Profesores, estudiantes y personas ligadas a la Universidad de Los Andes, alcaldes del estado Mperida y habitantes de esa capital marcharon este martes en respaldo a la casa de estudios, en una protesta convocada por la Asociación de Profesores, el Sindicato de Profesionales y distintos movimientos estudiantiles, en rechazo al recorte del presupuesto asignado por el gobierno nacional a las universidades autónomas del país.

La manifestación comenzó en la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales, ubicada en el núcleo Liria, en la avenida Las Américas. Los participantes recorrieron calles y avenidas de la ciudad y llegaron hasta el edificio administrativo, en la avenida Don Tulio Febres Cordero.

Luis Loaiza Rincón, presidente de la Asociación de Profesores, dijo que el recorte presupuestario es un atropello para el buen desarrollo de las actividades, pues la asignación de 2,5 millardos de bolívares como parte del presupuesto para 2015 representa 37% de la cantidad solicitada. Afirmó que para equilibrar el presupuesto es necesario recortar cuatro meses de sueldos y salarios y seis meses de cestatickets, lo que implica que se coloque en peligro la garantía del salario para quienes trabajan en la universidad.

Dionis Dávila, secretario general del Sindicato de Profesionales, señaló: “El gobierno pretende mantener las universidades atadas de manos al reducir cada vez más el presupuesto, algo que limita el óptimo funcionamiento de los recintos”.

Liliana Guerrero, presidente de la Federación de Centros Universitarios, manifestó que se trata de un intento de cerrar la universidad, algo que no se puede, dijo, permitir. Agregó que los estudiantes lucharán por una universidad abierta, autónoma y de calidad. «Seguiremos ratificando día a día en nuestras acciones nuestro compromiso de lucha por la libertad y la democracia».

Gaby Arellano, dirigente estudiantil y candidata a la Federación de Centros Universitarios, rechazó la medida adoptada por el gobierno. Aseguró que quieren cerrar la casa de estudios e imponer un modelo político, algo que rechazan de forma contundente.