Ahora la alcaldía de Quito exige el pago de una multa del uno por mil, del monto global de la obra, lo que corresponde a 20 kilómetros de vía que tiene Pisulí.

Punto noticias.-Más de 38 años de lucha comunitaria no han sido suficientes para aprobar los ejes viales de todas las calles de Pisulí, un barrio del noroccidente de Quito. Este problema impide levantar la hipoteca por obras que pesa a todo este vecindario, con lo cual no pueden acceder a créditos o mejoramiento de vivienda los moradores.

Pisulí es un barrio del noroccidente de Quito, el cual tiene alrededor de 38 años de creación y cuenta con 1.880 socios. Pichincha en tu Barrio, estuvo con la comunidad de este sector para conocer sus necesidades y problemas.

Conversamos con los dirigentes de este sector y nos comentaron que el problema más grande que tienen es el levantamiento de la hipoteca de sus lotes de terreno ya que eso les impide hacer préstamos, o mejoramiento de sus viviendas.

El municipio con el plan “Regula tu Barrio” no ha logrado cumplir con ese objetivo en Pisulí, ya que los ejes viales de todas las calles en este barrio no están aprobadas. Esto impide que el Municipio libere la hipoteca de los terrenos en este sector, ya que el barrio no se registra como regularizado.

Celso Mesa es el presidente de la Asociación de Barrios del Noroccidente de Quito (ASBACON), comenta que uno de los principales problemas es el vial. Desde el Barrio San José de Cangahua que tiene una vía muy angosta y pasando por la Roldós hacia Pisulí “es una desgracia como se encuentran las vías”, dice.

ASBACON tiene asociados a 26 barrios de los 60 existentes en el sector. Señala Mesa, que el plan Regula tu Barrio no ha funcionada en este sector, no se han regularizado estos barrios y muchos de ellos aún les falta los servicios básicos.

Según don Celso hubo reuniones con el alcalde de Quito, Jorge Yunda, para programar la ejecución de las obras, que lamentablemente no se cumplieron a raíz de la pandemia. Pero “así como realizan el arreglo en otros lugares queremos el trato digno para los barrios del noroccidente”, insiste.

El presidente de Pisulí, Segundo Campoverde, afirma que no se concluyó las obras. En la administración anterior de Mauricio Rodas, se hizo el arreglo de varias calles en el sector pero el Municipio argumenta que estas obras no están entregadas, porque no fueron hechas por la comunidad.

Ahora la alcaldía de Quito exige el pago de una multa del uno por mil, del monto global de la obra, lo que corresponde a 20 kilómetros de vía que tiene Pisulí, que en dinero son USD 2.8 millones.

Esta situación ha devenido en otro problema, que no permite liberar los terrenos de las hipotecas, ya que no se han realizado las obras, de esta manera, los propietarios no pueden acceder a realizar créditos en el sistema financiero, no pueden ni mejorar las condiciones de sus propias viviendas, ya que no les autorizan, porque al no estar aprobados los ejes viales del barrio, no tienen el IRM y por eso no están regularizados.

La comunidad exige la aprobación de la reforma de la ordenanza de los desplazamientos de los ejes viales, para que organizada la comunidad puedan terminar las obras. Cuando no tienen los ejes viales no sale el IRM en el sistema municipal, lo que impide realizar las mejoras correspondientes.

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