Solidaridad quiteña se abre paso para combatir el pico por covid-19

Guayaquil –

En Quito, los casos confirmados de personas fallecidas por covid-19 llegan a 600, y una cifra similar se estima de muertos probables. Hasta esta semana, según las cifras oficiales, pero no totales, se han recogido 148 cadáveres fuera de los hospitales, entre ellos 15 en la vía pública, 116 en domicilios y 13 en ancianatos.

El ministerio de Salud Pública, que analiza la información estadística de la epidemia, no conoce cuándo los casos, que van en ascenso, podrían empezar a disminuir. Sin embargo, mientras el coronavirus está en su pico, en Quito las muestras de solidaridad crecen y dan apoyo en los barrios más necesitados.

Desde mascarillas hasta kits alimenticios, bonos o computadoras reciben las familias de escasos recursos de parte fundaciones, organizaciones, iniciativas ciudadanas o incluso jóvenes que se han unido para combatir el virus y compartir esperanza.

Fundación dio 150 mascarillas en el Trolebús

Equipado con un traje impermeable, mascarilla y gafas antifluidos, Edwin Gavilánez tomó un megáfono y se subió esta semana a las unidades del corredor sur oriental del Trolebús. «Quito, nos estamos confiando y está habiendo mucha mortalidad y contagios en el sur», repetía dentro de los buses en los que obsequió 150 mascarillas a los usuarios de escasos recursos o familiares de personas con discapacidad.

Gavilánez preside la Fundación para la Vida Ariel Chicho Gavilánez, una organización que ayuda a pacientes afectados por la distrofia muscular de Duchenne, una enfermedad rara que también padece su hijo Ariel. Sin embargo, su vocación no se limita a su fundación. Hoy le preocupa la crítica situación que vive la capital y en especial la parroquia en la que vive, Chillogallo, que se encuentra entre las zonas denominadas ‘calientes’ por la gran cantidad de casos de coronavirus que se han registrado en las últimas semanas.

Edwin Gavilánez entregó mascarillas en las unidades de transporte, en Quito.

«Solo en Chillogallo hay 72 muertos, según las estadísticas del COE (Comité de Operaciones de Emergencias), pero hay muchas más. A diario vemos a personas que se desvanecen en las veredas, en los parques», comenta.

Chillogallo, según las cifras del COE, lidera las parroquias de Quito con más casos confirmados de Covid-19, con 840 infectados hasta el pasado 18 de julio y 54 fallecidos confirmados, no los totales. Una de las razones, cree Gavilánez, obedece a la falta de conciencia ciudadana en el uso de la mascarilla, el distanciamiento social y el adecuado lavado de manos.

«Están habiendo fiestas como usted no tiene idea, el contagio es grande», advierte mientras agradece el apoyo que recibe a diario con donaciones de más mascarillas, las que está recopilando para organizar una siguiente salida a las calles. «También de la panadería La Unión nos hicieron llegar pan y salimos a entregar, se entrega todo a las familias del pueblo quiteño», concluye. Para posibles donaciones, Gavilánez está disponible en el contacto 0992652528. (I)

Kits de alimentos para ‘vecinos’ de escasos recursos

Hace unas tres semanas, Adrián Cisneros y seis familiares hicieron la cuarta entrega de kits alimenticios para quiteños de escasos recursos a quienes él llama ‘vecinos’ y quienes por la epidemia del covid-19 no han podido salir a trabajar para conseguir el sustento diario.

«Cada kit contiene un producto cárnico (pollo, chancho, res), 5 libras de arroz, funda de fideos, lentejas, hortalizas, frutas, tomate riñón, papas», explica Cisneros y cuenta que se creó la iniciativa barrial Recrea Solidaridad, que él lidera, a inicios de abril, cuando se dieron cuenta de que tras la disposición de quedarse en casa muchos vecinos del sector El Recreo, barrio Media Luna, del sur de Quito, que vivían del trabajo diario no tenían cómo mantener a sus familias.

Una de las beneficiarias de los kits de alimentos que entrega Adrián Cisneros

A los beneficiarios, cuenta Cisneros, se los elige mediante un formulario en el que se determina las necesidades de cada familia, de tal forma que la ayuda llegue a los más necesitados, madres solteras, personas con discapacidad, con enfermedades del sistema inmunológico y que no reciben ayuda del gobierno.

«Hemos hecho un barrido, se han sumado personas recicladoras, que no comían en dos, tres días, a ellos se les toma como prioridad», contó este comunicador que trabaja como diseñador en una institución pública.

La ayuda, recalca, es permanente y cuenta con el apoyo de empresas como el restaurante Chulla Rock, que dona un porcentaje de sus ventas para esta causa; Tenka Productos EC, que aporta con hortalizas y frutas; y Fondo Solidario ‘Familia Unida’, que a través de la empresa Pronaca dona cárnicos.

En estos días, adelantó, ya se prepara la quinta entrega de los kits alimenticios. «Ya nos donaron 32 cárnicos, estamos reuniendo para comprar el resto de alimentos», dijo Cisneros. Para posibles donaciones pueden contactarlo al 0992763830. (I)

Bono de $120 se entregó a recicladores

Felipe Toledo asegura que no podía quedarse con los brazos cruzados al conocer la realidad que viven los recicladores. Si no trabajan a diario, no tienen qué comer, comenta Toledo, director de la fundación internacional Avina, la cual junto a Care Ecuador canalizaron los recursos, a través de la Iniciativa Regional de Reciclaje y un fideicomiso de la empresa privada del Ecuador, para entregar $120 a 1200 recicladores agremiados en el país.

La entrega, que se hizo a través de cajeros, fue complicada porque la mayoría no conocía este sistema. «Se llamó a todos para explicarles el paso a paso», cuenta Toledo, director del organismo, dedicado hace 15 años al desarrollo sostenible con programas, como reciclaje inclusivo.

Los recicladores de Tumbaco recibieron trajes de protección y tanques de fumigación.

Toledo también coordinó la entrega de alimentos, donados por empresas, para estas familias que considera desprotegidas: “No hay suficientes medidas de compensación del Gobierno. Es injusto, nadie les paga ni un dólar por el servicio que prestan a la ciudad, al ambiente…».

Con el bono y los alimentos, los recicladores se quedaron en casa los primeros meses. Y desde junio los están dotando con overoles, mascarillas, visores y guantes para que puedan trabajar. También, les entregaron tanques de fumigación para que desinfecten los desechos. Actualmente reciben donaciones de artículos de limpieza, alimentos y equipos de protección para estos trabajadores.

Quienes deseen colaborar con esta fundación pueden comunicarse al correo: [email protected]. (I)

Fundación gestionó 90 toneladas de ayuda

Al declararse la emergencia en el país, Wilson Merino decidió cerrar las actividades de su fundación Cecilia Rivadeneira, que hace 16 años trabaja en brindar oportunidades a las familias de niños con cáncer a través de programas educativos y emprendimientos, para recibir al personal de salud que no quería ir a sus casas para prevenir el contagio a sus familias.

Mientras los albergaban, Merino y otros voluntarios recaudaron 90 toneladas de productos, entre raciones alimenticias y equipos de protección, a través de donaciones de empresas, fundaciones y recursos propios. Miles de familias recibieron la ayuda en diferentes ciudades del país, dice Merino, director de la fundación, quien la semana pasada estuvo en Loja: «La pobreza es criminal, niños que no habían comido en varios días».

Wilson Merino, director de la fundación Cecilia Rivadeneira, entregó alimentos a los habitantes de San Francisco de Miravalle.

La fundación también aloja a diez niños con cáncer, junto a sus madres, para que reciban la quimioterapia en un hospital público. Un espacio de la fundación se está acondicionando para crear un centro ambulatorio. Los médicos del hospital acudirán a darles el tratamiento, como parte de un convenio.

Este centro lo idearon, afirma, luego de conocer que niños con cáncer murieron durante la pandemia: «Niños de zonas rurales, de provincias amazónicas, no pudieron llegar a Quito a recibir los tratamientos”.

Para realizar donaciones pueden llamar al número 0989072968. (I)

Computadoras se reciclan para niños

A dos meses de que se inicie el ciclo escolar en la región Sierra, Ximena Cabezas, su esposo Carlos Díaz y tres amigos más lanzaron una campaña para reciclar computadoras y laptos que sirvan, tengan fallas y hasta que estén dañadas para repararlas y entregarlas a niños de una escuela de escasos recursos que no tienen estos equipos para recibir clases virtuales.

Redigeo y la organización Quid Ecuador se unieron para recopilar los aparatos tecnológicos. Al momento llevan entre 40 y 45 computadoras, pero solo 20 funcionan. Algunas están en proceso de recolección y otras están siendo reparadas. Las que no sirven, explica la activista, serán entregadas a una empresa que recibe este tipo de desechos para que le den el tratamiento especial para cerrar el ciclo.

Ximena Cabezas, directora de la fundación Redigeo, recepta donación de computadoras para niños de escasos recursos.

Cabezas cree que «Quito está muy normal”, pese a mantenerse en un pico elevado de contagios. “A pesar de todo, la gente está afuera, en los cafés, los carros en las calles; no dista mucho de un día normal», dice la directora de Redigeo, constituida hace un año y enfocada en temas ambientales.

Al inicio de la pandemia gestionó la donación mascarillas, guantes y visores para recicladores agremiados de Quito y Mejía. En redes sociales también recaudaron $ 1000 para trajes de protección que se dieron a reciladores informales.

Las donaciones se receptan a través de la página web www.redigeo.org. (I)