Cientos de ecuatorianos aún están varados en varios países y esperan una ayuda que les permita regresar.

De acuerdo con cifras del Gobierno son más de 5000 los compatriotas que buscan regresar al país y que no han podido hacerlo.

Entre ellos están cinco estudiantes que están becados en una universidad de Francia y que estan buscando la forma de regresar, pero afirman que no están en condiciones de hacerse cargo de los costos que tendrían que pagar después de arribar como los pasajes y la estadía en un hotel, algo obligatorio para los que están llegando desde el exterior.

Samara Muñoz es una de las ecuatorianas que está en Francia y busca cómo volver. Ella y otros estudiantes de la Universidad de Guayaquil arribaron al país europeo en septiembre de 2019 por un programa de intercambio para ser asistentes de español por siete meses en diferentes centros educativos. En el caso de ella está en Aviñón (sur de Francia).

Muñoz cuenta que su regreso estaba palaneado para la primera semana de mayo, peor que por la pandemia no están seguros de que se vaya a realizar cual lo planeado, razón por las que ella y varios compañeros se han contactado con las autoridades en el país, que le han dicho que con un avión bastaría para devolver a las personas que están en ese país a Ecuador.

Pero su mayor preocupación es que su contrato como asistentes de idiomas termina este abril y no saben qué puede pasar con ellos luego. Además de que entre las cosas que les han solicitado las autoridades está firmar un compromiso de pago para los boletos de avión y estadía del aislamiento obligatorio al llegar y afirman que no tienen los recursos para pagarlos y no quieren quedar endeudados tras arribar al país.

Lo mismo opina Víctor Delgado un compañero de Muñoz que está en la ciudad de Champigny Sur Marne (norte), no muy lejos de la capital, París.

«Los recursos que tenemos son mínimos y con las soluciones que nos dan no contamos con ellos, los vuelos humanitarios si son un poco caros y no quisiera tener una deuda así para el futuro sabiendo que se puede venir una crisis y no sabremos cómo pagarlo», dice Delgado, quien agrega que por ahora están encerrados desde la última semana de febrero en sus departamentos y salen solo para lo estrictamente necesario como ir a comprar alimentos y que están siguiendo las recomendaciones de las autoridades locales.

«La situación es grave: no es nuestro país, estamos lejos de nuestras familias, no tenemos recursos económicos y no tenemos una fecha de regreso. Necesitamos que habiliten un vuelo humanitario que salga desde Francia. Algunos estamos en contacto constante solo telefónico con nuestros profesores aquí en Francia, y estamos completamente solos en una habitación, dentro de un internado que quedó abandonado en cuanto los estudiantes regresaron a sus casas. Mientras que, nuestros familiares se encuentran preocupados y desesperados a la idea de que cualquiera de nosotros enfermemos en un país ajeno, convirtiendo un sueño en una pesadilla que cobre nuestras vidas», agrega Muñoz.

Delgado y Muñoz son parte un grupo de cinco estudiantes egresados de la carrera de pedagogía de los idiomas nacionaes y extranjeros de la Universidad de Guayaquil que obtuvieron este intercambio en un concuros auspiciado por la Embajada de Francia en Ecuador.

Ambos piden la ayuda del Gobierno, de las autoridades de su universidad para regresar a su país con un plan más factible para «el bolsillo de un universitario». (I)