En la iglesia Estanque de Siloe no había rezos, había gritos de histeria. No había paz, todo adentro era adrenalina pura. No se daban diezmos, se apostaban cientos y miles de dólares. No había cura espiritual, había sangre y muerte. La iglesia, en realidad, era un local clandestino de gallos de pelea.

Luego de un exhaustivo seguimiento, la policía logró desarticular este centro ilegal de peleas de gallos, el pasado domingo 23 de junio.

En el local, ubicado en Florencio Varela, ubicado en Buenos Aires, Argentina, un hombre de 57 años, de nacionalidad boliviana, fue arrestado por las autoridades locales cuando se descubrió que el aprehendido realizaba las riñas entre los animales. Además, del local fueron incautados 42 gallos que se encontraban en alrededor de 20 jaulas.

En la entrada se puede apreciar el nombre de la iglesia, Estanque de Siloe. Una vez que las autoridades ingresaron al lugar, identificaron que varias personas realizaban apuestas clandestinas alrededor de un ring de pelea de las aves. Por tal motivo, se puso a disposición de la justicia todos los presentes, para determinar si existe alguna responsabilidad en este ilegal acto.

Por otra parte, los animales que fueron rescatados serán entregados al área de bromatología (ciencia de los alimentos) del Municipio de Florencio Varela, en donde se resguardará y custodiará a los gallos.

El caso fue identificado como ‘Infracción al Artículo 301 bis del Código Penal: Organización y apuestas clandestinas e infracción a la Ley 14.346’ (Maltrato animal – Riña de gallos). Previo a la aprehensión, los investigadores habían obtenido material audiovisual que consiguieron con cámaras ocultas.