A pesar de que los derechos humanos son interdependientes e indivisibles, el gobierno se ha hecho de un discurso anacrónico que coloca los derechos sociales por encima de los individualesA pesar de que los derechos humanos son interdependientes eindivisibles, el gobierno se ha hecho de un discurso anacrónico que coloca losderechos sociales por encima de los individuales. Se ufana de losreconocimientos obtenidos por logros muy discutibles, como la supuestaerradicación del analfabetismo y asegura que ha cumplido con creces la mayoríade los Objetivos del Milenio. La crisis sanitaria, el deterioro de losplanteles y el déficit de viviendas emergen como realidades más contundentesque cualquier buena intención. El Observatorio Venezolano de ConflictividadSocial ha determinado que la violación de los derechos sociales constituye elprincipal motivo del descontento. Al ciudadano solo le queda la opción deprotestar, pues el Tribunal Supremo de Justicia, mediante una de sus máscontroversiales sentencias, la 1.002 dictada en 2004, negó la posibilidad dereclamar ante los tribunales los derechos sociales. El TSJ determinó que laspolíticas públicas no están sujetas a control judicial, sino político.