El organismo está siendo sometido a una presión, sumado a la falta de respaldo político desde la Asamblea y el mismo Gobierno Central.

Nicanor Moscoso, presidente del Consejo de Expertos Electorales de Latinoamérica (CEELA), señaló que el Consejo Nacional Electoral (CNE), no tiene poder ni respaldo político para actuar, al punto que un juez de lo contencioso ha enviado un dictamen con el fin de destituir a cuatro de sus cinco miembros: “Esto sin duda ha traído irregularidades y nerviosismo de no saber qué pasará mañana”.

Señaló que el organismo electoral ha sido sometido a presiones que se evidenciaron desde el mismo momento que la Contraloría pidió la eliminación del registro electoral de cuatro organizaciones políticas, entre las cuales se encontraba el correísmo, so pena de destitución: “Pero cuando ya vieron a UNES dejaron esa situación y luego quisieron bloquear la inscripción del binomio Andrés Arauz- Carlos Rabascall, eso sentó un precedente nefasto”.

A criterio de Moscoso la actual administración del organismo es producto del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social Transitorio (CPCCS) liderada por Julio César Trujillo, que se encargó de colocar a cinco miembros que representan únicamente a dos organizaciones políticas y que además son anticorreístas: “De eso se trató, eso buscó el trujillato”.

“Antes eran siete miembros y pertenecían abiertamente a los siete partidos más votados, entonces no se tenía la situación de hoy”.

Aseguró que si el CNE tuviera poder político, hubiese solucionado el error de la impresión de papeletas con el dialogo puesto que no era de gran importancia la equivocación del logo de una organización política que no va a obtener un resultado significativo. Lo mismo sucede, dijo, con la inscripción de parlamentarios andinos por parte de Justicia Social: “Esa lista no llegará ni al 0.05 de votos y por ellos tal vez no se imprima esa papela lo cual nos perjudica la participación política de más del 95% de ecuatorianos”.