Ante ríos de personas, la oposición lanza un ultimátum a Maduro

Ante ríos de personas, la oposición lanza un ultimátum a Maduro

Se convocó a una huelga general este viernes. Diosdado Cabello dijo que militares tomarán empresas.

Ante ríos de personas, la oposición lanza un ultimátum a Maduro. Solía haber pitos y canciones en las marchas opositoras, algo de ese ánimo festivo venezolano a pesar de la vicisitud de turno, pero esta vez no.

La caminata de la ‘Toma de Venezuela’ fue –al menos en Caracas– silenciosa y rabiosa a la vez, con miles de personas rumiando la necesidad de hacer respetar su derecho a votar tras la suspensión de la recolección de firmas para solicitar el referéndum revocatorio del presidente Nicolás Maduro.

Una estampa que se repitió en Maracay, Valencia, Barquisimeto, Maracaibo, Mérida, San Cristóbal, Barinas, Cumaná, Ciudad Bolívar y en Isla Margarita y pintó el escenario sobre el que la oposición anunció que se volcará a las calles para exigir la votación y, con ello, “retomar el hilo constitucional”.

La jugada opositora es atrevida, pues busca romper varios tabúes de la política venezolana al llamar este viernes a una huelga general del país de 12 horas, y para el venidero jueves 3 de noviembre a una marcha masiva de protesta hacia el Palacio de Miraflores, sede del Gobierno.

En respuesta, el número dos del chavismo, Diosdado Cabello, advirtió este miércoles que las Fuerzas Armadas y los trabajadores venezolanos tomarán las empresas que acojan el llamado a huelga general.
«Lo conversé con el presidente, empresa que se pare, empresa tomada por los trabajadores y la Fuerza Armada», aseguró Cabello, diputado y presidente del gobernante partido socialistas.

La última marcha hacia Miraflores ocurrió el 11 de abril del 2002 y en su fragor, exigiendo la salida del entonces presidente Hugo Chávez, se enfrentaron fuerzas de la oposición, el chavismo y cuerpos policiales dejando un saldo de 19 muertos.

El desenlace violento de esa marcha precedió el golpe de Estado que sacó del poder a Chávez durante casi dos días que, a la postre, ocasionó purgas en las filas militares e institucionales del país.

Desde entonces no se permiten protestas frente al palacio de gobierno.

Para evitar comparaciones, esta vez la dirigencia opositora dejó claro que lo que busca es presionar por el desenlace electoral.

“Le pedimos al Gobierno (…) que se fije en las próximas horas cuando vamos a poner nuestra huella para seguir con el revocatorio (…), le estamos dando plazo al Gobierno para que restituya el orden constitucional o si no se lo exigiremos el 3 de noviembre en Miraflores”, dijo a la multitud el gobernador Henrique Capriles.

“Yo le digo al cobarde que está en Miraflores (…) que el 3 de noviembre todo el pueblo venezolano se viene para Caracas porque vamos pa’ ‘Miraflores”, advirtió Capriles.

La actuación opositora estará coordinada con decisiones que se fraguan en la Asamblea Nacional y que presagian una escalada en el pulso entre el Gobierno y la oposición.

Tanto Capriles como el presidente del parlamento, Henry Ramos Allup, anunciaron una agenda de presión que comienza este jueves con el debate para declarar la responsabilidad política del presidente Nicolás Maduro en la crisis venezolana y lo que consideran ha sido su actuación de espaldas a la Constitución.

“Hemos comenzado un proceso para declarar la responsabilidad política de ese vago que tenemos en Miraflores”, dijo Ramos Allup.

Para el viernes se convocó a una huelga general nacional de 12 horas, como preludio de la semana que viene en la que el martes se espera que la Asamblea acuerde la “responsabilidad política” del Presidente y su “abandono del cargo” para, el jueves 3 de enero, “ir a Miraflores y entregarle a Maduro el veredicto popular”, precisó Ramos Allup.

Por su parte, Maduro instaló el Consejo de Defensa de la Nación y lo declaró en sesión permanente “para desactivar el golpe parlamentario” que, según él, adelanta la Asamblea.

Frente a una multitud de sus seguidores –estos sí apostados frente al Palacio de Miraflores y buena parte de la avenida Urdaneta, aunque en medida muy inferior a las autopistas rebosadas por los opositores– el Presidente reiteró que su gobierno mantiene las puertas abiertas al conversar para “superar la coyuntura” y “lograr la paz”.

En su discurso reiteró la “irresponsabilidad” de la oposición venezolana tras haber refrendado el inicio del diálogo y retirarse del mismo horas después de anunciado, pero ni una sola vez mencionó el referéndum revocatorio.

El Presidente tampoco se refirió a las acciones que tomará ante los anuncios hechos por la oposición, pero finalizadas las marchas se redobló la seguridad alrededor del palacio de Gobierno e incluso en los límites del municipio capitalino de Libertador, donde pudo verse fuerte despliegue de guardias nacionales y funcionarios de la Policía Nacional.

El exalcalde de ese municipio y hombre de confianza del Gobierno, Freddy Bernal, convocó a los militantes del partido oficialista a hacer vigilias en Miraflores para proteger a Maduro.

Muere agente policial en medio de disturbios

José Alejandro Molina, oficial de la policía del estado Miranda (Polimiranda), murió el miércoles tras recibir un disparo en el abdomen durante disturbios registrados en el sector de San Antonio de Los Santos, cerca de Caracas.

En los mismos hechos, otro oficial del cuerpo policial recibió un tiro en el brazo.

La muerte de Molina se dio en medio de una jornada en la que hubo, al menos, 80 detenidos y 20 heridos tras las marchas opositoras en las principales ciudades de Venezuela contra el gobierno de Nicolás Maduro.

La ONG Foro Penal Venezolano dijo, en Twitter, que los arrestos se produjeron en siete de los 24 estados del país, la mayoría en Nueva Esparta y Sucre (noreste), mientras que su director, Alfredo Romero, señaló que entre la veintena de heridos tres fueron de bala en Maracaibo, capital del estado Zulia (noroeste). “Balance de detenidos: Guárico: 5. Nueva Esparta: 32. Táchira: 7. Barinas: 4. Miranda: 6. Sucre: 21. Lara: 5”, publicó Foro Penal Venezolano en su cuenta en la red social.

La ONG reportó otras 60 personas detenidas en Aragua.

El diario ‘El Nacional’, con información del mismo Romero, detalló que en el estado Zulia tres manifestantes (Yuranni Durán, de 21 años; Pedro Medina, de 19, y Jáider Domínguez) fueron heridos con arma de fuego.

Medina recibió un impacto de bala en el abdomen, fue intervenido quirúrgicamente y, hasta el cierre de esta edición, se encontraba en condición estable.

Según Romero, las víctimas fueron remitidas al Hospital General del Sur en Maracaibo.

El dirigente Henrique Capriles responsabilizó a Maduro por los heridos registrados. “¡Tenemos varios heridos en varios estados por órdenes de Maduro!”, dijo Capriles en su cuenta de Twitter.

Ft: eltiempo