La revolución de los contratos: “No hace falta tener agente para conseguir una gran operación”

El pasado 7 de abril, una estrella mundial como Kevin de Bruyne renovó con el Manchester City de la mano de su padre, un abogado y dos analistas. Ni rastro de representantes. Una medida antinatural dentro de un mundo del fútbol plagado de agentes desde hace 40 años. De Bruyne pudo mostrarle al City, a través de los datos recopilados, su valor perdurable como jugador más influyente.

Otros jugadores como Raheem Sterling o Joshua Kimmich se han sumado a este ‘modus operandi’ de trabajar sin representante, lo que podría abrir un nuevo panorama que limite el papel de los intermediarios. Aunque no tanto el de los agentes, que siguen ejerciendo una labor global que en muchos casos no sólo se limitan a la gestión de los contratos deportivos sino también en todo lo que afecta a nivel personal.

“Que decidan no tener agente a veces es por la confianza y seguridad que tienen en ellos mismos y en su entorno, pero en otras ocasiones es por el miedo a que su valor no sea bien representado”, señala la psicóloga deportiva Lorena Cos, acostumbrada a trabajar con futbolistas.

En esa línea, la de la confianza, se movía Míchel González: “Entiendo lo de De Bruyne. En mi época fue cuando arrancó todo. A Butragueño, por ejemplo, comenzó a llevarse su hermano. Pero yo pensé que no me hacía falta porque tenía muy claro que quería seguir en el Real Madrid y para eso no hacía falta un representante. Lo hablaba con el presidente y se negociaba”.

El linkedin del fútbol

En un mundo del fútbol cada vez más complejo, para ayudar en esa labor contractual ha nacido Player Lens, empresa que ha unificado el mercado de fichajes del fútbol. Mediante una única plataforma se ofrece un ‘marketplace’ digital a equipos, jugadores e intermediarios. “La plataforma tiene más de 600 equipos y cientos de intermediarios distribuidos por todo el mundo. Tenemos acuerdos con ligas y federaciones”, avanza José Ramón Capdevila, quien trabajó una década en el Real Madrid y ahora ejerce como director de Player Lens junto a Lee Hemmings

Los clubes pueden poner los jugadores como disponibles en la plataforma digital, una vez visualizados por los otros equipos de acuerdo a sus necesidades pueden establecer una conversación privada a través del chat de la plataforma cuando estés interesados.

Los intermediarios también pueden mostrar los jugadores que representan en la plataforma una vez se ha comprobado la identidad del agente con el fin de aportar transparencia y eficiencia en el mercado de traspasos. Al mismo tiempo, equipos e intermediarios tienen acceso a la demanda global de jugadores de todos los equipos de la plataforma y pueden establecer conversaciones directamente en la app con el fin de proponer jugadores a dichos clubes.

Al principio, los agentes se pensaban que la app venía a suplantar su rol en el mercado, pero cuando se les explicó lo que hacíamos comprendieron que el agente es la persona que esta en contacto con los clubes interesados a través del chat de la plataforma y pueden tener un mayor número de opciones para los jugadores que representan. Cuando lo entienden se dan cuenta de que es una herramienta que les puede aportar nuevas ofertas por sus futbolistas”, explica Capdevila. “La última ventana de traspasos hubo más de 1.500 opciones de jugadores por posición disponibles en la plataforma”, añade sobre una tecnología que trabaja cruzando información con Wyscout y TransferLab.

De Bruyne, cuya relación con su anterior agente Patrick De Koster podría estar fundamentada en que fue arrestado por fraude y blanqueo de dinero, consiguió firmar incluso sin agente. TransferLab, que fue la herramienta con la que De Bruyne logró una suculenta renovación, proporciona análisis de Big Data para evaluar a jugadores mediante algoritmos, los cuales recompensan o penalizan cada acción del jugador dentro del campo en función de su efecto sobre la probabilidad de que el equipo marque o conceda un gol sea esta acción una entrada en el centro del campo o un tiro de penalti. A posteriori, se le aplica un valor a cada métrica del jugador, calculando su contribución a los Goles Esperados (xG) del equipo, tanto a favor como en contra con un alto poder predictivo a nivel de equipo y del futbolista.

Las operaciones a través de Analitycs FC se hacen gracias a su TransferLab. “Hemos desarrollado un producto de análisis de datos líder en el mundo. Recientemente hemos sido los primeros en construir una plataforma dedicada al fútbol femenino y también mostramos el poder de nuestros algoritmos y experiencia en datos a través de proyectos personalizados como el ejercicio realizado para De Bruyne para ayudar en la negociación de su nuevo contrato en el City. Nuestro objetivo es seguir innovando y encontrar nuevas formas de utilizar los datos para que nuestros clientes obtengan una ventaja competitiva en el mercado”, dice Jeremy Steele (Managing Director de Analytics FC).

“Se ofrece a la industria del fútbol una visión global del jugador para evaluar una posible incorporación y el retorno en la inversión de un jugador”, resalta Pere Guardiola, agente y hermano de Pep. En la misma línea se muestra Juan Mata, padre del ‘diablo rojo’: “Como intermediario de jugadores, me ofrece una herramienta para encontrar las mejores oportunidades profesionales para mis jugadores dentro de un entorno seguro y privado”.

Video thumbnail
El increíble control de Mata en un balón que caía del cieloTwitter

Futuro incierto

Toda esta corriente que vemos ahora con el ‘caso De Bruyne’ empezó con ‘Moneyball’. Está claro que el mundo del Big Data se ha hecho un hueco en el fútbol porque evidentemente ayuda, ahora se mide todo. Se cruzan datos hasta económicos, no sólo de rendimiento. El director deportivo tiene diferentes variantes con opciones que puede filtrar para encontrar lo que necesita. Es una gran ayuda y es lógico que se use, pero por otro lado también crece la visión de gente como Pablo Aimar que señala que ya vale de medir todo por los futbolistas no son robots. Se necesitan jugadores diferentes que decidan en momentos clave y eso se está perdiendo”, explica el agente Luis Carlos Fernández, de IS Sports.

Recuerdo que Pedro Blanco, una institución dentro del Sevilla y un crack en fútbol base, me dijo que se puede medir todo pero lo que todavía no existe es una máquina que mida el talento. Y tiene razón. De Bruyne ha justificado su renovación en base a unos datos, pero yo no me lo creo del todo. Se habrá apoyado en eso seguro, pero se ha ganado esa mejora porque es muy bueno y el City se lo puede pagar. El Big Data lo usamos todos, clubes, jugadores y agentes, pero al que más se le paga es al que hace cosas imaginativas que no se pueden medir con números“, añade alguien que no cree que la tendencia de funcionar sin agente vaya a prosperar. “No creo que vaya en aumento ni que crezca el número de padres que se dediquen a esto porque al final lo que hace fuerza para negociar es que la agencia tenga cuantos más futbolistas potentes. Habrá de todo, pero el modelo predominante será el de las agencias”, reflexiona.

El representante José Manuel Espejo secunda esa visión: “¿Por qué tantos jugadores insisten todavía en tener uno y por qué después de 40 años de profesión cada vez hay más? Porque los futbolistas los quieren. Si hay alguno que no desea tenerlo, creo que es porque no han encontrado el adecuado. Ellos deben estar concentrados en el fútbol cien por cien y es esencial que haya confianza entre los dos. El agente le da seguridad a nivel económico, maximiza la carrera del jugador porque tiene conocimiento de ese ámbito. El futbolista no conoce cómo funciona ese mercado y el agente sí. Él es el encargado de resolver los conflictos entre jugador y club”.

Video thumbnail
Pochettino: “Sergio Ramos se encontraría en el PSG un gran club”

Y en esa tarea de facilitar trabajo a clubes y jugadores aparecen los intermediarios, que se diferencian de los agentes “en que a nosotros nos llaman los clubes para una solución concreta como puede ser un extremo habilidoso menos de 25 años en vez de para firmar a un jugador concreto“, según explica el intermediario portugués Antonio Gomes Pereira.

Para él, esta figura es clave porque “ahorra 60 llamadas al día a un futbolista y mejora el proceso para clubes y futbolistas”. En su caso, si un equipo -su cliente- le pide un jugador concreto, activa su red de agentes para ofrecer varias soluciones a escoger por el demandante.

Video thumbnail
Los mejores goles de Zalazar

Todo queda en casa

Cuando el mundo de la representación echó a andar, en los inicios de los años 90, muchos futbolistas o deportistas confiaron estas labores en familiares sin que estos tuvieran una preparación adhoc para el puesto de trabajo. Algo que sigue ocurriendo en la actualidad. Maud Griezmann, hermana del Antoine, representa al azulgrana.

Jorge Messi hace lo propio con su hijo Leo. A Neymar le lleva los negocios su padre, a Juan la agencia de su padre y a Sergio Ramos la de su hermano René. El delantero Icardi está en manos de su pareja Wanda. Algo que ya le ocurrió a Güiza en el pasado con Nuria Bermúdez.

Video thumbnail
La fiesta francesa de Icardi y Wanda Nara con amigas en su piscina de lujo

“En el caso de Dani podría haberlo negociado yo perfectamente sin tener la licencia al ser su pareja, pero creo que mi formación como agente fue decisiva en los pasos que dimos y las cláusulas que incluimos en los contratos tanto nacionales como en el extranjero. Considero que la formación, junto con la experiencia, es muy importante en todos los campos de la vida. Nosotros éramos los primeros interesados en que las cosas salieran lo mejor posible. En su día también salieron muchos buitres y gente que sólo piensa en comisiones, pero también hay personas buenas, válidas, legales y muy trabajadores que se desviven por los jugadores que representan, intentando buscar siempre lo que mejor se adapte a ellos y sus necesidades deportivas y personales”, añade la agente FIFA, actualmente desligada del fútbol.

Para ella, que te represente un familiar sí resulta un punto a favor porque “al fin y al cabo, en nuestro caso, nadie mejor que yo conocía las necesidades del futbolista como profesional y como persona. El proyecto familiar sumaba al proyecto deportivo. Era la primera interesada en que las cosas salieran bien”. Aunque no siempre salen así, como en el caso de Özil cuyo comportamiento de su padre -que ejercía como su representante- imposibilitó su renovación por el Real Madrid: “No es perfecto, las negociaciones le vinieron grandes. No fue avaricia, le pedíamos lo que considerábamos justo y no nos lo dio. Ser testarudo con Florentino no es lo mejor”.

Video thumbnail
Las mejores jugadas de Ozil con el Arsenal

Como explica uno de los representantes más antiguos de nuestro país, “los clubes siempre prefieren negociar con un agente antes que con los padres, que lo dificultan todo”. La misma fuente señala cómo de copado está el mercado: “Hasta el lateral derecho suplente de un equipo alevín tiene agente”.

Así lo confirma el Informe FIFA sobre la actividad de los intermediarios en las transferencias internacionales 2020: a menor edad del futbolista, mayor es la probabilidad de que confíe en el apoyo de un tercero para definir su futuro profesional. Ahora De Bruyne y las nuevas plataformas han abierto otras vías, el tiempo dirá si realmente tienen penetración.

Fuente: marca.com

Me gusta esto:

Me gustaCargando…



Categorías:Actualidad

Etiquetas:fútbol internacional