Municipios de Pasto e Ipiales repatriaron a 200 venezolanos que residían en Ecuador
Doscientos ciudadanos venezolanos que estaban atascados en las ciudades fronterizas de Ipiales y Pasto (Colombia), frente a Tulcán, fueron repatriados hacia su país, luego que las autoridades locales decidiero crear un corredor humanitario junto a Migración Colombia.
De este grupo, un gran porcentaje ingresó desde Ecuador irregularmente por trochas y ríos. Los migrantes cumplieron previamente una cuarentena de 14 días en albergues de las dos ciudades para acogerse a este beneficio.
Germán Chamorro, alcalde de Pasto, informó que los extranjeros fueron movilizados en buses previamente higienizados para garantizar el traslado y dotados con baños. Además se les entregó alimentos para que no salgan de las unidades.
Este sábado, pasadas las 14:00, llegaron a Arauca, en la frontera colombo-venezolana, donde fueron entregados a las autoridades venezolanas. Luis Fernando Villota, alcalde de Ipiales, comentó que 80 extranjeros salieron desde esa ciudad, previo un tamizaje epidemiológico.
Las autoridades sanitarias colombianas dijeron que estas personas trabajaban en Ecuador y que debido a la proliferación de la pandemia optaron por retornar a su territorio. En seis albergues de Ipiales todavía permanecen otros 300 venezolanos que pugnan por regresar a sus ciudades de origen.
Las dos municipalidades colombianas no han descartado nuevos despachos de personas. Mientras que militares de Ecuador y Colombia efectúan controles por aire y tierra para frenar el ingreso o salida irregular de personas.
En Tulcán, los organismos no gubernamentales mantienen a más de 220 ciudadanos de Venezuela en hoteles, pensiones y moteles, en una especie de aislamiento social o cuarentena.
Cristian Benavides, alcalde de Tulcán, anunció que se ha logrado un acuerdo con la cooperación internacional para crear un albergue que acogerá a quienes todavía deambulan en las calles. Ellos recibirán los servicios de alimentación y medicina. (I)