Gustavo Alfaro, seleccionador nacional, compareció a rueda de prensa este viernes al final de la derrota contra Brasil, y si bien fue cauto, si enfatizó en que el árbitro y el VAR sancionaron jugadas similares con diferente vara.

Tranquilo como de costumbre y sin descomponerse, Gustavo Alfaro aseguró que se va con un gusto amargo del partido, ya que estuvieron a pocos minutos de cumplir con todo el plan que tenían contra Brasil.

La ausencia de Moisés Caicedo. “Se quedó porque venía con una lesión desde Inglaterra y porque estaba con tarjeta amarilla. Analizamos que Brasil era un desafío y Perú una necesidad, así que lo decidimos. Me voy conforme con Sebastián Méndez y Alan Franco. Quiero tener a Moisés desde el minuto cero el martes”.

Valoró el trabajo de Preciado. “Muy conforme con el rendimiento del equipo, no con nada en particular, pero Ayrton cumplió con lo que tenía que hacer. Nos faltó tener una cierta combinación porque nosotros trabajamos en cerrar los circuitos de Brasil, y a ratos no pudimos explotar la velocidad de Ayrton o la de Ángel. Después sintió fatiga por el desgaste del ida y vuelta. Nuestra idea era tener a Brasil lo más lejos posible, y para eso necesitábamos desdobles físicos”.

Cosas que criticar de la justicia. “Jugaron un partido muy aplicado, tanto así que Brasil no encontró los caminos para quebrarnos. Vi la jugada recién y Fred debía quedarse con un hombre menos si se sanciona con la misma dureza que con Énner Valencia. Perdimos una pelota en la salida y encajamos el gol, pero estoy muy tranquilo y se los he dicho a los jugadores. Vi la jugada del penal y es absolutamente discutible, la rechaza Ángelo Preciado, igual con la repetición del penal, creo que Alexander tenía su talón sobre la raya. En el fútbol se habla por resultados, pero hubo circunstancias que dispararon el partido”.

Brasil debió recibir una tarjeta roja. “La diferencia, lamentablemente, es muy sutil. En la jugada de Fred el VAR pudo revisarlo, si ustedes ven el cambio era otro y eso es una demostración de que algo había pasado. Yo pregunté y lo revisaron, pero no usaron el mismo concepto que en la amarilla de Énner Valencia. Es muy sutil la diferencia entre la justicia y no. Repito, el penal es absolutamente discutible”.

Finalmente, la que era su planificación. “Eran 74 minutos cuando vino el gol. Lo hablé con Fabinho y me decía que ellos no tienen la culpa, y así es, Brasil no tiene la culpa, pero las dos jugadas se sancionaron diferente. Estábamos sacando adelante un partido muy complejo. Si van a las estadísticas de Tite, Brasil sólo empató dos partidos y Ecuador se encaminaba a conseguir romper la historia, a los 30 minutos tenía los cambios listos, sabiendo que ellos los iban a hacer también. Estas circunstancias dispararon el partido a otro lugar. Los jugadores de Brasil me dijeron de lo buen equipo que es Ecuador, y ellos no son candidatos, son los mejores. Me queda un gusto amargo”.

Fuente: futbolecuador.com

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