El 2014 será para el olvido en el Deportivo Quito. Tras soportar durante el año una grave crisis económica, que por poco provoca la pérdida de la categoría del club, hoy, a falta de cuatro fechas para el final del torneo, aún afronta dos amenazas: evitar el descenso y eludir las intimidaciones de los hinchas.
En ese contexto, el cuadro de la Plaza del Teatro visitará mañana a un difícil Barcelona, que, en cambio, tratará de sumar para ganar la etapa.