Zayn Malik, excomponente ya de One Direction, quería llevar una vida normal y ha empezado a poner en práctica su idea de lo que esto supone. Parece que está buscando nueva residencia, ya se le ha visto visitando una casa en Hertfordshire con su novia Perrie Edwards que tiene siete habitaciones y un valor de 2 millones de libras (casi 2,8 millones de euros). En esta visita les acompañaba además Trisha, la madre de Zayn.

Pero es que no sólo está dispuesto a cambiar su lugar de residencia sino también su estado civil. Se dice que esta búsqueda va unida a los planes de boda que tiene con su novia, un compromiso que se remonta a 2013, pero que nunca ha fijado fecha debido a las obligaciones de ambos con sus respectivos grupos musicales (ella forma parte de Little Mix). Ahora sería el momento oportuno dado que Zayn ha dejado el conjunto y por tanto la ajetreada agenda que le tenía viajando por medio mundo. Según algunas fuentes cercanas a la pareja, se casarán tan pronto como puedan planear el gran día con el que siempre han soñado.

Comenzaría así el artista una vida nueva junto a Perrie, que parece no haberse creído los rumores que apuntaban a una infidelidad de su novio en Tailandia durante la gira del conjunto. El cantante comentó que Perrie le apoya en sus decisiones, pero quién sabe si pronto tendrá que ser él quien le muestre a ella su confianza. Algunos fans han apuntado a que Perrie ha sido la causa del abandono del artista, la llaman la nueva Yoko Ono, aunque por ahora Zayn no se ha enfrentado a estas críticas. Tampoco ha respondido a aquellos que apuntan a que su abandono se debe al proyecto de comenzar una carrera en solitario. ¿Qué opinarán los directioners si esto sucede?

Lo único que ha hecho estos días Zayn es colgar algunas imágenes en su perfil de Instagram en las que recuerda a sus compañeros y califica su andadura con la banda como genial. One Direction por su parte ha tenido que hacer suyoy el dicho de «el espectáculo debe continuar» y siguen dando conciertos mientras preparan ya un nuevo trabajo. Un disco que será sólo a cuatro voces.