La reconocida periodista Carmen Aristegui comenzó esta mañana su programa anunciando su postura sobre el despido de sus colaboradores por parte de MVS.

Recordemos que el día de ayer despidieron a los periodistas Daniel Lizárraga e Irving Huerta (quienes expusieron los casos de la Casa Blanca del presidente y la casa de Malinalco del secretario de Hacienda, Luis Videgaray) por haber hecho una alianza con la plataforma MéxicoLeaks sin discutirlo antes con la empresa, lo cual ha sido percibido como una reacción desmedida (porque, además del despido, se desplegó una campaña por parte de MVS en contra de sus empleados).   

Aristegui admitió al principio del programa que no se le había notificado del despido de su equipo de trabajo (ella es la directora del programa). Además afirmó que un movimiento así es un gran golpe a la labor editorial de su equipo.

También afirmó que habló con ambos periodistas y decidieron que Carmen NO saldrá del aire para poder denunciar y darle voz a aquellos que fueron despedidos. Carmen Anunció que seguirá trabajando…pero con sus colaboradores Daniel Lizárraga e Irving Huerta. 

La Casa Blanca fue el inicio de una serie de investigaciones, recordemos que The Wall Street Journal expuso otra propiedad en Ixtapan.

Todo esto trajo un gran enojo entre la población:

David Sosa Plata, ombudsman de MVS Noticias, dijo en el programa de hoy que platicará con los directivos y con los periodistas despedidos para saber la versión de ambas partes.

En relación con los desplegados y spots emitidos por MVS Radio, la defensoría dirigida por el ombudsman mandó preguntas a la periodista y a la dirección de la empresa. Al otro día no había tenido respuesta de ambas partes, no obstante por el contenido de los spots y lo declarado por la periodista salió a relucir que era un proceso de atribuciones (es decir, era un conflicto interno, no era algo para ser ventilado).

El ombudsman dijo que corroboró la manera en que aparecía la participación del equipo de Carmen y noto que no aparecía el logo de la empresa y que sólo decía «La Unidad Aristegui/Equipo MVS» (o sea no es el nombre de la empresa), lo cual hace suponer que la participación era individual (lo cual NO rompe con los protocolos).

Según la periodista, la campaña contra el equipo de Aristegui fue desproporcionada, pues hubo spots en la radio, se hizo que se leyera la postura de MVS por cada conductor de cada programa de la empresa y se hicieron desplegados

«Abuso de confianza» y hasta «engaño» son expresiones que se realizaron de manera exagerada por parte de MVS y dañan la honra y credibilidad de los periodistas (y de Aristegui por extensión).

Según el ombudsman, lo que hizo MVS fue un mecanismo inédito por parte de una empresa en contra de sus empleados.

La Ropa Sucia se (debe) lavar en casa

Cuando en la redacción de esta página nos enteramos de este hecho, nos pareció algo muy sorpresivo. Es la primera vez que una empresa expone su propia credibilidad para realizar una campaña en contra de uno de sus empleado, la pregunta es ¿por qué? ¿Por qué dañar la imagen de sus colaboradores y exponerse a uno mismo al público sobre un problema que es meramente interno?

Si hubo un problema protocolar ¿no debería arreglarse internamente? o ¿cuál es el objetivo de ventilar un altercado así?

Lean nuestra nota: ¿A dónde se dirige el conflicto entre Carmen Aristegui y MVS?

Protesta afuera de MVS, ayer.

Carmen seguirá trabajando… pero exige recontratación

El posicionamiento de la periodista fue el siguiente:

“Continuamos al aire, reafirmando las condiciones de trabajo que hemos tenido estos 6 años de labor independiente y responsable para con nuestras audiencias”

“Ayer planteamos que seguiríamos trabajando, que no pelearíamos por esta circunstancia y que segaríamos al aire… apostamos por mantener este espacio”

“ (pero) El planteamiento (de ayer) tuvo como respuesta el despido de Daniel Lizárraga e Irving Huerta»

“Un tema de una dimensión x se magnificó para crear una campaña desmedida”

“MVS recurrió a la estridencia mediática…. a despedir a dos periodistas que en lugar de despedirlos deberíamos premiarlos, pues han dado a la sociedad mexicana un trabajo o de primer nivel, valiente, responsable y que debería ser reconocido y no castigado”

“Despedir unilateralmente sin mi conocimiento a dos colaboradores es algo que rechazo categóricamente y que contraviene el acuerdo fundamenta y de carácter, incluso, contractual que teníamos con MVS”

Para Aristegui, lo que está sucediendo parece que es un mecanismo de presión para que ella y su equipo rompa con MVS… pero ella no lo hará:

«Seguiremos al aire…pero con Irving y Daniel aquí, nuestro llamado es a que los reinstalen»

El ombudsman pidió a MVS y al equipo de Carmen que evite las descalificaciones, que arreglen lo que tengan que arreglar y que den solución pronta a lo que deban dar solución y, lo más importante, que sigan produciendo: que den a conocer a la sociedad mexicana lo que necesita conocer.

Carmen ha sido muy clara en su posición:

«Lo que le digo a MVS es que la reinstalación de Daniel Lizárraga e Irving Huerta es una condición irrenunciable para seguir adelante»

«Hay condiciones aún para que la reinstalación se dé de manera civilizada, en términos respetuosos, pues la Unidad de Investigaciones especiales es fundamental para nuestros procesos informativos y su ausencia daña a un equipo de trabajo»

“El llamado es que se revierta una decisión que se da en un contexto muy inquietante»

Carmen Aristegui aclara que lo que pide, no es nada exagerado:

«Es una petición absolutamente comprensible y una condición irrenunciable»

«Este es el posicionamiento nuestro y espero sinceramente una respuesta positiva, que esto no sea lo que parece ser. Pronto tendremos noticias al respecto»

Lo que dice la periodista es preocupante, porque de ser así, parece que el ambiente del país es de un autoritarismo cada vez más grande…pero para ella esto todavía se puede cambiar:

«No es tiempo de sometimientos, no es tiempo de aceptar regresiones, no es tiempo para que la sociedad mexicana que ha logrado tantos avances en materia de libertad de expresión»

«No parece una aroma, sino un vendaval autoritario, de regresiones»

El mapa político es adverso, con temas como el nombramiento de Medina Mora en la Suprema Corte, la anunciación de una «verdad histórica» por el caso de los desaparecidos de Ayotzinapa, el nombramiento del titular de la Secretaría de la Función Pública, el espaldarazo de Peña a Rosario Robles ante los escándalos de los programas de la Sedesol, entre muchos otros casos que han vulnerado a nuestro Estado, que han mostrado una actitud del nuevo PRI que no parece de cambio sino de volver a viejas estructuras, la mala dirección ante ciertas crisis políticas, económicas y sociales… ¿Hacia dónde nos dirigimos con todo esto? ¿qué es lo que está detrás d

Para Carmen, este ambiente político es ya intolerable:

«Es algo que no podemos aceptar»

«Esta batalla, no lo dude nadie, es una batalla por nuestra libertad, por el derechos expresarnos, por el derechos saber, es en defensa de los periodistas y en defensa de la sociedad»

Carmen contextualiza el lugar que tiene su mensaje en nuestro país:

«Nunca sobra recordar a los grandes maestros, a las grandes batallas, tener en mente y corazón a figuras emblemáticas… Es un mensaje a la memoria de Miguel Ángel Granados Chapa, de Julio Scherer, de ellos que ya no están aquí, pero que están en nuestra memoria»

Pedir un alto al autoritarismo es un mensaje por parte de los que estamos aquí, que recuerda a los que lo combatieron en el pasado, y que servirá para aquellos que vivirán en este país en un futuro que queremos que sea mejor.

Aristegui cierra su comentario diciendo:

«Por los que se fueron, por los que vienen y por los que están»

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