando al bloque en lo que se pueda. Que los problemas venían acumulándose, pues una cosa se acordaba y el Ejecutivo se terminaba haciendo otra, y la integración de la terna para elegir vicepresidente de la República fue “la gota que derramó el vaso”.

A esto se suma la renuncia días atrás de Ximena Peña a la coordinación del bloque, por no estar de acuerdo en la integración de la terna para elegir al vicepresidente de la República.

La legisladora comentó que desde el movimiento se han realizado algunos llamados de atención y recomendaciones al régimen desde hace mucho tiempo, pero no hay respuesta y frente a ello algunos asambleístas tomaron la decisión de salirse de la agrupación.

Aclaró que ella aún no ha tomado esa decisión, pero “si no hay los correctivos hasta yo estaría considerando salirme del movimiento”.

Uno de los problemas constantes es la falta de consulta a los asambleístas del bloque sobre las decisiones del Ejecutivo, pues “resulta que se toman decisiones con CREO, y luego ellos dicen que no son parte del Gobierno, y el golpe lo cogemos nosotros, sin que nuestro criterio se plasme, la verdad estamos cansados con esa situación”, concluyó.

Aparte, dijo Peña, hay gente en el movimiento que no quiere ejercer su rol, y si no quiere ser presidente del movimiento que renuncie o elijamos a uno nuevo; por lo tanto, son “molestias acumuladas, o se corrige o nos vamos, así está el tema”.

Aunque diferenció que en el grupo de los que abandonan AP también hay gente que tiene interés en apostar por una reelección. (I)