Delincuencia usa receptores de señal para abrir y robar carros en Guayaquil

El robo de vehículos no para en Guayaquil, a pesar de que la Policía Judicial (PJ) a diario reporta la recuperación de automotores sustraídos.

La cifra de autos robados sigue siendo alta. En 2018, 1608 carros fueron reportados como robados. De estos se recuperaron 363. En 2019 se robaron 2182 y se recuperaron 509, según datos de la PJ.

Pero además de las desalentadoras estadísticas, la implementación de nuevas modalidades de robo preocupa a los ciudadanos. Ahora, las puertas de los carros ya no son forzadas, se observa en varios videos.

Esto porque a través del uso de dispositivos electrónicos es posible desactivar las alarmas y llevarse un carro en pocos segundos. Así ocurrió la primera semana de este año en Urdesa, en el norte. Y se repitió en Sauces, también en el norte, y luego en el sur de Guayaquil.

Este tipo de robos también suele darse en parqueaderos de centros comerciales, ya que al existir gran cantidad de vehículos de distintos modelos y marcas, los delincuentes tienen más posibilidades, afirma Jairo Gómez, gerente de MultiJairos, en cuyo local se instalan alarmas y dispositivos de rastreo.

Ladrones buscan un receptor de señal para buscar un carro compatible y abrirlo. Foto: Jorge Peñafiel.

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Él explica que las alarmas de los carros funcionan en una frecuencia y que los delincuentes usan un receptor de señal. Así, si la señal de algunos carros es compatible, se abren. Por ello, las alarmas son seguras solo en un 80 %, sostiene.

Gómez agrega que la mayoría de las alarmas en Ecuador funcionan en una frecuencia. Él asegura que importa otra frecuencia que se puede instalar hasta en carros más antiguos. Esta es más difícil de que descubran los ladrones y cuesta $140 (incluido el servicio de instalación), menciona.

Los dispositivos de rastreo son otra opción que gana más demanda en el mercado local. También cuestan $140. Se debe comprar un chip y se adquiere un plan básico de $10. Hay también otros planes y tarifas.

En el mercado hay dispositivos de rastreo desde $140, como medida de seguridad. Foto: Jorge Peñafiel.

“Es como tener un celular pegado al carro que siempre está transmitiendo la ubicación y que se puede revisar en el celular”, explica Gómez.

La instalación de este tipo de GPS, del tamaño de una tarjeta de crédito, se hace en distintas partes de la carrocería para evitar que los delincuentes lo puedan retirar, dicen expertos.

Wilson Galarza, gerente de Autolasa, asegura que esos dispositivos son similares a un celular, pero que conforme avanza la tecnología, la delincuencia también se actualiza.

Él dice que duplicar los dispositivos de bloqueo de marcas como Chevrolet es muy difícil, puesto que los carros vienen de fábrica con un código de seguridad. Cuenta que cuando se compra un carro, le entregan al cliente dos llaves, pero si este quiere una tercera, hay que contactar a la fábrica, afirma.

Autolasa revisa una tarjeta, que tiene un código, para activar el rastreo de cada carro. Foto: Jorge Peñafiel

Galarza admite que existen distorsionadores de celulares, que se pueden usar para anular el GPS (en caso de dispositivo de rastreo) y la señal. Esto da tiempo al delincuente para llevarse el carro y quitarle sus partes o deshuesarlo como se conoce popularmente. Por eso recomienda asegurar el vehículo y contratar el servicio de rastreo en un lugar seguro. Explica que los dispositivos ChevyStar emiten señal hasta 48 horas después de ser desconectados.

El dispositivo cuesta el primer año $529 (equipo e instalación) y la renovación (segundo año) $299.

El comandante de Policía de la Zona 8, Víctor Araus, dice que se investiga la posibilidad de que de las concesionarias se filtre información valiosa que vulnere las alarmas. (I)