Avances en la robótica de cuidado personal para personas con discapacidades
Los robots diseñados para ayudar a personas con discapacidades están iniciando su transición desde la ciencia-ficción a la realidad cotidiana. Un ejemplo de ello lo tenemos en la iniciativa de los Institutos Nacionales estadounidenses de Salud (NIH), que ahora están financiando el desarrollo de robots de este tipo, entre los que figuran algunos para ayudar a las personas con problemas de visión a identificar y coger objetos, así como otros pensados para incrementar la movilidad de las personas mayores, todos ellos diseñados para funcionar en estrecho contacto con humanos e interactuando con el individuo.
Un caminador robótico para adultos, provisto de patas móviles, podría ayudar a los ancianos a moverse más fácilmente y mantener su independencia. A medida que las personas envejecen, disminuye su capacidad de caminar sin asistencia, lo que lleva a una reducción en la actividad física y en la calidad de vida. Para quedarse en casa en vez de mudarse a una residencia geriátrica, los ancianos con problemas de movilidad necesitan a menudo modificaciones caras en sus viviendas, como sustituir escalones con rampas o instalar salvaescaleras. El objetivo de este caminador robótico es desarrollar un robot de cuatro patas que mejore la movilidad de su usuario, de manera que los ancianos puedan permanecer físicamente activos y disfrutar de una vida más sana, con una menor dependencia de la asistencia de cuidadores o de caras renovaciones en sus hogares.